Tres goles de cabeza y la costumbre de ganar...

Para sacarse el sombrero

  • Unión le puso un cierre brillante a su notable campaña y le ganó por tercera vez consecutiva, en Paraná, a Patronato. El plantel fue recibido por una multitud, prolongando el festejo hasta altas horas de la madrugada. En la segunda rueda, el equipo de Madelón jugó 10 partidos, ganó 9 y empató sólo 1. Espectacular.
Para sacarse el sombrero

Los que pusieron el broche

Estos fueron los 11 que salieron anoche a ganarle a Patronato. Parados: Martínez, Avendaño, Sánchez, Sandona, Cardozo y Nereo Fernández. Agachados: Fabro, Triverio, Montero, Malcorra y Gamba.

Foto: Gentileza El Diario de Paraná

 

Enrique Cruz (h)

(Enviado Especial a Paraná)

Es un equipo serio el de Unión y tiene una ambición sin límites. Se acostumbró hace rato a ganar y no para. Metió 9 victorias y un empate en diez partidos, cosa muy difícil de conseguir en un fútbol competitivo y bastante ajeno a la lógica, como es el argentino. Arrasó con todo este equipo. Y si para muestra bastaba un botón, anoche Madelón metió cinco cambios y la cosa funcionó igual. Sólido, efectivo, muy firme, muy serio, muy comprometido. Una “pinturita” todo lo que se hizo. Y es una reivindicación para muchos. Empezando por el presidente Spahn, de quién me cuentan que fue clave para converger en perfiles y nombres para armar el equipo junto al técnico.

Recuerdo la coincidencia con el técnico en el diagnóstico que hizo cuando empezó a armar el plantel. Lo había dirigido seis meses y se dio cuenta de dos cosas: faltaban juego y goles, sobre todo esto último. Se había ido Palacios (el único delantero rescatable del torneo anterior), también Salinas (no funcionó), Jara (apenas llegó) y apartó a Magnín y Altamirano. Armó una delantera nueva. Trajó a Guerra, Gamba y Triverio, que le dieron, entre los tres, 21 goles. Notable. Y para darle fútbol al equipo, trajo a Malcorra y a Fabro, insertó a un Rivas que fue un jugador clave para que el equipo tenga ese juego que se le reclamaba, más el aporte de Montero, uno de los “repatriados” junto a Nereo Fernández y Barisone.

Unión terminó con un funcionamiento aceitado y acostumbrándose a ganar. Asumió responsabilidades de una manera poco común para el fútbol argentino, en donde parece que todos se relajan cuando el objetivo llega. Unión ascendió y después de hacerlo, ganó dos partidos y empató uno. Brillante. Un verdadero “criminal de resultados”. No tuvo compasión, ni siquiera de este Patronato plagado de cuestionamientos e invadido por un fracaso del que se tendrá que recuperar rápidamente porque se le viene —máxime si asciende Atlético Paraná— una temporada dura con más equipos de la provincia en el ascenso.

Anoche le dio la chance a Sandona, pero explicó que ni Zurbriggen ni Barisone iban a estar porque podían recibir una amarilla y quedarse sin jugar el primer partido del torneo de Primera, algo que le ocurirrá a Brítez porque llegó a diez amarillas y recibió dos fechas de suspensión. No está mal que aparezcan los pibes y por eso se entiende también que haya hecho debutar a Manuel De Iriondo y que haya jugado el sunchalense Soldano, pero si Zurbriggen y Barisone no hubiesen corrido peligro de quedarse afuera del debut en Primera, quizás también jugaban este partido. Compromiso, seriedad, responsabilidad, profesionalismo. Todo lo que tantas veces se criticó de procesos anteriores equivocados, esta vez se transformó en elogios y virtudes. Bienvenido sea.

Este es el contexto en el que Unión jugó anoche. Tres goles de cabeza en jugadas de pelota quieta hizo el equipo de Madelón, convirtiéndose, posiblemente, en el equipo más efectivo en ese rubro en todo el fútbol argentino. Hay que contar la cantidad de goles que por esa vía llegaron. Zurbriggen ante Santamarina, Guerra en Tucumán, el del triunfo en Misiones... ¿Cuántos puntos tiene Unión gracias a ese trabajo excelente en las jugadas de pelota quieta?, muchísimos. Y eso es trabajo, no es casualidad. Se necesitan buenos ejecutantes de centros y buenos cabeceadores, es verdad. Pero, ¿cuántos equipos lo tienen y no hacen los goles que convierte Unión?

A eso se le sumó el orden que jamás se abandonó, la mayor velocidad y confianza para anticipar y para ejercer esa presión alta que Unión transformó muchas veces en asfixiante. Bien Martínez, bien Triverio, buenos pasajes de Malcorra y Fabro más una actuación notable de Sánchez y también del Pata Avendaño. Y acá me detengo un momento: el Pata no es un pibe y en este torneo jugó sólo dos partidos como titular. Sin embargo, anduvo muy bien en los dos, haciendo dupla con Barisone y jugando de “6” ante Huracán, y anoche, pero jugando de “2” ante Patronato. El Pata fue otro de los tantos ejemplos de compromiso y seriedad de este grupo.

¿Qué se puede decir del partido?, que lo ganó muy bien, que apenas tuvo algún sobresalto después del descuento de Patronato y que si no hubiese sido por el crecimiento de Boggino en el segundo tiempo (extremadamente lento en el primero pero expeditivo en el complemento), se podía ganar por una mayor diferencia.

Unión no lo tomó como una obligación reglamentaria al partido. Por eso quisieron concentrar cuando estaba la idea —aprobada por la dirigencia— de no hacerlo. Y salieron a ganar, como debe ser siempre. Y lo hicieron, como lo repitieron siempre en esta segunda rueda que quedará en el recuerdo perdurable de ese hincha que, agradecido, emocionado y fielmente interpretado por este plantel, se fue a la salida del Túnel, a la ruta, a la Fuente de la Cordialidad y a Bulevar, a esperar la llegada de los jugadores, desatando otra gran fiesta inolvidable para una campaña inolvidable.

Para sacarse el sombrero

Unión lo ganó a pura cabeza

El Pata Avendaño se trepa a Sánchez en el festejo del primer gol. Después, el mismo Avendaño y Triverio, también de cabeza, le dieron los otros dos tantos al equipo de Madelón en la feliz despedida. Como fondo, los dirigentes, allegados y jugadores del plantel que viajaron a la vecina orilla. Foto: Gentileza El Diario de Paraná

síntesis

Patronato 1

Unión 3

Cancha: Patronato.

Arbitro: Juan Pablo Pompei.

Patronato: Bértoli; Caire, Boggino, Quintana y Diego Martínez; Gutiérrez, Brum, Pacco y Canuto; Arraya y Quiroga. D.T.: Marcelo Fuentes.

Unión: Nereo Fernández; Sandona, Avendaño, Sánchez y Cardozo; Fabro, Montero, Mauricio Martínez y Malcorra; Triverio y Gamba. D.T.: Leonardo Madelón.

Goles: en el primer tiempo, a los 22 m Sánchez (U). En el complemento, a los 31 m Avendaño (U), a los 33 m Brum (P) y a los 45 m Triverio (U).

Cambios: en el segundo tiempo, a los 5 m Hollmann (P) por Quintana; a los 14m Soldano (U) por Gamba; a los 17 m Leonardo Acosta (P) por Gutiérrez; a los 27 m Orfano (P) por Canuto; a los 29 m Manuel De Iriondo (U) por Montero y a los 35 m Caballero (P) por Malcorra.

68

Por ciento

  • Fue la eficacia de Unión en este campeonato de la B Nacional. Hizo 13 puntos en la primera rueda y 28 en una segunda ronda espectacular.
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Como con un “guante”. Ignacio Malcorra mostró sus aptitudes para meterle centros a la cabeza de sus compañeros. Su ejecución en el gol de Sánchez fue perfecta. En la foto, disputa la pelota con Roberto Brum, un nombre que en su momento se mencionó por la avenida. Foto: Gentileza El Diario de Paraná

Bajo la lupa

NEREO FERNÁNDEZ (6).

- Siempre atento, bien de arriba y resolviendo casi siempre sin problemas en los remates desde afuera.

SANDONA (5).

- Empezó algo nervioso, se fue afirmando y nunca se complicó. No tuvo miramientos si debió ser expeditivo para sacar la pelota.

AVENDAÑO (7).

- El travesaño le negó un gol en el primer tiempo, pero tuvo su revancha en el segundo para “doblarle” las manos a Bértoli. Buen partido.

SÁNCHEZ (8).

- Hizo un gol, sacó todo de arriba y de abajo, estuvo siempre bien ubicado y concentrado, demostró una vez más que es una de las figuras de este equipo.

CARDOZO (5).

- Mostró algunas cosas interesantes en el manejo de la pelota y trató de no complicarse en la marca.

FABRO (6).

- Arrancó muy bien y después le tomaron la mano. Le metió un centro perfecto a Avendaño en su gol. Estuvo cerca en un tiro libre.

MARTÍNEZ (6).

- Ha crecido en todos los rubros, pero tiene un orden propio de un jugador con mucha experiencia y no de un joven como es. Aprendió muchos secretos del puesto.

MONTERO (5).

- Corrió mucho pero le faltó precisión a la hora del juego. Jugó de doble cinco al lado de Martínez.

MALCORRA (6).

- Empezó bien y de a poco se fue quedando un poco más contenido. De todos modos, aportó lo suyo en el manejo de la pelota y la buena pegada.

GAMBA (5).

- Muy veloz y llevando complicaciones en el primer tiempo ante una defensa naturalmente lenta. En el segundo tiempo se le advirtieron problemas físicos a raíz de una patada y luego salió.

TRIVERIO (6).

- Fue de menor a mayor, estuvo mucho más activo y complicando en el segundo tiempo hasta que en el final pudo meter un gol.

SOLDANO (5).

- Las corrió todas pero no siempre pudo ganar. Se encontró con una muralla llamada Boggino. Necesita tiempo y maduración.

DE IRIONDO.

- Fue su debut, entró de “5”, corrió bastante pero es prematuro para sacar conclusiones.

CABALLERO.

- Madelón lo puso por izquierda para que controle las subidas de Caire en el final del partido.