Allons enfants de la Patrie

Francia impulsa el regreso del servicio civil obligatorio como una manera de “soldar el pacto republicano” autor de sus valores. ¿Qué haremos los argentinos?

Federico Aguer

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Los atentados de Charlie Hebdo pusieron sobre el tapete la necesidad de un debate serio respecto de muchas cosas, sobre todo de la necesidad de fomentar desde el Estado una mayor actitud cívica por parte de los jóvenes, futuros conductores de la Nación.

Vale la pena aclarar que la propuesta del presidente socialista François Hollande no implicará un regreso al servicio militar obligatorio, (suprimido en Francia y en Argentina a mediados de los 90), sino una ampliación del servicio civil optativo.

Allí, cualquier joven de entre 16 y 25 años puede postularse para brindar algún servicio en asociaciones sin fines de lucro durante un período que va de 10 meses a dos años. Las tareas que cumplen estos jóvenes pueden ser de acompañamiento a personas mayores o enfermas, apoyo escolar, campañas de educación para la salud, valorización de la memoria histórica de una región, etc. Además de tener cubiertos ciertos gastos, reciben una mensualidad que actualmente es de 573 euros.

Según los medios galos, la idea de volver obligatorio el servicio cívico cuenta con un amplio consenso. De hecho, ocho de cada diez franceses consideran que podría mejorar la cohesión nacional y reforzaría el sentimiento de pertenencia al país.

En Argentina, donde el reclamo del retorno de un servicio militar se hizo escuchar por algunos sectores, tan melancólico como inviable, desde su disolución a mediados de los 90, esta tarea es desempeñada actualmente por muchas ONG’s, donde los ateneos ruralistas cumplen un papel muy importante.

Hoy, el país que inventó la República tal como la conocemos, nos invita a replantear el compromiso necesario para mantener viva la valoración de este sistema. En momentos en que la conmoción nos golpea en lo más íntimo, tal vez vuelva a ser conveniente mirar qué hacen los franceses.