Allanamientos y cruces telefónicos de funcionarios

Pollicita requirió pruebas

Las 5 mil horas de escuchas telefónicas que dejó Alberto Nisman podrían aportar más de lo que ya dejaron revelar.

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Cristina Fernández inauguró un anfiteatro en El Calafate. No habló de su imputación; se quedará allí hasta su cumpleaños, un día después de la marcha. Foto: Presidencia de la Nación/EFE

 

De la redacción de El Litoral

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Gerardo Pollicita dispuso medio centenar de medidas para investigar la denuncia del acto criminal de encubrimiento a los iraníes imputados en la voladura de la Amia. Las medidas de prueba requeridas por el fiscal incluyen allanamientos, declaraciones testimoniales y cruces de llamadas de los acusados en las fechas en que se registraron las escuchas presentadas por Alberto Nisman.

Pollicita pidió además revisar el registro de visitas de la Casa Rosada y hacer un análisis de las celdas de las antenas de celulares para determinar dónde se encontraban los imputados mientras realizaban sus llamadas.

Las medidas parecen apuntadas a ratificar -por ejemplo- la veracidad de los dichos de Luis D’Elía, uno de los imputados en la causa, quien en las escuchas asegura actuar en nombre y desde la Casa de Gobierno en sus comunicaciones con Jorge “Yussuf” Khalil.

El viernes, Pollicita hizo lugar a la denuncia presentada por Nisman antes de morir y requirió imputar a la presidente Cristina Fernández, al canciller Héctor Timerman, al diputado Andrés Larroque, al ex juez Héctor Yrimia y al presunto espía Allan Bogado.

En el caso, hay 5 mil horas de escuchas telefónicas que el ex titular de la UFI-Amia había recopilado y clasificado en su investigación. En varias de ellas, se hace referencia a la presencia de los imputados en la Casa Rosada.

Policitta ordenó mantener el expediente bajo secreto de sumario, tal como lo había solicitado la jueza Sandra Arroyo Salgado. El fiscal pretende de esta manera que no trasciendan los lugares antes de que se realizan los peritajes correspondientes, en tanto que el juez de la causa deberá evaluar los aportes que puedan surgir de las nuevas pericias realizadas por pedido de la ex esposa de Nisman en el que fuera su departamento, acto al que asistió la fiscal Viviana Fein.

El juez Daniel Rafecas será quien deba determinar si acepta o rechaza la imputación a la presidente por emitir “una expresa directiva” para diseñar y ejecutar “un plan de encubrimiento” que desvinculara a los acusados iraníes del atentado y les garantizara su impunidad.

Para Nisman, el memorándum de entendimiento con Irán gestionado por Timerman en Siria a pedido de la presidente, supuso una ilegal intervención del Poder Ejecutivo en una causa abierta, lo que está expresamente prohibido en la normativa argentina. Además, Nisman remarcó su presentación que esta acción supuso un giro diametral a la política que llevara adelante Néstor Kirchner, quien en su mandato presidencial había rechazado un pedido similar de Irán.

El dato

“Tercamente empecinados”

La presidente Cristina Fernández evitó anoche referirse a su imputación por supuesto encubrimiento de funcionarios iraníes acusados en la causa Amia, al dejar inaugurado el Anfiteatro del Bosque en la ciudad santacruceña de El Calafate. Dijo que en su gobierno están “tercamente empecinados en brindar alegría”.

La primera mandataria, durante una alocución de pocos minutos emitida antes del inicio del Festival Nacional del Lago, resaltó que la placa de inauguración del anfiteatro diga “Ningún pueblo puede construir futuro sin alegría”.

La clave

Hospitales

La presidente inauguró el Hospital de Alta Complejidad de El Calafate (17 mil metros cuadrados cubiertos y $ 600 millones). Pasa a integrar la red nacional de alta complejidad a la que también se incorporó el hospital Marta Schwarz de Puerto Iguazú ($ 50 millones). Cristina entregó 100 nuevas viviendas (Plan Más Cerca) y firmó el acta de inicio de las obras a 5 años para las represas Cepernic-Kirchner sobre el río Santa Cruz (1.740 Mv). “Aguantó porque aprendí acá”, apuntó en referencia a las inclemencias a orillas del Lago Argentino, al conmemorar 138 años de la llegada del Perito Moreno. Recordó la vela que le encendió el “querido padre Lito” tras la muerte de Néstor, y advirtió que siempre habrá quien la encienda “cuando quieran avanzar sobre nuestras conquistas”.

No vio y no conoce

José Carrera, el médico que constató el deceso de Alberto Nisman el 18 de enero en el edificio Le Parc del barrio porteño de Puerto Madero, aseguró que “no” conoce al secretario de Seguridad Sergio Berni, “ni si estaba adentro” del departamento donde murió el fiscal federal .

También dijo desconocer al periodista que dio la primicia del fallecimiento, Damián Pachter, y negó tener “vínculos familiares” con el trabajador de prensa, al rechazar las versiones que indicaban que le había transmitido la noticia.

“Llegué, hice el acto médico y me retiré. No sé cuánto tiempo pude haber estado ahí. Mi actuación en el lugar fue limitada”, manifestó Carrera a Perfil.

El médico arribó al edificio Le Parc en una ambulancia de la empresa Swiss Medical. Pese a que Berni fue uno de los primeros en llegar al lugar, el doctor negó haber visto al secretario de Seguridad. “No lo conozco, ni sé si estaba adentro”, respondió Carrera consultado al respecto.