DESDE LA EXPLOSIÓN EN ROSARIO, EN AGOSTO DE 2013

Santa Fe: 200 edificios cambiaron su instalación de gas por corte

Todos fueron emplazados por Litoral Gas a actualizar sus instalaciones a la norma de seguridad vigente. Actualmente, otros cinco pasan por el mismo proceso: son 142 usuarios que deben realizar obras en la estructura troncal del edificio y en sus departamentos.

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8 meses sin gas. El edificio San Martín, un caso emblemático: la empresa cortó el suministro el 8 de julio, el 10 de diciembre lo reconectó por 24 horas y lo volvió a cortar. Enargas inició un sumario y sigue el caso de cerca.

Foto: Mauricio Garín

 

Florencia Arri

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Reguladores, cañerías y rejillas dejaron de ser términos extraños para quienes habitan en departamentos de Santa Fe: 200 edificios de la ciudad fueron intimados por Litoral Gas a readecuar sus instalaciones a riesgo de perder el servicio. Ésa es la cantidad de edificios a la que se les cortó el suministro de gas desde agosto de 2013 a esta parte, y que fue reconectada tras adecuar sus instalaciones a la norma de seguridad vigente.

La cifra fue aportada por Litoral Gas, e incluye a pasillos con más de dos unidades habitacionales. La prestadora informó que actualmente hay cinco edificios sin suministro para la actualización de la instalación: el edificio San Martín de San Martín 2515, el monoblock 11 de barrio Las Flores I, la torre de 4 de enero 2529, la de Urquiza 2031 y la de 25 de Mayo 2126. Suman, entre los cinco, 142 usuarios en obra para lograr la reconexión del servicio.

La cifra puede modificarse esta semana. Por un lado, por la inminente reconexión del edificio de la peatonal. Por otro, por 10 edificios emplazados por la prestadora a actualizar sus instalaciones y que, llegada la fecha de vencimiento, podrían quedar sin servicio si la empresa evalúa que sus conexiones son inseguras. Se trata de 150 clientes más.

Las Flores II

El primer caso fue el 30 de agosto de 2013 en Las Flores II, en lo que se llamó el “efecto Rosario”: asustado por la explosión del edificio de Salta 2141 de esa ciudad -que dejó un saldo de 22 víctimas fatales y dos torres derruidas- el presidente de la vecinal Las Flores II alertó a Litoral Gas por una pérdida en el monoblock 3. La inspección de la prestataria indicó que las conexiones eran obsoletas y los 20 monoblocks y 10 torres que componen el barrio fueron verificados y emplazados a reinstalar sus conexiones.

Los vecinos de las torres 3 y 4 gestionaron ante el municipio asistencia financiera para arreglar los reguladores de gas y recibieron en octubre pasado un aporte económico de 40.000 pesos.

A la fecha un 80% de las 1.200 viviendas logró la reconexión del servicio. Del 20% restante, hay quienes desistieron de los arreglos por los costos y se pasaron al gas envasado (garrafas) o instalaron artefactos eléctricos para prescindir del gas natural.

Todo indica que el caso del monoblock 3 de Las Flores II es un hito: se trata del primer edificio en que trascendió que Litoral Gas le cortó el suministro y le exigió la actualización de las conexiones. Sin embargo, la empresa sostiene que los controles comenzaron mucho antes. José María González, gerente de Relaciones Institucionales de la empresa, indicó que los controles se realizan ante una nueva conexión, ya sea por cambio de titularidad o reconexión tras un corte por falta de pago. “No se hacen en forma sistemática en todos los edificios, no vamos tocando timbre por la ciudad para hacer inspecciones”, destacó.

En estos días, otro complejo de viviendas atraviesa un proceso similar: el monoblock 11 de Las Flores I, cuyos habitantes realizan arreglos en el edificio y en sus domicilios para lograr la reconexión. En este barrio, el tema no es nuevo: cuatro monoblocks ya hicieron las reformas requeridas que demandaron inversiones de unos $ 20.000, financiados en algunos casos por eventos a beneficio.

Edificio San Martín: un caso emblemático

De los cinco edificios a los que actualmente Litoral Gas cortó el servicio por condiciones de seguridad, hay uno que se convirtió en emblemático: el edificio San Martín, en el 2515 de la peatonal. Sus 80 departamentos no tienen gas desde hace casi 8 meses. Ese lapso fue interrumpido el 10 de diciembre, cuando el servicio fue reconectado sólo por 24 horas, hasta que la prestataria volvió a cortarlo por considerar que las instalaciones ejecutadas eran inseguras.

Desde entonces se tejió una trama de responsabilidades que sólo hallan como denominador común la indignación de los vecinos. La reconexión del gas y el tiempo que llevaron los arreglos dieron lugar a un sumario de investigación del Ente Nacional Regulador del Gas (Enargas), que realizó una verificación in situ y documentó las razones que motivaron el corte de diciembre. El Litoral consultó al Enargas por el caso, y confirmó que sigue de cerca el avance de los arreglos.

Litoral Gas, por su parte, contrató un nuevo gasista matriculado hoy a cargo de los trabajos. “Nos hicimos cargo de la obra, en trabajos y costos, y estamos terminando de solucionarlo”, dijo el vocero de la empresa.

La obra requiere no sólo la instalación de un nuevo regulador sino también una nueva conexión y hasta el montaje de una nueva cabina que abastezca al edificio. Enargas emplazó a la prestataria a agilizar los trabajos. Litoral Gas indicó que restablecerá el servicio cuando la obra esté correctamente terminada “a más tardar, este lunes o martes”.

En cifras

5 inspectores

componen el plantel de Litoral Gas para Santa Fe, Santo Tomé, Gálvez, San Carlos y Sauce Viejo. La empresa sostuvo que cada uno realiza entre 12 y 13 inspecciones por día, y que se cumplen los plazos determinados por Enargas para realizar las verificaciones.

48

horas

 

es el tiempo promedio que transcurre entre el pedido de inspección que realiza el gasista matriculado y la visita del inspector para la rehabilitación del servicio, según Litoral Gas. En el caso de las nuevas habilitaciones, la empresa sostuvo que el plazo promedio es de entre 15 y 20 días. Los usuarios, sin embargo, sostienen que los plazos son mayores: aducen que la demora supera los 30 días.

20% de las 1.200 viviendas de Las Flores II no reconectaron el gas por el costo de los arreglos. Comenzaron a utilizar gas envasado o artefactos eléctricos.

NAG-200

es la norma del Ente Nacional Regulador del Gas (Enargas) vigente.

 

Si bien data de 1982, es la norma de seguridad que, junto con sus resoluciones modificatorias, fija cómo deben ser las conexiones. Se compone de ocho capítulos que establecen condiciones desde la conexión del equipo individual y batería de cilindros para gas envasado hasta la prolongación domiciliaria; los medidores que se deben colocar, cuál debe ser la cañería interna; la instalación de artefactos; la evacuación de productos de combustión; entre otros.