Otra baja más en Olimpo

Ahora el descartado es Vega

De la Redacción de El Litoral

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Si algo le sobra a Olimpo, antes de venirse a Santa Fe para jugar con Colón, son malas noticias. Es que en la práctica futbolística de ayer, David Alejandro Vega trató de girar hacia su izquierda, pero la rodilla derecha se le quedó trabada en el piso.

“Sentí un ruido. Intenté seguir, pero no pude”, señaló el volante cordobés cuando enfrentó al médico del plantel, Angel Tuma. El diagnóstico físico del “Tordo” aurinegro fue: “esguince que le produce inestabilidad interna y anterior de la rodilla”.

Ayer, el jugador llegó a la práctica con mucho dolor, inflamación y líquido sinovial, por lo que se presume que la lesión es más grave de lo que se pensó en un primer momento.

“Puede ser una rotura de meniscos (interno o externo), lo que sería menos grave, porque podría llegar a volver a jugar en 50 días; o tiene cortado el ligamento cruzado anterior, y en ese caso estaríamos hablando de una inactividad de 7 a 8 meses”, declaró Tuma.

Hoy le harán una resonancia magnética (sí o sí hay que esperar 72 horas para que la zona se desinflame) y sobre el mediodía se conocerá el resultado de la misma.

— El caso Joel Acosta: estuvo en Buenos Aires consultando al médico de Boca, José Batista, quien en enero de 2014 lo operó de la rotura del ligamento cruzado anterior de su rodilla derecha. “Hablé con Batista y coincidimos en el diagnóstico: pequeña rotura del cuerno posterior del menisco interno”, admitió Tuma, quien enseguida confirmó que el jugador, cuyo pase pertenece al xeneize, “no necesitará operarse”.

Y reconoció: “Seguirá con el tratamiento que estaba realizando, es decir kinesiología y fortalecimiento muscular. No siente dolor porque fue infiltrado antes del viaje a Capital, pero lo bueno es que la lesión que tiene no necesita intervención quirúrgica”, agregó el facultativo, quien seguirá la evolución del atacante para ver si puede jugar, al menos, el miércoles que viene ante Atlanta por la Copa Argentina.

— Orlando Gabriel Gaona Lugo: presenta todos los síntomas de una posible fractura por estrés de la tibia derecha. Tiene la zona inflamada y siente muchísimo dolor. El delantero paraguayo sufrió la misma lesión hace casi tres años, pero en la tibia izquierda. Después de un tratamiento especial, volvió a jugar, pero la fisura se transformó en fractura y tuvo que ser operado, incluso colocándole un tornillo sujetador.