Cuando el “9” la mete, Colón gana...

Alario, el 38 y los 7 meses sin ganar afuera

  • Los sabaleros lograron romper rachas que marcaban una tendencia preocupante a ser muy débil de visitante. En el torneo de Primera, hacía casi cuatro años que no daba vuelta un resultado adverso fuera de su cancha.
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Una imagen que se repite partido a partido, el del carrito llevándose a un jugador de Colón lesionado. Ayer pasó con Cristian Guanca, quien tendría sólo un esguince de rodilla. De todos modos, no se sabe si estará para el lunes. Foto: Matías Nápoli

 

Enrique Cruz (h)

(Enviado Especial a Buenos Aires)

Dicen que los records están para batirse y de eso no caben dudas. Hacía 7 meses que Colón no ganaba de visitante. La última victoria fuera del Centenario se había dado el 5 de octubre del año pasado, cuando el equipo de Osella le ganó a Instituto 3 a 0, la noche que se lesionó Llama en el calentamiento precompetitivo. Desde ahí en más, pasaron 10 partidos y jamás se pudo traer los tres puntos hasta que llegó este partido con Defensa y Justicia. Fueron cinco empates y cinco derrotas en ese periplo, apenas con cuatro goles a favor, o sea uno más en diez partidos de los que anoche se marcaron en uno solo. Incluso, de los cuatros goles que se marcaron fuera de casa hasta anoche, sólo uno sirvió para conseguir un punto: el de Romero ante Central. En el resto de los partidos en los que Colón hizo goles, el equipo perdió. Ramírez marcó ante Guaraní, en Misiones; Becerra lo hizo ante Racing, en Avellaneda y Llama convirtió en su vuelta al equipo cuando se visitó a Temperley.

Siguen las particularidades con esta victoria sabalera. Lucas Alario marcó dos goles y hay una linda estadística que vincula los tantos de Alario con victorias rojinegras, y es que cuando Alario convierte goles, Colón gana. Se viene dando y esto no hace más que agigantar la figura del delantero surgido de las inferiores sabaleras, que ayer gritó dos veces en la noche de Florencio Varela.

Otra de las rachas que ayer se pudieron quebrar, también tiene que ver con los partidos de visitante. La última vez que Colón, por el torneo local (no se contabiliza Copa Sudamericana), pudo dar vuelta un resultado de visitante, fue en cancha de Arsenal, en la primera fecha del torneo Apertura 2011. Esa noche, Colón perdía 1 a 0 y dio vuelta el resultado con goles de Tomás Costa y Fuertes. Fue a principios de agosto y pasaron 1.379 días, desde ese momento, hasta que el equipo pudo dar vuelta la historia de un partido en el torneo de Primera División de nuestro país. La racha se hace más corta si se cuenta el partido que por Copa Sudamericana, un año más tarde, Colón disputó ante Racing en Avellaneda, con la conducción técnica de Roberto Sensini.

¿Por qué se puso en el título el número 38?, no es el de la camiseta de Alario, que como todos saben, tiene el merecido “9” en el dorsal. El 38 es el minuto, en cada tiempo, que Lucas capitalizó para llegar al gol. En el primero de su cuenta personal, metiendo un violento cabezazo luego de un espectacular centro de Cuevas (fue parecido al gol que le hizo a Newell’s cuando Colón ganó en el Parque Independencia hace 13 meses). En el segundo —el tercero de su equipo— empujando la pelota después de una buena maniobra personal de Romero, que ante la salida del arquero le tocó la pelota para que Lucas la empuje con el arco desguarnecido.

Dicen que las rachas están para romperse y Colón, anoche, pudo quebrar algunas de ellas. Pero cuando se prolongan en el tiempo, se convierten en indicios muy claros de una realidad elocuente. En este fútbol argentino en el que ya no cuesta tanto ganar de visitante, donde los estadios no se convierten en inexpugnables como otrora, pasar tanto tiempo sin ganar o sin dar vuelta un resultado adverso de visitante, es un indicativo de algo que evidentemente no se estaba haciendo bien.

Alario, el 38 y los 7 meses sin ganar afuera

El Mago aportó en cuentagotas algo de su fútbol. Aguantó 76 minutos, terminó extenuado y en algunas ocasiones intentó aprovechar su pegada, como en esta jugada que terminará en falta. Foto: Matías Nápoli

“Nada es fácil para nosotros”

Javier López sintió alivio y alegría después del partido. De los últimos 9 puntos, su equipo cosechó 7. Además, era una seguidilla de partidos en los que enfrentaba a “rivales directos” en la lucha que, por el momento, Colón sostiene y que es la de no sufrir en la tabla de promedios. Venció a Rafaela y Defensa, y empató con Crucero del Norte. Pero la alegría y el alivio no es sólo por el resultado, sino porque vio una recuperación futbolística.

“Nada ni nadie nos va a sacar la alegría que tenemos por más que tuvimos momentos de sufrimiento y nerviosismo durante el partido. La salida de Cuevas fue táctica, porque pensaba que podíamos lastimarlos con Romero parado como un 8 adelantado y con Garnier, que tiene experiencia para desdoblarse, bajando a una posición más defensiva por ese sector”, dijo el entrenador rojinegro apenas terminado el partido en Florencio Varela.

En cuanto al rendimiento del equipo, dijo que “me voy conforme, ya que por momentos logramos concretar la permanente intención que tenemos de manejar el partido y la pelota”.

Tras señalar con contundencia que “veo una reacción futbolística de mi equipo”, habló del rival y del partido: “Defensa es un equipo agresivo y lo demostró; el partido se hizo de ida y vuelta. Esa no era la idea nuestra cuando nos quedamos con uno más y nos pusimos arriba en el resultado. Con el partido 2-1, teníamos que aquietar el ritmo y manejar la pelota, pero ellos tuvieron sus virtudes también”.

Luego, el técnico dijo que “nada es fácil para nosotros, pero hoy vimos una luz al final del camino”. Y concluyó señalando que “en otra ocasión, quizás terminábamos el partido más tranquilos y holgados en el trámite y en el resultado. Pero este no es el momento”.

" Tenemos que corregir cosas, pero generamos peligro e intentamos jugar la pelota al pie. Necesitábamos como agua esta victoria. Se la dedico a mi abuelo Renato”.

Lucas Alario

Delantero de Colón

¿Presentación en Fifa?

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El loco festejo de Cristian Llama, que se dirigió al banco de suplentes para saludar a uno de los kinesiólogos del plantel. Tanto él como Romero hicieron méritos suficientes para jugar como titulares ante los sanjuaninos.

Foto: Matías Nápoli

No se descarta que Colón haga una presentación en Fifa para cobrar los 800.000 dólares que el Internacional de Porto Alegre le está adeudando por el pase de Luque. Ese dinero, Colón debió cobrarlo en enero. Los dirigentes no descartaban la posibilidad de viajar a Brasil para gestionarlo personalmente, pero lo harían via Fifa. Por otra parte, se confirmó el adelanto de El Litoral respecto de una deuda de Boca por el pase del 50 por ciento de los derechos económicos de Meli.

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¿Contento, Javier?

Se nota la alegría del técnico sabalero en su rostro, celebrando un esperado triunfo.

Foto: Matías Nápoli