Se lució ante un adversario complicado

CRAI, con autoridad e inteligencia

• Jugó de gran manera y construyó un triunfo impiadoso ante el meritorio Logaritmo. El sábado visitará a Universitario de Rosario.

Con la ductilidad que lo distingue, Justo Ordano se apresta a pasar la pelota a Jorge Qüesta (h), en uno de los tantos ataques de CRAI. Ambos cumplieron destacadas actuaciones. Foto: Mauricio Garín

César Miño

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En el encuentro cumplido al cierre de la segunda jornada de la Qualy Sudamericana para los Juegos Olímpicos 2016, CRAI venció a Logaritmo por 54 a 13, merced a una producción que poseyó elementos más que suficientes para justificar tan expresiva diferencia.

Ante todo, el equipo santafesino lució el orden y la disciplina que se necesita -por ejemplo- para enfrentar adversarios que se fortalecen a partir del desorden como el rosarino.

CRAI fue paciente y extremadamente disciplinado: jugó tácticamente de manera adecuada (aunque por momentos pareció abusar de los kicks) y defendió con eficacia y contundencia. De ese modo, comenzó a prevalecer en el control de la pelota y a disponer de situaciones factibles para prosperar ofensivamente.

Por ende no extrañó el 23 a 6 del parcial, ante un adversario que denotó enorme entereza y además, su conocida predisposición a intentar atacar desde las más disímiles posiciones.

El complemento comenzó de manera similar, aunque el protagonismo santafesino se fue acrecentando con el correr de los minutos, hasta transformarse -por primera vez en el desarrollo- en una nítida superioridad, en todos los aspectos del juego.

Un par de variantes calificadas como las de Justo Ordano y Pedro Marozzi, otorgaron no solo “aire fresco” sino también mantuvieron la calidad en el juego de un pack de forwards que resultó clave para plasmar una producción tan satisfactoria.

La creciente evolución del anfitrión generó un enorme desgaste en el equipo visitante, que pareció ofrecer flancos débiles donde hasta ese momento no los había. Obviamente, esto favoreció las apetencias santafesinas, lo que posibilitó que la diferencia sea cada vez más significativa.

CRAI ganó de manera inobjetable, cumpliendo una actuación muy satisfactoria desde lo colectivo, con todo lo que ello implica en este deporte. Pero además, evidenciando el excelente momento por el que atraviesan varios de sus integrantes, partiendo del medio scrum Estanislao Bay, que se transformó en sapiente conductor de un equipo que dejó una impresión gratificante.

CRAI 54

Logaritmo 13

Cancha: principal de CRAI.

Referee: el rosarino Carlos Poggi.

CRAI: Germán Haeffeli (Juan Manuel Muffarrege), Facundo Garibay (Santiago Jelicic) y José Canuto (Pedro Marozzi); Joaquín Schierano y José Dogliani; Emanuel Piermarini (Justo Ordano), Ramiro Dolfo (Tomás Quirelli) y Axel Rumscheidt; Estanislao Bay (Eduardo Guala) y Mario Salva (h); Alberto Francisco (Santiago Candioti), Salvador Damiani (capitán), Jorge Qüesta (h), Rodrigo Galarza (Ignacio Poletti) y Patricio Fosco o Galarza.

Head Coach: Pedro Maglianesi.

Logaritmo: Matías Massafra, Juan Manuel Arriazu y Damián García (Marcelo Carreño, luego Roberto Roldán); Matías Puccini y Luciano Busso; Lucas Lamagni, Nicolás Doglioli y Tomás Woelflin; Juan Irigoitia y Julián González; Tobías Pacor, Ricardo Maroseck (Ignacio Longo), Mauricio Stummvoll (capitán), Juan Ignacio Milesi y Bruno Bassi (Manuel Muñiz).

Coaches: Pablo Granito y Martín Strada.

Primer tiempo: 4 y 29, penales de Alberto; 10, penal de Maroseck; 16, try de Canuto y goal de Alberto; 27, penal de Pacor; 32, try de Alberto; 39, try de Garibay.

Segundo tiempo: 7, penal de Alberto; 18, try de Ordano y goal de Alberto; 22, try de Fosco; 30, try-penal y goal de Fosco; 38, try y goal de Pacor; 40, try de Marozzi y goal de Fosco.

Amonestados: Tomás Woelflin y Germán Haeffeli.

“Estamos evolucionando...”

Tras cumplimentar las tareas regenerativas básicas posteriores al partido, bajo las órdenes del profesor Gonzalo Carrasco, el medio scrum de CRAI, Estanislao Bay, atendió deferentemente la requisitoria de El Litoral.

* “Nos habíamos preparado en la semana para afrontar un partido que iba a ser muy duro, por las características del juego de Loga. Felizmente fuimos disciplinados y de a poco nos apoderamos de la pelota, lo que nos permitió jugar cada vez más. Creo que otra virtud fue la paciencia que volvimos a tener; tal como nos pasó el sábado pasado, cuando íbamos perdiendo con CAE y no nos desesperamos, lo que pienso que es algo realmente valioso”.

* “También logramos que nuestro volumen de juego fuera creciendo con el correr de los minutos. El partido se fue abriendo de a poco y creo que un elemento clave fue que siempre estuvimos al ciento por ciento, sin fisuras. Hoy evolucionamos con respecto al partido anterior y eso es lo que ncesitamos para lograr los objetivos que nos planteamos en el torneo...”