Eugenio Marcolín y Carlos Barrera...

“No puede ser que cuatro tipos modifiquen el estatuto”

  • Forman parte de una comisión que propondrá las posibles reformas. “Queremos darle valor y que no se cambie de acuerdo a conveniencias de la comisión de turno”. Quieren tres años de mandato, una sola reelección y un capítulo especial para el fútbol amateur. ¿Se viene la escuela de Colón?
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Eugenio Marcolín y Carlos Barrera, dos socios vitalicios y caracterizados del club, en diálogo con El Litoral. El primero fue presidente durante seis años e integró distintas comisiones directivas, incluida la de Vignatti. Foto: Luis Cetraro

 

Enrique Cruz (h)

Fue presidente del club entre 1974 y 1980. Coincidió con años de prosperidad en Colón, en lo deportivo y también en lo institucional. El doctor Eugenio Marcolín supo armar equipos que todavía hoy se recuerdan, construyó la tribuna norte de cemento para reemplazar a la famosa tribuna en la que se ubicaba la Santa Rosa de Lima pero que tenía tablones de madera. Después, su vida dirigencial siguió vinculada al club en distintos períodos y con otros dirigentes. Integró varias comisiones hasta que en medio de la crisis del 2013, fue llamado para presidir la Junta Electoral. Allí trabajó con Carlos Barrera, quien se sumó a la charla con El Litoral invitado por el propio Marcolín.

—¿Qué es lo que los está preocupando?

—La reforma que se quiere hacer del estatuto... Mirá, para ser claros, a esas asambleas no va nadie, esa es la realidad. Por eso, vamos a pedir que a partir de ahora se haga una asamblea con quorum especial para que la modificación del estatuto tenga otra categoría y no sea tan fácil. Cada uno lo cambia de acuerdo a su conveniencia. Lo cambiaron Vignatti, Lerche y todos los que llegan pretenden modificarlo de acuerdo a su propia óptica. por eso queremos darle más valor al cambio del estatuto. No puede ser que vayan cuatro tipos a una asamblea y lo modifiquen. Y también queremos que haya un capítulo especial para el fútbol amateur.

—¿Qué es lo que quieren hacer con el fútbol amateur?

—No queremos hacer dos clubes, pero pretendemos que tenga autonomía y una subcomisión permanente. ¿Quién lo salvó económicamente a Colón?, los chicos del club. Con la venta de cinco jugadores en un año y medio, se juntaron casi 100 millones de pesos y se evitó que se compraran jugadores.

—Eso está claro y hasta pareciera ser que lo que se proponga tendrá aceptación...

—Hay un problema en este momento y es la ley de salvataje, por lo que toda decisión de tipo económico queda supeditado al levantamiento de la misma o a la autorización del juez. ¿Por qué?, porque hay que justificar que se utilicen fondos sin destinarlo al pago de acreedores. Pero entiendo que lo otro, lo de la formación de la subcomisión, se puede hacer.

—¿Con qué fondos se manejaría esta subcomisión?

—Porcentaje de los préstamos y ventas de los chicos que surjan, publicidad al margen de lo que tiene vendida la comisión directiva y otra clase de recursos, pero que se establezca y se cumpla por estatuto. Colón tiene todo dado con el predio, Casa Fútbol, las canchas, para tener muy buenas inferiores. Es mentira eso de que una comisión llega para refundar Colón, como se ha escuchado tantas veces, porque Colón tiene 110 años, un predio de primera y un estadio de primera. ¿De qué refundación se habla?

—¿En carácter de qué lo hacen?

—Formamos parte de la Junta Electoral y cuando ganó esta gente, vino el doctor Casabianca y me ofreció formar una comisión con otros vitalicios. Hicimos algunos aportes de proyectos, algunos se cumplieron y otros quedaron ahí.

—¿Qué más pretenden que se haga con el estatuto?

—Esta comisión tiene un mandato de cuatro años, entiendo que haya gente que esté cansado o que quiera irse, pero para eso está la posibilidad del corrimiento o una elección complementaria, como la hizo Vignatti. Para nosotros sería una lástima que esta gente se vaya porque hizo un aprendizaje forzado y creo que hay gente que es valiosa, no se quiere ir y ya aprendió. Pero no es tema nuestro.

—O sea que, por lo visto, ustedes no quieren que haya elecciones este año. ¿Cuál es la idea entonces respecto del plazo de duración?

—Los años de prosperidad de Colón fueron los de estabilidad política, los de Vignatti, los de Salerno. Tres años de mandato con una sola renovación es lo ideal. Si anduviste bien, que te vuelvan a elegir y después basta. Eso es lo que estamos estudiando y proponiendo.

—¿Cómo ven lo económico?

—Ayuda la ley de salvataje, se evitan los embargos y se puede llegar hasta los 12 años, porque la ley establece que el salvataje es por tres años y renovable. En un país con alta inflación, la deuda se va licuando porque los intereses judiciales no tienen nada que ver con el interés inflacionario. La ley de salvataje condiciona pero a veces viene bien para no hacer cosas de las que luego haya que arrepentirse. Era lo único que se podía hacer. Se paga a un jugador y no a un acreedor, es cierto, pero, ¿qué le conviene a un acreedor?, que el equipo ande bien, que juegue en Primera, porque eso le dará mayores chances de cobrar y más rápido, ¿se entiende?

—¿Qué visión tuvieron cuando estaban en la Junta Electoral?

—Que lo institucional se iba a arreglar con las elecciones, pero la pasamos mal, hubo una noche que no había luz, no había policías, faltaba dinero y tuvieron que aportar los candidatos. Se portó muy bien con nosotros el secretario de seguridad deportiva, doctor Pablo Farías, y también la gente de Personas Jurídicas. Cuando ví que a Paraná fueron 5.000 personas a un amistoso y que en ese partido con Boca Unidos, también amistoso, se llenó la cancha, me dí cuenta que la gente iba a ayudar. La ley de salvataje permitió mejorar lo económico y lo ya dicho de la venta de los jugadores del club. Y en lo deportivo fue duro, pero tuvimos un equipo muy digno, los dos mejores volantes centrales del torneo con Meli y Videla, siete fechas punteros y luego la campaña del ascenso, que tampoco fue fácil.

—¿Es cierto que Colón está detrás de la posibilidad de construir un establecimiento educativo que sea del club?

—A veces las urgencias terminan descuidando lo que no se debe descuidar, que es el fútbol amateur. Siempre se habla de los chicos pero a los chicos no se los atiende de la manera adecuada en estos tiempos que se viven. La mayoría de los clubes del fútbol argentino tienen escuelas, desde el nivel inicial hasta el terciario en algunos casos, y eso crea mucha pertenencia. En lo social, Colón aportaría a la ciudad una manera concreta de acceder a la educación. Por eso, contestando tu pregunta, estamos trabajando en la idea de que Colón tenga su escuela.

—¿Dónde la harían?

—Donde están los eucaliptos al lado de la cancha auxiliar. Allí hay dos hectáreas, son del club y Colón debe tomar posesión para quedarse con el lugar. Faltan algunas cosas que tienen que ver con cuestiones municipales. En la década del 70 nos costó muchísimo conseguir que nos dieran el terreno donde está la cancha auxiliar, pero lo logramos. Había mugre, latas, ratas y ahora es un vergel. ¿Quién te dice que con la escuela no pase lo mismo?, sería muy bueno para el club y para la ciudad.

Lo importante

Justa distinción.

Por comisión directiva se aprobó la realización del Museo de Colón, que llevará el nombre del caracterizado socio del club, don Pablo Gigliotti, quien ha realizado trascendentes donaciones a la institución producto de material de incalculable valor que fue atesorando a través de los años. Don Pablo, gran colonista y excelente persona, ha sido activo dirigente y colaborador de distintas comisiones directivas a través del tiempo, siendo tesorero en el ascenso de 1965, con Italo Giménez a la cabeza, del que a fin de año se cumplirán 50 años.