En el vuelo viajaban 239 personas

Llegó a París el supuesto fragmento del MH370

El resto del ala que llegó flotando las costas de la isla Reunión, en el sur de África, será trasladado a un laboratorio en Tolouse, donde a partir del miércoles comenzará a ser analizado por expertos. Las pruebas esclarecerán de forma definitiva si la pieza encontrada procede del avión de Malaysia Airlines desaparecido el 8 de marzo pasado sin dejar huella.

14_A_1244761.jpg

Misterio. Restos de una nave fueron encontrados en la isla Reunión. Un día después, se halló una maleta parcialmente destruida. Foto: Agencia EFE

 

Redacción El Litoral

Agencias EFE/DPA

París recibió hoy el fragmento de avión hallado esta semana en la isla francesa de La Reunión con el objetivo de analizar si pertenece al Boeing 777 de Malaysia Airlines desaparecido sin rastro hace más de un año con 239 personas a bordo y si permite esclarecer lo sucedido.

Tres días después de su descubrimiento en esa isla en el oeste del océano Índico, y en un vuelo comercial de Air France, ese trozo de “flaperon”, una superficie de control del avión situada en el ala que actúa como alerón y solapa a la vez, aterrizó en el aeropuerto de Orly.

El enigma en torno al vuelo MH370 de la aerolínea malasia recobró protagonismo cuando Johnny Bègue, encargado de un equipo de limpieza de la playa de La Reunión, se topó con ese fragmento el miércoles y un día después con una maleta parcialmente destruida.

El “flaperon” tomó hoy la ruta por carretera hacia Balma, en las afueras de Toulouse, donde se ubica el DGA TA, laboratorio dependiente del Ministerio de Defensa y especializado en investigaciones técnicas sobre accidentes de aviones.

Pero el peritaje no comenzará hasta el miércoles, margen concedido para garantizar la llegada de todos los expertos que van a llevarlo a cabo.

Investigación

Ese análisis se efectuará en presencia de un juez de instrucción, de la sección de investigación de la Gendarmería de Transporte Aéreo, de un miembro de la Oficina francesa de Investigación y Análisis, de un experto aeronáutico malasio y de un representante de las autoridades judiciales de ese país.

El fabricante aeronáutico estadounidense Boeing anunció además el envío de un equipo técnico a Francia para colaborar en esa labor. En su punto de mira, su número de serie, con el que determinar su procedencia, y posteriormente la búsqueda de cualquier elemento que permita dilucidar si el aparato explotó durante el vuelo o impactó directamente contra el agua.

El ministro australiano de Transportes, Warren Truss, señaló que el fragmentó se localizó en una ruta que concuerda con los análisis del posible trayecto del avión desaparecido, pero advirtió de que es improbable localizar el resto de la aeronave.

Australia insistió en que “cada vez es más seguro” que pertenezca al avión malasio, una tesis compartida por las autoridades malasias, que aseguran que ese pedazo es de un Boeing 777.

Su pertenencia, según los medios franceses, podría quedar demostrada este mismo miércoles, pero las conclusiones del análisis no se esperan hasta dentro de semanas.

La maleta, por su parte, quedará en manos del Instituto de Investigación Criminal de la Gendarmería Nacional francesa.

En la costa de La Reunión se halló también esta semana una botella con inscripciones en chino y otra en indonesio, pero su buen estado de conservación hace pensar que podría proceder de algún barco de pesca.

La investigación de la Fiscalía de París contempla los cargos de homicidio involuntario y presunta destrucción intencionada de ese aparato que, según los expertos, 40 minutos después de su despegue de Kuala Lumpur y de que alguien apagara el sistema de comunicación desapareció tras cambiar de rumbo en una acción “deliberada”.