editorial

Un Presupuesto sin sentido y que perjudica a Santa Fe

  • El kirchnerismo en Diputados aprobó el Presupuesto Nacional 2016, aunque no se sabe quién será el futuro presidente.

La Cámara de Diputados de la Nación acaba de dar media sanción al proyecto de ley de Presupuesto 2016, a pesar de los pedidos de los partidos opositores para que el tema fuera debatido después de las elecciones.

El planteo de la oposición no era antojadizo. De hecho, no tiene sentido alguno que estos diputados fijen los gastos de la Nación para el año próximo, cuando todavía no se sabe quién gobernará el país, cuáles serán sus prioridades y sus principales líneas de acción.

Desde el retorno de la democracia, en 1983, hasta este año, siempre que hubo elecciones el Congreso esperó hasta conocer el resultado de los comicios para debatir la ley de Presupuesto. Es que resulta imprescindible escuchar la opinión de quién asumirá antes de fin de año la conducción del gobierno nacional.

Pero eso no es todo. Además, y como viene ocurriendo durante los últimos años del kirchnerismo, el proyecto aprobado representa apenas un dibujo ficticio de la realidad: contempla un crecimiento de la economía del 3%, una inflación de 14,5% y un dólar promedio de 10,6 pesos. Tan antojadizas resultan estas cifras que, incluso los equipos económicos del candidato oficialista saben que no será posible reducir la inflación de esta manera en el corto plazo ni sostener dicha paridad cambiaria.

Un dato más completa este verdadero sinsentido: como el Congreso mantendrá la vigencia de la Ley de Emergencia Económica, el próximo gobierno continuará gozando de la posibilidad de modificar el destino de las partidas económicas.

El proyecto aprobado en Diputados vuelve a plantear una clara discriminación de recursos nacionales para algunas provincias que no son -o no serán- gobernadas por el kirchnerismo. Entre ellas, Santa Fe.

Tanto es así que, si se tiene en cuenta la cantidad de dinero presupuestado para obra pública y se divide ese monto por la cantidad de habitantes, Santa Fe será el distrito que menos recursos recibirá durante todo 2016. Lo que el oficialismo no parece comprender, cuando adopta este tipo de posturas, es que también está perjudicando a todos aquellos santafesinos que se dicen kirchneristas. Un dato que poco importa a estas alturas de las circunstancias.

Si el Senado aprueba la ley de Presupuesto 2016 tal como salió de Diputados, la provincia de Santa Fe apenas recibirá 158 millones de pesos en obras públicas, sobre un total nacional de 26.007 millones. Esto representa tan sólo el 0,61 % de participación de la provincia en el total nacional, a pesar de ser Santa Fe uno de los distritos que más recursos aporta al Estado central. Tan sólo en concepto de retenciones al agro, la Nación se queda con casi 4.000 millones de dólares de la producción santafesina.

Teniendo en cuenta los recursos previstos en el proyecto elaborado por el kirchnerismo y aprobado en la Cámara Baja, demandará centenares de años concluir obras emblemáticas para Santa Fe, como por ejemplo los puentes de Reconquista-Goya y de Santa Fe-Santo Tomé; la autovía de la Ruta 11 en el tramo Santa Fe-San Justo; la autovía de la Ruta 33; la Ruta 34 o el puente Santa Fe-Paraná.

Lo lamentable y paradójico es que los legisladores nacionales kirchneristas por Santa Fe continúan sin hacer escuchar sus voces en el Congreso de la Nación, a pesar de que repiten al unísono ser firmes voceros de las necesidades de los habitantes de su provincia.

Si se tiene en cuenta la cantidad de dinero para obra pública y se divide ese monto por la cantidad de habitantes, Santa Fe será el distrito que menos recursos recibirá.