Anticipando su festejo anual

Las legumbres expresan todo su potencial

Campolitoral

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En ocasión del lanzamiento, José María Lazara, presidente de CLERA (la Cámara que nuclea a los productores de Legumbres de la Argentina) expresó que existe una asociación internacional que la integran 53 países, prácticamente todos los productores e importadores de legumbres, que en conjunto con las Naciones Unidas, logró una declaración en noviembre del 2014 por la cual la Asamblea General de las Naciones Unidas declaró -por voto unánime-, oficialmente a 2016 como el Año Internacional de las Legumbres Secas. “Además de lo protocolar, la disposición implica una campaña de promoción muy importante en todo el mundo, con una relación interactiva entre privados y gobiernos para desarrollar la mayor promoción y consumo de legumbres secas”, agregó.

En Brasil y México -como en otros países de América Latina- el consumo de poroto se sitúa entre 15 y 20 kilos por persona por año; sin embargo en Argentina es apenas de 250 gramos. “Aquel país que no tiene un consumo local que proteja de alguna manera el nivel de precios no tiene resistencia ante el mercado internacional y es totalmente dependiente. Ese es el problema de Argentina, que al ser un país con bajo consumo, depende enteramente de la situación internacional. Una declaración de este tipo permitirá aumentar la producción de legumbres, e incrementará los destinos de sus exportaciones lo que generará mayores ingresos de divisas para el país”, expresó.

La gran solución

Con más de 800 millones de personas en el mundo que sufren desnutrición aguda o crónica, y un incremento de problemas en la salud derivados de dietas pobres, el Año Internacional de las Legumbres (2016 AIL) apunta a demostrar el rol integral que estos alimentos ricos en nutrientes tienen en la seguridad alimentaria y en la nutrición mundial.

El Año creará la especial oportunidad para hacer conocer las ventajas de consumir legumbres, producirlas y comercializarlas. Aumentar su producción ofrecerá beneficios para el país en diversos aspectos, dado que su cultivo es uno de los más sustentables. Necesita tan solo 365 litros de agua para producir un kilo de legumbres, comparado con los 480 de la soja o los 810 del maní. También contribuye con la calidad de los suelos ya que fija Nitrógeno del aire, evitando el uso de fertilizantes que en su descomposición producen gases de efecto invernadero.

Legumbres o pulses son el fruto seco de los cultivos de leguminosas que incluyen a los porotos, las arvejas, las lentejas y los garbanzos. Este grupo de alimentos básicos han sido cultivados por civilizaciones a través del globo por más de 10.000 años. Son ricos en proteínas, fibras, cantidad de vitaminas y aminoácidos y en general; al tiempo que sus cosechas son abundantes. Las legumbres son parte de la canasta de comida usadas por los programas de alimentación mundial en las estrategias para la ayuda humanitaria.

¿Y en Santa Fe?

“Cuando en 2013 se anticipó que el que viene sería declarado el año de las legumbres, supimos que sería un apoyo importante”, le dice a Campolitoral el Ing. Gabriel Prieto, de INTA, quien agrega que contra todos los pronósticos, el año Niño ha sido muy favorable para las legumbres, y que el 2015 será un excelente año desde el punto de vista climatológico, sobre todo en norte de Buenos Aires, donde venían con pérdidas totales de la campaña anterior. “Tuvimos un agosto llovedor, un septiembre normal y un octubre muy fuera de lo común por las temperaturas frescas (como desde la década del 60 no se tenían) pero sin heladas, lo que permitió que las arvejas y las lentejas expresaran su mayor potencialidad, con plantas con 6 a 7 vainas y rendimientos que se estiman entre 3.000 a 3.500 kg/ ha. con picos de 4.000”.

Prieto enumera las razones que para sorpresa de todos, la campaña legumbrera fuera una verdadera sorpresa. “Para lo que esperábamos al momento de la siembra y lo que reportaban los semilleros, salieron cosas a la luz: fue el año de menor ocupación de cultivos de invierno (sólo el 26 % del área con cultivos anuales), donde la arveja subió el área sembrada en el sudeste de Santa Fe (departamentos Constitución y Rosario) y el nordeste de Buenos Aires. Allí, sobre un millón 80 mil hectáreas encontramos 90 mil de arvejas y casi 40 mil de lentejas, en un escenario con la mayor caída del área triguera respecto de 2014. Respecto de las legumbres, vemos un mayor área y rinde (lejos) que en 2014, además de un fuerte crecimiento de la arveja amarilla (15 %) cuyos principales destinos de exportación son India, Bangladesh, los países árabes y China).

Como contrapartida, “el drama del productor es el precio de la arveja que está deprimido por la coyuntura geopolítica y el sobre stock de arveja verde a nivel nacional”.

En le contexto internacional, Canadá mermó su producción en un 20 % por menores rindes, “y allí tendremos una oportunidad de mercado”, sostiene Prieto. Esa merma es 3 veces y media la producción total de Argentina”.

Finalmente, destacó que el presente productivo es muy bueno, los precios pésimos y las expectativas de estables a buenas. Acabamos de hacer la jornada a campo con una gran asistencia de productores y las variedades con tecnologías de fertilización, evaluamos las densidades de siembra en función de las variedades en los ensayos. Buscamos una densidad de siembra mínima para que no decaiga el rinde”, sostuvo.

 

"el presente productivo es muy bueno, los precios pésimos y las expectativas de estables a buenas. Evaluamos las densidades de siembra en función de las variedades en los ensayos. Buscamos una densidad de siembra mínima para que no decaiga el rinde”

Ing. Gabriel Prieto.

INTA