Estuvo un mes prófugo
Prisión preventiva para conductor que atropelló a dos motociclistas
El juez Nicolás Falkenberg hizo lugar al pedido de la fiscalía, que le atribuyó al autor los delitos de “doble homicidio culposo agravado” y “abandono de persona”. La defensa apelará el fallo.
Familiares de las víctimas se abrazaron y agradecieron a los fiscales al término de la audiencia.
Foto: Flavio Raina
Juliano Salierno
El juez de la investigación penal preparatoria, Nicolás Falkenberg, dispuso hoy la prisión preventiva e inhabilitación para conducir vehículos para Pablo Nicolás Scattone, el joven de 24 años acusado de embestir y ocasionar la muerte de una pareja de motociclistas, que el pasado 13 de febrero circulaban por la costanera santafesina.
La decisión judicial fue adoptada tras una hora de debate, en la cual los fiscales Sergio Alvira y Roberto Apullán formularon la acusación contra Scattone como autor responsable de los delitos de “doble homicidio culposo, agravado por la conducción imprudente de vehículo automotor”, en concurso real con el “abandono de persona”, para los cuales estimaron que, en caso de ser condenado, la pena en expectativa oscila entre los 2 y los 11 años de prisión.
La acusación
El fiscal Alvira fue el encargado de realizar una pormenorizada explicación de los hechos ocurridos la madrugada del sábado 13 de febrero, en la esquina de avenida Almirante Brown y calle Ángel Cassanello. Entre otros elementos de prueba, el Ministerio Público de la Acusación se apoyó en las imágenes registradas por las cámaras de seguridad de la Municipalidad, que dan cuenta cabal de la dinámica del siniestro en el que un auto Chevrolet Corsa gris con vidrios polarizados, patente JRN-135, embiste una moto Honda Wave de 110 c.c. en la que iban Jonatan Nahuel Álvarez -conductor- y Macarena Pérez -acompañante-, ambos de 20 años de edad.
Para la fiscalía “sin resguardo alguno dobla para tomar otra vía y embiste provocando la caída de estas personas causándoles lesiones que le ocasionan la muerte una semana después” (Macarena falleció el 19 y Nahuel el 20 de febrero en el hospital Cullen).
“El imputado -que circulaba por Almirante Brown en sentido sur/norte- se detiene en Ángel Cassanello y luego de un breve instante se da a la fuga”, hasta la mañana de ayer, que asesorado por su abogado se presenta en fiscalía.
El secuestro
Los acusadores explicaron cómo fueron a dar con el vehículo, que es propiedad de un hombre de 75 años de la cuidad de San Carlos que está en pareja con la madre del imputado. Si bien se lo buscó en vano en aquella ciudad del departamento Las Colonias, el coche fue secuestrado por la PDI el 24 de febrero, en la cochera de la casa donde vive el acusado y su madre, en pasaje Paraguay al 10.400, al norte de la ciudad capital.
En el lapso de un mes y dos días, Scattone hizo una presentación espontánea y escrita al juez de la IPP el 26 de febrero, apenas dos días después de que formalmente tomara conocimiento de la persecución oficial. Mientras tanto, el joven conductor desapareció de los lugares que solía frecuentar, abandonó el trabajo que tenía en una estación de servicios de la avenida General Paz y según se dijo esta mañana, el 15 de febrero se fue a Córdoba por supuestos “motivos laborales”.
“Fue un accidente”
El abogado José Ignacio Mohamad, a cargo de la defensa de Scattone, se opuso al pedido de la cautelar, así como a la calificación legal, puntualmente contra la atribución de abandono de persona, figura que es “rayana con el principio de inconstitucionalidad”, puesto que “implica que cada vez que una persona comete un delito debe quedarse y declarar en su contra”, dijo.
Además, resaltó que de acuerdo a las imágenes reproducidas durante la audiencia “no se advierte el abandono de persona, porque las víctimas fueron rápidamente asistidas” por otros conductores.
Mohamad reconoció que “la actitud de Scattone puede ser condenable moralmente” pero que en ella no existió “dolo”, o intención de provocar las consecuencias conocidas. “Ha quedado descartada cualquier idea de dolo”, afirmó sobre su pupilo, que asume la responsabilidad en cuanto a la figura de “doble homicidio culposo”.
En apelación
Cuestionó la posibilidad de que la libertad de su cliente pueda significar una amenaza para la investigación, toda vez que las pruebas fundamentales ya se encuentran aseguradas y rechazó la idea de que el vehículo haya sido escondido, cuando en realidad fue secuestrado diez días después del choque en la cochera de su casa y con evidentes signos de haber protagonizado un accidente.
A propósito del siniestro, Mohamad dijo que “no hizo una maniobra rara, dobló a la izquierda y tuvo un accidente de tránsito con una lamentable y fatal consecuencia”, concluyó.
Por último, como alternativa a la prisión preventiva, la defensa de Scattone ofreció entregar el carné de conducir del imputado hasta que el caso sea resuelto; más una fianza de $ 150.000; y la obligación de presentarse ante la autoridad cada 72 horas. No obstante, ante la decisión adversa la defensa adelantó que apelará ante la Cámara Penal.
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