Para la semana que viene

Los tamberos definieron la protesta

El lunes los productores lácteos realizarán una jornada nacional de protesta. Estudios privados advierten sobre las consecuencias de la compra del sobrestock por parte del Estado Nacional, una medida mirada con escepticismo desde la producción y la industria.

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Al matadero. La imagen de animales lecheros yendo a remate se repite cada vez con más frecuencia.

Foto:Archivo

 

Campolitoral

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Finalmente, los productores lecheros marcharán en el marco de una jornada nacional de protesta. En Santa Fe será en la ciudad de Rafaela, donde los tamberos realizarán un raid que se iniciará en la Sociedad Rural local y se trasladará luego a la Municipalidad.

Confederaciones Rurales Argentinas ya anunció su apoyo a la protesta nacional lechera, a través de un comunicado en el que argumentó que “el mal momento que atraviesa la lechería argentina se agudiza mes a mes en las empresas tamberas, ya en situación de endeudamiento extremo sin aparecer la solución para sobrellevar la crisis. Medidas desde el gobierno, que son necesarias pero insuficientes, acrecientan la incertidumbre de los productores que comienzan a movilizarse en distintos lugares del territorio nacional”.

Pese a que acompañarán la marcha, pusieron sus reparos en la metodología, haciendo hincapié en respetar las particularidades y modalidades de cada región; resaltar la ausencia de la industria y el comercio en proponer soluciones a la crisis y las deficiencias del Estado en la transparencia del mercado lácteo; no impedir la normal circulación de vehículos y personas; y permitir la entrada de leche y/o salida de productos de las plantas lácteas.

¿Qué pasará con le sobrestock?

Por su parte, un análisis del Ieral de Fundación Mediterránea menciona que la medida que anunció el gobierno para combatir la crisis lechera tiene algunos puntos que pueden ser controversiales.

El Instituto de Estudios de la Realidad Argentina y Latinoamericana (Ieral) de la Fundación Mediterránea planteó una serie de riesgos que deben tenerse en cuenta si avanza la decisión oficial de comprar los sobrestocks de productos lácteos como medida para combatir la crisis de los tambos.

En su último Informe de Coyuntura, el Ieral incluye un artículo de los investigadores Juan Manuel Garzón y Francisco Bullano referido al impacto del nuevo contexto económico en los precios agropecuarios y allí incluyen un apartado relacionado a esta medida anunciada por el ministerio de Agroindustria. Concretamente, el estudio enfatiza cuatro riesgos concretos de su puesta en marcha. Primero, puede aliviar la situación de coyuntura pero con riesgo de agravar la situación futura si los stocks públicos vuelven a ser colocados en el mercado local.

Segundo, si su uso se vuelve constante, existe riesgo moral por parte de la industria en cuanto a excesos permanentes de producción, que serán absorbidos por mayores compras públicas.

Tercero, si los stocks públicos se deprecian (se deterioran, perecen, por demoras en ser comercializados), los costos fiscal y político de este tipo de programas pueden ser muy elevados.

Por último, si los stocks públicos se comercializan en el exterior vía industrias exportadoras o traders privados, se compite con el resto de las colocaciones del país, lo que es de esperar genere algún costo sobre las empresas, por la necesidad de ajustar precios de venta o asignar mayores recursos para sostener los envíos.

 

El Instituto de Estudios de la Realidad Argentina y Latinoamericana (Ieral) de la Fundación Mediterránea planteó una serie de riesgos que deben tenerse en cuenta si avanza la decisión oficial de comprar los sobrestocks de productos lácteos como medida para combatir la crisis de los tambos.