La comparación se realizó con el mismo mes de 2015
Cayeron un 5 % las ventas en los comercios de la ciudad en marzo
Lo estima un informe que elaboró el Centro Comercial de Santa Fe. Influyen los aumentos de precios, la “erosión” de la capacidad de compra del salario y la incertidumbre sobre las consecuencias del ajuste. Pero hay mejores expectativas para el segundo semestre.
Mañana gris. Durante esta semana, el clima lluvioso también redujo el movimiento en la peatonal San Martín.
Foto: Flavio Raina
Gastón Neffen
Las compras en los comercios son un termómetro que suele medir bien las percepciones económicas de la gente, “que cuida cada vez más el mango” repiten a coro los referentes de los negocios de la ciudad. En un contexto de aumento de tarifas, inflación y pérdida del poder adquisitivo del salario, en marzo cayeron un 5 % las ventas minoristas en los negocios de la ciudad, según un informe que va a publicar hoy el Centro Comercial de Santa Fe.
La cifra coincide con un relevamiento que realizó a nivel nacional la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (Came), que calculó que las ventas se replegaron un 5,8% en marzo, en promedio, respecto del mismo mes del año pasado.
“Se está cuidando mucho la plata, por la inflación y el aumento de tarifas. Además todavía no se cobraron ni acordaron la mayoría de los acuerdos paritarios. Al menos repuntaron un poco las ventas en comparación con febrero, que fue muy malo”, contextualizó Norberto Raselli, presidente del Centro Comercial, en una entrevista con El Litoral.
Carlos Mues, gerente general de Red Sport, explicó que se está dando un “efecto pinza” sobre los negocios por el combo retracción del consumo y aumento de costos (impuestos, servicios clave como la energía y en breve paritarias) pero en el mediano plazo esperan que el escenario cambie.
“Es cierto que hay una desaceleración pero no es traumática en nuestro rubro. Hay que pasar esta coyuntura y somos moderadamente optimistas para el segundo semestre del año”, adelantó Mues, en diálogo con El Litoral.
En un mercado interno “más frío”, los comerciantes cuentan que la gente trata de comprar lo indispensable y la mayoría de las ventas se hace a crédito —sobre todo aprovechando el Plan Ahora 12, que sigue vigente—. También volvieron las típicas recetas argentinas para intentar amortiguar el peso de los aumentos sobre el bolsillo.
En los supermercados, por ejemplo, se empiezan a “mirar con cariño” las segundas y hasta terceras marcas. “En las farmacias todavía no vemos una caída fuerte en las ventas, pero los clientes empiezan a consultar por los genéricos y buscan medicamentos más económicos”, contó Alicia Caraballo, integrante del Colegio de Farmacéuticos de Santa Fe.
Jorge Baremberg, de la Asociación Amigos de Calle San Martín, está preocupado por la evolución de esta coyuntura. “Hay incertidumbre y la gente está asustada. En general se consume sólo lo que se necesita. El aumento de la energía eléctrica es muy importante y puede llegar a los 20.000 pesos para un negocio, el doble de lo que se pagaba”, advirtió.
En el rubro de las librerías también notan una leve retracción de las ventas. “La caída por ahora es moderada y se busca pagar con tarjeta”, precisó Sandra Yardín, que gerencia una de las principales cadenas de venta de libros en la ciudad.
El informe de Came concluye que en marzo se sintió muy fuerte el efecto “precios nuevos, salarios viejos” y que la gente todavía tiene muy cargadas las tarjetas por las compras de fin de año.
En cifras
5,8 por ciento
es lo que bajaron las ventas en marzo a nivel país, respecto del mismo mes del año pasado, según un estudio que publicó la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (Came) y para el que se consultó a 1.200 comercios de distintos rubros.
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