Cita en Comodoro Py y con el centro de la escena política

Cristina dio un escrito al juez y un discurso a sus militantes

Llamó a crear “un frente ciudadano opositor”. Recusó al juez Bonadio, que investiga su responsabilidad en una operación de $ 75.000 millones con dólares futuro, vendidos a precio vil para bajar el “blue”.

Cristina dio un escrito al juez y un discurso a sus militantes

Fue indagada en la causa por el dólar futuro. Con la multitud fue locuaz, habló durante una hora y 12 minutos. En cambio, en el juzgado, fue muy discreta. Prefirió no ser interrogada.

Foto: Télam

 

De la redacción de El Litoral

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La ex presidente Cristina Fernández recusó hoy al juez federal Claudio Bonadio por considerar que cometió el delito de prevaricato, al llamarla a declaración indagatoria, y opinó que el gobierno de Mauricio Macri le quiere “plantar” una causa para que la detengan.

Durante su paso -por aproximadamente una hora frente al magistrado en la audiencia-, la ex jefa de Estado presentó la recusación, entregó un escrito de descargo con críticas al juez y pronunció un corto alegato de tono político, pero se negó a responder preguntas del tribunal, según informaron fuentes judiciales.

Hasta el mediodía no se sabía si el juez Bonadio aceptará o rechazará la recusación en la causa que revisa las ventas de dólar futuro a precio vil, por las que ha encontrado un quebranto de $ 7.500 millones.

Locuaz ante la multitudinaria manifestación que la acompañó en los tribunales de Comodoro Py, discreta en su expresiones ante el magistrado, la ex mandataria captó la atención de la prensa nacional durante toda la mañana.

La ex jefa de Estado ingresó a los tribunales antes de las 10 de la mañana y en su trayecto por el edificio saludó con la mano a simpatizantes -entre los cuales había varios empleados judiciales-, tirando besos a la distancia y tocándose el pecho con el puño cerrado, hasta entrar al despacho de Bonadio. La acompañaron en el juzgado su abogado defensor, Carlos Alberto Beraldi, más el ex juez de la Corte Suprema Eugenio Zaffaroni, quien la asesora, y el ex secretario general de la Presidencia Oscar Parrilli, mientras en los pasillos del edificio de Comodoro Py se oían los gritos de la multitud agolpada frente a la sede judicial.

Discurso

Hay expresiones del escrito de la ex presidente, que la propia Cristina Fernández de Kirchner desarrolló más extensamente en su encendido discurso a quienes se movilizaron.

“Esta hipótesis de asociación ilícita, construida capciosamente por el magistrado, es otra muestra de la arbitrariedad con que ha procedido, y revela además la intención del gobierno con la colaboración imprescindible del Poder Judicial de ‘plantar’, a quien suscribe, una causa penal que me prive de la libertad”, señaló en el escrito.

En tanto, ante la militancia (como en el escrito), enfatizó: “No les tengo miedo”, para que bramaran sus seguidores. “Me pueden citar 20 veces, me pueden meter presa, pero no van a hacer que deje de decir lo que pienso, no me van a callar”, dijo.

A lo largo de su discurso, duro con los medios de comunicación y con el caso de la empresa off shore que abrió en los ‘90 en Panamá el presidente Mauricio Macri, sostuvo que el kirchnerismo es víctima de una persecución. “Si pudieran prohibir la palabra K del vocabulario lo harían”, dijo mientras su intervención fue transmitida -en vivo- por el Canal 7 y otras señales privadas de radio y televisión, a la manera de aquellas cadenas nacionales de su gestión.

“Los que estaban buscando la ruta del dinero K, se encontraron con la ruta de dinero M”, fue una de sus expresiones más celebradas por la multitud. Lo mismo ocurrió con “mi gobierno tuvo escasísimos DNU, uno de ésos fue el que creó la asignación universal por hijo”, afirmó.

Cristina Kirchner se citó al interpretar que, en estos cuatro meses, “de ‘la patria es el otro’ se ha pasado a ‘la patria es del otro’ ”.

A sus acostumbrados dardos sobre los medios de comunicación, los periodistas que han investigado el incremento de su fortuna familiar y los partidos políticos que se opusieron a su gobierno, se sumaron hoy nuevos destinatarios: los ex K. Sobre los peronistas que dejaron el kirchnerismo en las dos Cámaras afirmó: “No, no me gusta la palabra traición”, casi en diálogo con los jóvenes de La Cámpora y agregó: “Tiene razón la compañera, deben tenerle miedo a los carpetazos”. “Se está perdiendo la libertad”, opinó.

También se encargó de recordar a quienes “no querían pagar Impuestos a las Ganancias y hoy los están echando (de sus trabajos) como perros”.

Un día sin periodistas

A los militantes, Cristina les propuso organizar “una gran jornada de reflexión nacional”, que bien podría ser “un domingo, en familia”, durante la cual “la gente apague la TV, la radio y no lea los diarios, ni los medios electrónicos... y que piense cómo estaba y cómo está hoy”.

De inmediato, agregó: “Muchos creían que era solamente por su propio esfuerzo y no por una política de gobierno... Bueno, ahora que vean si pueden con el mismo esfuerzo llenar el chango, pagar vacaciones o las facturas de los servicios públicos”, disparó.

Sostuvo que el país necesita “un frente ciudadano (opositor) que no pregunte a nadie de dónde viene ni a quién voto, debe preguntarle a todos cómo estabas, como estás y cómo querés estar”.

Periodista agredida

La periodista Mercedes Ninci fue agredida por manifestantes en la puerta de los tribunales de Comodoro Py. Entre lágrimas, tirada sobre el asfalto, dijo que le pegaron “muy fuerte en la cabeza”. Personas con chalecos de La Cámpora le impidieron hacer la cobertura de la noticia en el lugar e intentaron tapar, con sus cuerpos, a los camarógrafos que registraban la agresión.

Más tarde, tras el discurso, parte de los manifestantes K y algunos efectivos policiales se enfrentaron. Hubo empujones, golpes de puños, palazos y gases lacrimógenos en el enfrentamiento que terminó con algunos heridos leves, aunque la situación fue rápidamente superada con la dispersión de los militantes por parte de los efectivos de fuerzas de seguridad.

“Macri, basura, vos sos la dictadura”

La ex presidente Cristina Fernández de Kirchner, tanto en su escrito al juez Bonadío como a la multitud que fue a vivarla, comparó su gestión con las de Hipólito Yrigoyen y Juan Domingo Perón.

Mientras así se expresó ante la multitud, los manifestantes respondieron sobre el presidente electo hace apenas 4 meses: “Macri, basura, vos sos la dictadura”.

Cristina sostuvo que como en los golpes de Estado que terminaron con los gobiernos de esos líderes históricos de la UCR y el PJ hoy están en marcha unos “supuestos procesos moralizadores” para desacreditar lo logros de “los movimientos nacionales y populares”.

Para Cristina, las causas por corrupción y lavado de dinero que existen contra su gobierno, como la condena sobre su secretario de Transporte Ricardo Jaime, o la prisión preventiva que ha alcanzado al empresario K Lázaro Báez, responden a su particular lectura de la historia argentina.

“Los verdaderos motivos siempre fueron los mismos: por un lado, barrer con las conquistas logradas y los derechos adquiridos por la sociedad en sus diferentes estamentos y actividades; por el otro, imponer programas de ajuste y endeudamiento -matrimonio indisoluble- utilizando la supuesta corrupción para ocultar ambos objetivos. Con el correr de los años cada uno de esos supuestos ‘procesos moralizadores’ devinieron en formidables transferencias de ingreso y patrimonio de las grandes mayorías a las elites gobernantes y sus grupos económicos vinculados, saliendo a la luz los escandalosos mecanismos de corrupción para hacer operativas esas políticas”, dijo en su escrito al juez.

La clave

Mausoleo

Lleva ya dos meses cerrado el mausoleo a Néstor Kirchner, que construyó su amigo Lázaro Báez, en Río Gallegos. Como el empresario preso despidió a los custodios (como a otras 1.800 personas) ya no puede ser visitado ese imponente monumento. Además, el juez federal Sergio Torres envió un oficio a la gobernadora Alicia Kirchner para que informe si la administración provincial realizó algún aporte financiero para su construcción.