Esperando el 11 de mayo

Brasil: marchas en favor de Rousseff

• Con motivo de los actos del Día del Trabajador, los movimientos que apoyan a la presidenta del vecino país aprovecharon para tomar las calles y protestar contra el “impeachment” que se definirá en los próximos días.

Redacción El Litoral

Agencias EFE/DPA

Los actos en favor de la presidenta Dilma Rousseff acapararon ayer las conmemoraciones del 1 de mayo que se realizaron en 17 Estados de Brasil, en su mayoría contrarios al “impeachment” de la mandataria.

Como es habitual, los más multitudinarios ocurrieron en Sao Paulo, reducto histórico de las manifestaciones en el país.

Uno fue el organizado por la Central Única de Trabajadores (CUT), que es el brazo sindical del gobernante Partido de los Trabajadores (PT), en el cual participó la mandataria. Otro fue organizado por la central opositora Forca Sindical, liderada por el diputado Paulinho da Forca, un enemigo declarado del Gobierno. Un tercer acto fue organizado por el colectivo ConLutas, que defiende nuevas elecciones.

“Ni el PT representa más a los trabajadores, ni la oposición de derecha es una alternativa. Basta de Dilma, Temer, de ese Congreso del PMDB, del PSDB y demás alternativas de derecha”, fue la consigna con que el grupo convocó a actos en este Día de los Trabajadores.

El colectivo alude al Partido del Movimiento Democrático Brasileño al que pertenece el vicepresidente Michel Temer, y al principal opositor del Gobierno, el Partido del Movimiento Democrático Brasileño.

En el acto organizado por la CUT estaba prevista la participación del ex presidente Luíz Inácio Lula da Silva, pero desistió a último momento alegando problemas en la voz.

Durante su intervención en el evento, Rousseff dijo que va a “resistir y luchar hasta el final” contra el pedido de juicio político en su contra que avanza en el Congreso y por el cual podría ser alejada del cargo por 180 días a partir del 11 de mayo, si el Senado ratifica su enjuiciamiento.

Rousseff y el PT califican de “golpe” al proceso, puesto que niegan que la mandataria haya violado la Ley de Responsabilidad Fiscal, tal como aseguran los autores de la petición.

“Los golpistas intentan violar la Constitución por haber perdido las elecciones” en octubre de 2014, dijo la presidenta en referencia a los comicios en los que conquistó su segundo mandato. Al mismo tiempo, ratificó el aumento de un nueve por ciento en los beneficios que otorga el Gobierno a familias pobres a través del programa Beca Familia, y un reajuste del cinco por ciento en el Impuesto de Renta que también favorecerá a los sectores de menores ingresos.

Rousseff atacó al vicepresidente, Michel Temer, y a su equipo, a quienes acusó de querer “acabar con la valorización del salario mínimo y con los reajustes a los jubilados” y reducir los programas como el Beca Familia y Mi Casa, Mi Vida, que otorga viviendas populares.