“‘No somos el mejor equipo en la presión alta ni en la elaboración”, afirmó el DT

Martino bajó la presión puntualizando los aspectos en que debe mejorar Argentina

El técnico del Seleccionado argentino afirmó ayer, de cara a la semifinal de hoy, a las 22, ante los Estados Unidos en la Copa América Centenario, que “no tenemos bien desarrollada la presión alta de la manera en que la tiene que tener desarrollada un equipo que quiera presionar bien y en forma continua. No la hacemos mal, pero no somos los mejores. Ni en la presión alta ni en la elaboración”.

Martino y su obsesión. El Tata habla con la prensa, mientras a su lado está la pelota. El DT remarcó las facetas del juego en las que pretende que la Selección siga creciendo. Foto: EFE

Redacción de El Litoral

[email protected]

Télam

Para Martino, el Seleccionado argentino elabora “mejor que muchos equipos” como también en la presión en ataque, pero remarcó que no son “los mejores” en ambos casos. “Cuando jugamos contra los mejores en estas dos facetas que tiene el juego, hay que tenerlo en cuenta”, indicó el Tata en respuesta a la consulta de Télam.

Martino no confirmó la alineación titular para hoy, pero se refirió al volante Ángel Di María, quien se recupera de una lesión muscular: “Ángel está mejor que (Javier) Pastore y más expectante inclusive para el partido de mañana (por hoy)”. A su vez, manifestó que los volantes Lucas Biglia y Augusto Fernández son “diferentes” en cuanto a lo que pueden aportar para el equipo. “Lucas se pone como armador cuando (Javier) Mascherano se mete entre los centrales y libera más a Éver (Banega) y Augusto puede hacer eso, pero gana mejor las espaldas y cuando el equipo incorpora a Leo (Messi) detrás del nueve y se hace un siete/ocho; ésas son las diferencias”, detalló el Tata. Asimismo, indicó que tanto Erik Lamela como Ezequiel Lavezzi trabajan “bien defensivamente”, pero el primero es “más volante extremo” y el segundo es “más ‘wing’ y mejor en el uno a uno”.

El ex DT de Newell’s Old Boys destacó que el plantel tiene “la ilusión de jugar una nueva final” y les otorgó “un gran mérito” el hecho de que hayan jugado las finales de la Copa del Mundo Brasil 2014, la Copa América 2015 y estén a un paso de disputar la final de la Copa América Centenario.

El Tata, desde la sala de prensa del estadio NRG de Houston, admitió que la Argentina no tendrá “un control total de la pelota” ante los Estados Unidos, pero su deseo es que el equipo “no sea superado” como en los últimos 15 minutos del primer tiempo ante Venezuela por los cuartos de final.

En cuanto a los viajes que afrontó el Seleccionado, desde su presentación en Santa Clara por el grupo D hasta el partido de hoy en Houston, Martino le restó importancia al desgaste entre partidos y traslados. “No hay nada para decir del cansancio. Ya sabíamos cómo era el esquema de los partidos. Dije en un momento que el local gozaba de cierta ventaja, pero me rectifico porque pudimos haber jugado ante otro equipo y no Estados Unidos. Además, si ganamos tendremos un día más de descanso”, apuntó el entrenador del Seleccionado argentino.

Martino afirmó que el equipo está “más parejo” que la edición pasada de la Copa América y “con menos altibajos” según los partidos de la presente edición. “Desde el inicio de la copa del año pasado tuvimos equipos fuertes. Enfrentar ahora a Estados Unidos, que se recuperó y eliminó a Ecuador, me parece que lo pone en un lugar por debajo de Chile, y ustedes saben lo que pienso de Chile, y está por encima de los tres rivales que tuvimos”.

Por último, el Tata señaló que la localía, en este caso para Estados Unidos, tendrá “mucha incidencia”, pero advirtió que el partido será en Houston, donde conviven un 28% de mexicanos, y espera que ellos tomen partido por su equipo.

Dempsey y su doble desafío

• El delantero y figura del Seleccionado estadounidense de fútbol, Clint Dempsey, afirmó ayer que tendrán “una prueba difícil” en la misión de controlar al crack rosarino Lionel Messi en una de las semifinales de la Copa América Centenario frente a la Argentina, en Houston.

“Detener a Messi será una prueba difícil. Intentaremos frenar su juego, sabemos que es muy rápido y que puede marcar un gol en cualquier momento, pero mañana (por hoy) será nuestro momento y hay que intentarlo”, manifestó a Agencia Télam Dempsey en la zona mixta realizada en el estadio NRG de Houston.

Para Dempsey, en la consulta de Télam, la Argentina es “un gran equipo, quizás el mejor del mundo” y apuntó que deberán dar “lo mejor” para llegar por primera vez en la historia del Seleccionado estadounidense a la final de la Copa América. “Todos tenemos que estar juntos, concentrados, para hacerle las cosas difíciles a Messi. Tenemos que tener la mejor defensa del campeonato. Fuimos ganando confianza en el torneo y creemos en nosotros”, agregó el delantero de Seattle Sounders.

Por otra parte, Dempsey expresó como “gran sensación” que el equipo estadounidense dispute las semifinales de la Copa América, por segunda vez en su historia luego de la campaña en Uruguay 1995. “Crecí mirando el fútbol de Sudamérica, mirando Copa América, y ser uno de los futbolistas en esta competencia es increíble, es un torneo de estrellas y estar en las semifinales es una gran sensación, pero hay que seguir avanzando, que el sueño siga y para mañana (por hoy) tenemos que dar lo mejor”, indicó Dempsey, quien además está a cinco goles del máximo anotador de la historia del Seleccionado estadounidense, Landon Donovan.

La “generosidad” del Tata

• Un periodista peruano se animó, levantó la mano en la conferencia de prensa de Gerardo Martino y lanzó la pregunta: “Entre tantas cuestiones tácticas, ¿saldrá un buen partido mañana? Le pido que sea generoso” y fue entonces cuando los ojos del Tata se agrandaron. En su tarea de complacer al cronista, Martino pensó unos segundos la respuesta, pero llegó al punto, entendió que era imposible y fue directo al grano: “La verdad que soy generoso, pero lo que te pueda decir en la previa del partido... es más interesante que vos como periodista lo puedas analizar antes y después, aunque para ustedes es más después que antes”, deslizó Martino en otra referencia al trabajo de los medios de comunicación.

El adjetivo “generoso” en la boca del entrenador del Seleccionado argentino provocó risas en la sala de prensa del estadio NRG de Houston. “Deseo hacer un buen partido, que Argentina gane y que Leo (Messi) juegue bien y el resto también. Ese es el deseo, pero una cosa es el deseo y otra poder ser tan específico o tan generoso con la respuesta”, cerró Martino, propenso a hacer dádivas, según su propia declaración.

Un estadio impresionante

NRG, de Houston, con techo retráctil y refrigeración central

Redacción de El Litoral

[email protected]

El NRG Stadium, de Houston, contendrá, en el más elevado nivel de interpretación de ese verbo, al Seleccionado argentino que hoy afrontará la semifinal de la Copa América Centenario allí ante el anfitrión Estados Unidos, ya que su techo retráctil y una refrigeración central que hace disminuir las altas temperaturas que azotan esta ciudad texana en el verano que comienza hoy, seguramente incidirán en favor del conjunto albiceleste que llega a este cotejo con 48 horas menos de descanso que su rival.

El equipo de Leo Messi, tal como lo mencionó ayer un medio local al hacer una semblanza de su trayectoria, tendrá que padecer ante un estadio con localidades agotadas (los precios variaron entre 131 y 1.214 dólares) a las 20 local (22 de Argentina), cuando comience el partido, una temperatura estimada en 35 grados, algo acorde con este Estado texano en gran parte desértico del sur de los Estados Unidos, y además con el consecuente cansancio encima, por lo que el propio NRG le tenderá una mano.

“A 230 días del Súper Bowl (se jugará el 5 de febrero del año próximo)”, reza un cartel electrónico situado en el ingreso al portentoso estadio inaugurado en 2002, que cuenta con capacidad para 72.200 espectadores, lo que marca a las claras y referencia previa a Messi mediante, el desconocimiento y desinterés que existe en los Estados Unidos por el fútbol-soccer en general y por esta Copa América Centenario en particular.

De hecho, la obtención del anillo de la temporada 2015-2016 de Cleveland Cavaliers al vencer el domingo por la noche en el séptimo partido a Golden State Warriors, el campeón destronado, generó tantos espacios en la prensa que la Copa América desapareció por completo.

Pero para los argentinos esto transita por carriles muy diferentes y la idealización que hacen de este deporte hace que estadios como este NRG, que por supuesto alberga “naturalmente” al fútbol americano, seguramente parecerá un auténtico estadio de fútbol convencional, como ayer anunció el propio entrenador del seleccionado local, el alemán Jurgen Klinsmann, “cuando se llene de camisetas albicelestes”.

Conciertos de grandes estrellas de la música, rodeos y ahora soccer, todos espectáculos “exóticos” que alberga este estadio que sufrió importantes averías al paso del huracán Ike en 2008 y hoy verá cómo su césped natural, instalado sobre el sintético original, recibirá los mágicos pies del mejor jugador del mundo, un tal “Lionel Messi”, que como bien dijo este medio, pinta el fútbol como Leonardo.

Un lujo. La imagen corresponde a un partido de fútbol americano y sirve para mostrar la capacidad del estadio y su techo, que hoy estará cerrado, para refrigerar el interior.

Un Klinsmann motivador: “Es nuestra oportunidad de hacer historia”

• El alemán Jurgen Klinsmann, entrenador de los Estados Unidos, rival de hoy de Argentina por las semifinales de la Copa América Centenario, aseguró ayer que su Seleccionado está “en el momento justo y ante la gran oportunidad de hacer historia” eliminando al equipo de Lionel Messi, de quien aseguró que tiene “armas para contrarrestarlo”.

“Es nuestra oportunidad y nuestro momento y queremos aprovecharlo. No nos sentimos menos que nadie y sabemos que después de este partido nos queda un 10 por ciento para alcanzar el título”, remarcó Klinsmann en el monumental estadio NRG, de Houston, en la previa del partido ante el conjunto argentino.”Sabemos lo que tenemos y que Messi estará enfrente, pero tenemos armas para contrarrestarlo. Somos un equipo agresivo y debemos elevar la vara para competir más allá del resultado, porque seguramente será un partido fascinante”, explicó.

La vinculación de Messi con Maradona resultó insoslayable y Klinsmann, quien venció a Argentina como jugador en la final del Mundial de Italia 1990 y como entrenador en los cuartos de final de Alemania 2006, fue contundente a la hora de pormenorizarlos. “Maradona fue el más grande de su tiempo y Messi lo es ahora. Cada uno en su época, sin comparaciones. Porque yo disfrutaba cuando jugaba contra él en la Champions League y ahora a mis jugadores les dije lo mismo respecto de Cristiano Ronaldo cuando enfrentamos a Portugal y mañana (por hoy) haré lo propio”, destacó. “Pero también les digo que el partido de mañana (por hoy) pasará por el orgullo y que eso es lo que todos sentimos respecto de haber alcanzado las semifinales. Nuestros jugadores están muy motivados y la mayoría tiene experiencia porque juega en las grandes ligas del mundo. Después, que los medios digan lo que quieran respecto de nuestras posibilidades”, argumentó.

Es que la crítica fue impiadosa después del fallido debut en la fase de grupos ante Colombia, cuando perdieron por 2 a 0 en Santa Clara, augurando un mal futuro para el equipo tomando esa caída como perspectiva. Sin embargo Klinsmann tomó ese cotejo de manera diferente. “La derrota con Colombia nos dejó muchas enseñanzas y desde entonces el equipo empezó a crecer. Hemos mostrado excelentes secuencias de juego desde entonces, y aunque sabemos que Argentina es un grande, también nosotros hemos realizado cosas importantes y vamos por más”, sentenció. “Esta Copa América, como los amistosos que realizamos en Europa, nos sirvieron de mucha experiencia, pero eso no significa nada a esta altura. Si queremos estar en la final, lo primero que debemos pensar es que con lo hecho no alcanza, no es suficiente”, advirtió.

Hace historia. Klinsmann logró que Estados Unidos llegara a las semifinales pero no quiere conformarse con eso. Si lograra superar a la Argentina, sería un golpe radical. Foto: EFE