Handball masculino

Francia en busca de un logro inédito

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Galos y germanos protagonizaron una semifinal cargada de emotividad, definida a segundos del epílogo.

Foto: EFE

 

Redacción de El Litoral

dpa/efe

Los Seleccionados de Francia y Dinamarca disputarán mañana la definición del torneo de handball masculino de los Juegos Olímpicos 2016, tras imponerse ayer en las semifinales ante Alemania y Polonia, respectivamente.

El conjunto galo, que busca convertirse en Río de Janeiro en el primer equipo en la historia en encadenar tres títulos olímpicos consecutivos, se impuso por un ajustado 29 a 28 a los germanos, el actual campeón europeo, con un gol a falta de tres segundos del lateral Daniel Narcisse.

Un agónico final que nadie hubiera previsto apenas una decena de minutos antes, cuando los franceses, actuales campeones del Mundo, dominaban por 26 a 21, augurando una victoria mucho más holgada.

Sin embargo, las paradas del arquero Silvio Heinevetter y, sobre todo, los goles del extremo Tobias Reichmann y el lateral Julius Kuhn, que sólo falló uno de los nueve lanzamientos que intentó en el partido, permitieron a Alemania igualar en 28 tantos, a un minuto del epílogo.

Lapso en el que surgió Daniel Narcisse, que como Omeyer, Nikola Karabatic o Guigou busca su tercer oro olímpico, con un gol a falta de tres segundos que dejó a Francia a un paso de hacer historia.

El rival

En cuanto a la otra semifinal, también tuvo una definición muy exigua, ya que Dinamarca, que disputará su primera final olímpica, se impuso también por 29 a 28 a Polonia, en un encuentro en el que el arquero Niklas Landin condujo a los nórdicos al triunfo con sus paradas notables en tiempo extra. Una sobresaliente actuación en la prórroga que permitió a Landin imponerse en el espectacular duelo que sostuvo con el portero polaco Piotr Wyszomirski, que mantuvo vivas en todo momento las esperanzas de victoria de los polacos con una sensacional actuación.

Pero Wyszomirski, que cerró el choque con un soberbio 48 por ciento de paradas, no pudo mantener su efectividad en el tiempo extra, donde el cancerbero polaco tan sólo pudo atajar dos balones. La mitad de los que detuvo en la prórroga el cancerbero danés Niklas Landin, que consumó con sus intervenciones el triunfo final y el pase a la definición tan deseada.