En el momento menos pensado...

CRAI fracasó, al no alcanzar lo que merecía

• No logró imponer condiciones en todo el desarrollo y perdió en la última jugada del partido, tras tomar una errónea decisión en un penal a su favor. Ahora jugará por el tercer puesto ante Jockey.

César Miño

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Enviado especial a Rosario

Con una actuación que difícilmente olvidarán todos los integrantes de su gran familia, Old Resian venció a CRAI por 26 a 20 con un agónico try en tiempo de descuento, convirtiéndose de ese modo en finalista del Regional del Litoral 2016, instancia en la que el 8 de octubre venidero se medirá con Duendes, que posteriormente se quedó con el clásico rosarino (ver página 10).

Además de respetar a rajatablas un planteo táctico irreprochable, a pura entereza y convicción, Old Resian ratificó con creces el porqué fue la gran revelación del torneo (fundamentalmente, a partir de la zona Campeonato) y encontró su premio mayor en la jugada de cierre del partido.

* A saber: CRAI dispuso de un penal casi en mitad de cancha con el reloj indicando el minuto 40 y optó por patearlo, remate que resultó apenas desviado. A partir de allí, el equipo rosarino inició una acción tan valiente como impregnada de ilusión, que se extendió por espacio de más de dos minutos, interrumpida por un par de infracciones santafesinas, que fueron jugadas rápidamente.

Despues de más de una decena de fases, la jugada culminó con Jaef zambullándose en el ingoal santafesino, desatando una alegría inconmensurable, que sin lugar a dudas premió al equipo que mejor jugó durante los ochenta y cuatro minutos que duró la primera semifinal de la víspera.

Pero más allá de la argumentación y el reconocimiento del vencedor, nadie debe dudar que la clave estuvo en el perdedor. ¿Qué le pasó hoy a CRAI...?, se preguntaban azorados más de mil miembros de la familia Gitana que acompañaron al equipo.

Exactamente el mismo que el sábado pasado venció a su verdugo de ayer por 62 a 7, brindando una verdadera cátedra rugbística. ¿Cómo es posible que en la agradable tarde de Fisherton, la esencia de este admirable CRAI versión 2016, haya estado ausente en la casi totalidad del desarrollo ? es el gran interrogante a resolver.

Sinceramente, tras la culminación del partido, ni los simpatizantes, ni los colegas que cubrieron la excelente jornada semifinal, ni los propios jugadores encontraron respuestas precisas.

El desarrollo

Desde el inicio quedaron expuestas imperfecciones impropias de CRAI: errores no forzados, toma de decisiones incorrectas y una sensación de que la mayoría de los jugadores estaba extremadamente tensionada o superada por la situación.

Para colmo, producto de una inusual tibieza defensiva llegó el primer try de Old Resian, que a los 16 minutos colocó el marcador 10 a 6 a su favor. Mientras los oriundos de Grantfield multiplicaban entusiasmo, genialmente conducidos por su medio scrum y capitán, Nazareno Valentini (sin dudas, el Man of the Match de ayer), los santafesinos deambulaban en desaciertos.

A 4 minutos del cierre del primer tiempo, Joaquín Schierano se aferró a su recurrentemente elogiada capacidad, iniciando una acción desde sus propios 22 metros, atravesando adversarios en profundidad y colocando un impecable off-load que marcó el inicio del tramo final de la jugada, que terminó con Nacho Poletti apoyando en el ingoal rival.

¡Apareció CRAI...!, pensamos ilusionados. Pero apenas había sido una ráfaga de ilusión. Con otros dos penales de Valentini, el parcial se cerró 16 a 13 favorable al equipo que hasta allí, había jugado mejor.

El complemento

El segundo tiempo arrancó de manera bastante parecida y encontró rápidamente tres puntos más para los rosarinos; mientras que a los 11 minutos CRAI apoyó su segunda conquista y, goal mediante, pasó a prevalecer por 20 a 19.

Poco a poco, pese a distar de ser el ideal, pareció encontrar cierta coherencia en su accionar, estableciendo por primera vez en el partido ventaja territorial; arrinconando a un adversario que fue puro corazón... Hubo dos kicks de Facundo Beltramino que se estrellaron en los postes: un penal y un drop; los que se sumaron al penal factible errado en el primer tiempo.

Pero amén de estas circunstancias que son factibles que ocurran, CRAI no encontró la manera de expresar convenientemente en el resultado esos escuetos momentos de cierta supremacía, producto de sus reiteradas impericias.

Finalmente, llegarían las acciones descriptas en el inicio de esta crónica, que no hicieron más que revertir el destino final de un encuentro al que es lógico describir desde las virtudes del vencedor; pero fundamentalmente, desde la decepcionante actuación del perdedor.

No porque un gran equipo no pueda tener una desafortunada tarde y jugar mal; sino fundamentalmente porque resulta muy difícil encontrar la manera exacta de describir lo que le ocurrió a CRAI en Las Cuatro Hectáreas.

Aferrándonos a lo que coincientemente escuchamos en medio de la generalizada desilución, algo quedó en evidencia: CRAI no tuvo un líder en el campo de juego; pero también falló de manera notoria el staff, al no impartir instrucciones precisas en los momentos cruciales del partido.

Porque amén de los desaciertos de los jugadores, hay decisiones que deben fortalecerse desde afuera, aportando las garantías que necesitan quienes están funcionando a 200 pulsaciones por minuto, en busca del mejor destino posible para un partido.

La pena que impera en la gran familia de CRAI es inmensa y está focalizada en algo mucho más profundo que haber perdido un partido importante, que es algo propio del deporte mismo. Radica en pensar en los jugadores que integran un plantel ejemplar; ellos son los grandes protagonistas de una historia que fueron construyendo a pura convicción, hasta acceder a un presente tan elogiable.

El que de manera impensada, ayer sufrió una desilución que será muy difícil de equiparar.

3.500

espectadores

aproximadamente hubo ayer en Las Cuatro Hectáreas, teniendo en cuenta los dos partidos semifinales. Como es habitual, tras la culminación del primero, los simpatizantes de Old Resian y CRAI mutaron sus ubicaciones con los de Jockey y Duendes, respectivamente.

Joaquín Schierano inicia la excelente acción que culminó con el primer ensayo de CRAI, despertando una ilusión que inexorablemente se iría desvaneciendo.

Foto: gentileza Franco Perego

Lo importante

Presencias

El presidente de la Unión Argentina de Rugby, Carlos Araujo, estuvo presente en el Country de Fisherton. Compartió el Hospitality previo a los partidos y luego observó las acciones desde el balcón del Club House del Jockey Club de Rosario.

síntesis

Old Resian 26

CRAI 20

Cancha: principal de Las Cuatro Hectáreas.

Referee: el rosarino Juan Pablo Spirandelli.

Old Resian: Ulises Garziera (Benjamín Vasiman), Adrián Bacchella y Diego Acuña; Ramiro Cárcamo (Luciano Cuminetti) y Lucas Quaranta; Agustín Perino (Agustín Vaisman), Manuel Rodríguez y Santiago Torroba; Nazareno Valentini (capitán) y Nicolás Pendino; Ignacio Posner, Víctor Jaef, Francisco Cuneo, Lucas Humanes y Juan Ignacio Cárcamo.

Coaches: Juan Manuel Queirolo y David Dinolfo.

CRAI: José Canuto (Tomás Ramos), Santiago Amsler y Santiago Jelicic (Pedro Marozzi); José Dogliani (Axel Rumscheidt) y Joaquín Schierano; Emanuel Piermarini (Augusto Lanteri), Ramiro Dolfo y Justo Ordano; Estanislao Bay y Mario Salva (h); Ignacio Poletti, Salvador Damiani (capitán), Gonzalo García (Jorge Augusto Qüesta), Patricio Fosco y Facundo Beltramino.

Head Coach: Luciano Bordón.

Primer tiempo: 6, 39 y 41, penales de Valentini; 12, 14 y penales de Beltramino; 15, try de Humanes y goal de Valentini; 35, try de Poletti y goal de Beltramino.

Parcial: CRAI 13- Old Resian 16

Segundo tiempo: 2, penal de Valentini; 11, try de Damiani y goal de Beltramino; 43, try de Jaef y goal de Valentini.

Amonestados: Rodríguez y Bacchella (OR); Marozzi (C).

Magnífica fue la presencia santafesina en Las Cuatro Hectáreas, colmando uno de los laterales de la cancha principal de Jockey.

Foto: Franco Perego

Recepción. El sector con simpatizantes de CRAI recibió al equipo con el tradicional humo azul y blanco, colocando un excelente marco a la primera semifinal.

Foto: Franco Perego

“No existe una explicación lógica...”

La imagen de los jugadores de CRAI será muy difícil de olvidar, porque tras saludar a sus adversarios y cumplir con la habitual charla post partido, recibieron el consuelo en las salutaciones de sus seres queridos, compañeros de club, amigos y allegados en general.

En ese contexto, con la entereza que lo distingue dentro y fuera de la cancha, Santiago Jelicic, dialogó con El Litoral.

* “No hay una explicación lógica para lo que pasó esta tarde, basándonos en la forma que jugamos; aunque en realidad debería decir en la manera que no jugamos. Fue un partido muy cerrado, a partir del planteo de Old Resian, que básicamente se focalizó en ensuciarnos la pelota. De ese modo, con la excelente presión que mantuvo durante todo el partido, nos cerró todos los circuitos de juego”.

* “Lógicamente, amén de las virtudes de nuestro rival, el problema principal fuimos nosotros, ya que cometimos demasiados errores: individuales y colectivos; en la ejecución de las acciones y, fundamentalmente, en la toma de decisiones. Quizás haya sido el planteo de nuestro rival, que al no esperarlo, nos sacó de lo que buscábamos y no pudimos jugar en todo el partido”.

Por último, el excelente pilar, erigido en una de las figuras de todo el torneo, se refirió a las pautas reglamentarias puestas a prueba a partir de este fin de semana en el país.

* “Los planteos para el control del scrum enrarecieron en cierto modo el juego, ya que somos un pack que tiene muy claro como afrontar esta formación y estamos acostumbrados a imponer condiciones. Creo que más allá de la lógica preocupación por los accidentes de los últimos tiempos, fue inoportuno poner a prueba situaciones reglamentarias nuevas en una instancia definitoria como esta. Estoy casi convencido que pueden otorgarle ventajas a un equipo inferior en este aspecto del juego”.