Alta capacidad ociosa

Estado de emergencia en pymes metalmecánicas y metalúrgicas

  • Es por la apertura de importaciones. Hay 400 pequeñas y medianas empresas afectadas.
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El diagnóstico para el sector es muy complicado. Se perderán miles de puestos de trabajo.

Foto: El Litoral/Archivo

 

De la redacción de El Litoral

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La Cámara de Industriales Fundidores de la República Argentina (Cifra) advirtió que las 400 pymes que integran el sector se encuentran en “estado de emergencia” debido a la apertura indiscriminada de las importaciones provenientes de China y por el aumento de costos y tarifas. La entidad empresaria señaló que el nivel de actividad del sector refleja una caída superior al 50% respecto de 2015.

En tanto, la capacidad ociosa de las pymes metalúrgicas ronda el 65%, lo que conforma un cuadro de situación que “torna imposible sostener los más de 8.000 empleos que generan en forma directa”.

Cifra advirtió que la apertura de importaciones de productos de fundición proveniente de China puso al sector en “riesgo de desaparecer” dado que las plantas están produciendo al 35% de su capacidad. Esta situación ha obligado a las pymes del sector a realizar suspensiones de personal, adelanto de vacaciones y despidos. Cifra manifestó que la caída de la actividad de la industria de fundición se ha acelerado “de manera vertiginosa” a partir del segundo semestre de este año y ha causado la pérdida de cerca del 10% de los empleos que tenía el sector a principios de 2016.

“Estas pequeñas y medianas industrias, desarrolladas a lo largo de décadas, con inversiones millonarias, modernas plantas con tecnología y equipamiento comparables con los del primer mundo y con muchos miles de trabajadores calificados, desaparecerán en el corto plazo, condenando al país a un nuevo proceso de desindustrialización como el sufrido en la década de los noventa”, apuntó el gerente general de Cifra, Guillermo Susini.

“Las empresas, todas ellas pyme construidas a base de inversión y mucho esfuerzo de empresarios comprometidos con el desarrollo de la industria nacional, están hoy con una capacidad ociosa cercana al 65%, abandonadas a su suerte y a un paso de la quiebra”, agregó el directivo.

La cámara señaló que frente a los países que tienen mayores indicadores de actividad de fundición, como Alemania, que promedia los 65 kilos de piezas fundidas por habitante por año, o Japón con 45 kilos, Argentina “apenas llega hoy a los 2 kilos de piezas fundidas por habitante por año”.

Los bajos indicadores del país son explicados por “el desmantelamiento del complejo industrial metalmecánico de mano de obra intensiva que implica el nuevo aluvión de importaciones chinas”, puntualizó Cifra.

Finalmente, a efectos de “poner en conocimiento del estado de emergencia de la industria de la fundición”, los representantes de Cifra solicitaron “con carácter de urgente” audiencias con el ministro de Producción, Francisco Cabrera, y el jefe de Gabinete de Ministros, Marcos Peña.

Cerró Brüning

  • Después de 109 años en el mercado, el molino harinero Brüning, instalado en San Jorge, departamento San Martín, al oeste de esta provincia, cesó sus actividades. Veintitrés familias quedarán sin sustento laboral aunque se aclaró que el denominado “sector fideero”continuaría desarrollando normalmente sus actividades el año próximo.

“Se veía venir. Era una muerte anunciada”, sostuvieron Renato Piantanida y Eduardo Ambor, de la Unión Obrera Molinera. Ambos dirigentes reconocieron que “desde 2008 veníamos con problemas. Lo que no podemos entender es que en el país hay 6 millones de toneladas de trigo sobrante y acá hay personas sin trabajo en un molino harinero”, resaltaron.

El empresario Sergio Taselli era el propietario de Brüning.

“Todos estamos complicados”

  • La presidente de la Cámara de Industriales Metalúrgicos y Autopartistas de Santa Fe (Camsfe), Ivana Taborda (Grupo Facorsa Radiadores), sostuvo ante una consulta de este diario, que “por costos, presión impositiva e importaciones, todas las pequeñas y medianas empresas enfrentamos complicaciones. Creo que algo debe hacer el gobierno para frenar rápidamente el flujo de importaciones”, insistió.

“En Santa Fe el panorama para las pymes de nuestro sector es bastante gris. Hay muchas empresas, de diferentes rubros, muy afectadas por este presente. En el sector autopartista el panorama se sigue complicando”, explicó.

Taborda aclaró, no obstante, que “se está haciendo todo lo que está al alcance de los empresarios para mantener las fuentes de trabajo”.