llegan cartas
Para el fútbol sí, para los maestros no
ROBERTO R. SÁNCHEZ DNI 8.634.022
Qué triste es escuchar que le darán a la AFA 350 millones y que, paralelamente, se discutan los sueldos de los maestros. Que me disculpen aquellos a los que les gusta el fútbol, pero privilegiarlo a cambio de las clases de los propios educandos es casi vergonzoso. Claro, vivimos en un País futbolero, por lo que la importancia social del mismo es extrema, a tal punto que no hay padre que no quiera un Messi o un Maradona en su familia. Ídolos que no representan más que marcas y retroalimentan sus fortunas con sus admiradores, con dirigentes corruptos y lavado de dinero que circula por el mundo, con pases, ventas y otras malas artes. El sello de la mediocridad de ese mundillo está en esos jugadores estrellas que, con el paso del tiempo, se les ha perdonado hasta que sean pedófilos. De hecho no espero que nadie esté de acuerdo, pero aclaré varias veces que no soy hipócrita, es porque la mayoría considera mucho más importante un mundial de Fútbol que uno de Matemática que hoy estamos a la cola de todo. El fútbol es a los gobiernos como el circo romano. A mi modesto entender, todos hablan de la educación pero a la mayoría le importa más bien poco. El nivel de conocimientos, de alumnos a profesores, es pésimo. Si el maestro debe de dar ejemplo a sus alumnos, lo ocurrido hace pocos días frente al Congreso fue lamentable.
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