Venezuela

La oposición volvió a protestar y fue reprimida por la policía y el ejército

De la Redacción de El Litoral

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Miles de ciudadanos volvieron este jueves a salir a las calles de Venezuela para manifestarse contra el gobierno central, que los reprimió al menos en Caracas y tres ciudades del interior, un día después de las grandes demostraciones opositoras y oficialistas que dejaron tres muertos, 62 heridos y cientos de detenidos, según datos oficiales.

Efectivos de la Policía Nacional Bolivariana (PNB) y la Guardia Nacional Bolivariana (GNB, policía militar) dispararon balas de goma y bombas de gas lacrimógeno contra manifestantes en varias zonas de Caracas y en San Cristóbal (capital del estado Táchira), Cumaná (capital de Sucre) y San Joaquín (ciudad del interior de Carabobo).

En Caracas, los manifestantes intentaron llegar a la autopista Francisco Fajardo desde la cercana plaza Brión, en el municipio Chacao, pero apenas se acercaron al cordón de uniformados les dispararon bombas de gas lacrimógeno.

Igual que en los últimos días, el objetivo de la marcha era llegar a la sede de la Defensoría del Pueblo para entregar un documento que acusa al gobierno del presidente Nicolás Maduro de haber violado el orden constitucional y reclama su restitución.

Pero el chavismo, como es usual, impide el ingreso de marchas de protesta a Libertador, el único de los cinco municipios que conforman Caracas que gobierna y en cuya jurisdicción están el centro histórico de la ciudad y las principales oficinas estatales.

La marcha estuvo encabezada por el gobernador del estado Miranda y ex candidato presidencial Henrique Capriles y por el presidente de la Asamblea Nacional (parlamento unicameral), Julio Borges.

Ambos pertenecen al partido Primero Justicia (PJ), que tradicionalmente se ubicaba entre los más moderados de la Mesa de la Unidad Democrática (MUD) que reúne a una veintena de partidos opositores.

Sin embargo, los últimos hechos -que incluyen fallos del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) contra la autonomía del parlamento y una inhabilitación para ejercer cargos públicos para Capriles- acercaron a PJ a la estrategia de protesta callejera propia de Voluntad Popular (VP), el partido del mucho más radical ex alcalde preso Leopoldo López.

“La resistencia pacífica se mantendrá en la calle hasta que Nicolás Maduro entienda que debe respetar la Constitución; el gobierno dio un autogolpe y debemos seguir ejerciendo nuestro derecho a protestar”, dijo Capriles.

“Tenemos que condenar la represión contra quienes piden elecciones; el año pasado nos quitaron el referendo revocatorio, suspendieron las elecciones de gobernadores y no se habla de las de alcaldes”, agregó.

“Nosotros somos los primeros interesados en ir a elecciones”, dijo el alcalde de Libertador y habitual jefe de campañas electorales del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) gobernante, Jorge Rodríguez.

En cambio, el único no chavista entre los cinco directores del Consejo Nacional Electoral (CNE), Luis Rondón (hijo), afirmó en un video divulgado en internet que “retardar el voto debilita la convivencia, abre las puertas a la violencia y agudiza la conflictividad en el país”, y subrayó que el organismo que integra “está obligado constitucionalmente a convocar elecciones”.

“Están preparando una matanza contra las Farc”

El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, denunció que se está preparando una “matanza” contra los líderes de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) y anunció que exhibirá las grabaciones, videos y “todos los secretos” sobre el proceso de paz en ese país.

El presidente anunció, además, que “sacará” todas las grabaciones y todos los secretos que acumuló durante diez años sobre el proceso de paz en Colombia “para que se sepa lo que se ha burlado”.

“Colombia es un estado fallido, 70 años de guerra, firmaron un acuerdo de paz gracias a Hugo Chávez y a mi”, añadió aludiendo al fallecido presidente venezolano entre 1999 y 2013.

Dijo que en Colombia “todo es privatizado” y “para la oligarquía” mientras que él recibe “plomo” y esta es la razón, señaló, por la que a Venezuela han llegado 5.600.000 colombianos.

El presidente colombiano, Juan Manuel Santos, dijo que la “revolución bolivariana fracasó” y que así se lo había advertido hace seis años al entonces presidente Hugo Chávez.