Gritos de dolor e impotencia

Familiares de víctimas de inseguridad llevaron sus reclamos a la Legislatura

Este jueves por la tarde, se realizó una manifestación. Los presentes expresaron su preocupación y exigieron drásticos cambios en las leyes.

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Las familias llevaron un “respetuoso” reclamo a los legisladores de todos los partidos políticos.

Foto: El Litoral

 

De la Redacción de El Litoral

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Un puñado de familiares de víctimas de la inseguridad se reunió este jueves por la tarde en el playón ubicado frente a la Legislatura provincial. Todos llegaron temprano para llevar “un mensaje contundente pero respetuoso a todas las expresiones políticas”. Estos condenados a “ausencias perpetuas” -porque perdieron un hijo, un padre o un hermano- esperan que las muertes de sus seres queridos sean el disparador de cambios importantes en las leyes y en el sistema carcelario. Buscan dar sentido, si puede tener alguno, a su dolor. Necesitan que los asesinatos de sus allegados dejen un legado a la sociedad.

“Queríamos hacer este acto frente a la fachada de la legislatura, porque entendemos que todas las fuerzas políticas de la provincia tienen que trabajar juntas en este sentido. Hoy, tenemos una legislación que muchos llaman ‘asesina' y no se equivocan. Los delincuentes pueden actuar sin problemas, aunque los detengan muchas veces, los abogados siempre encuentran la forma de hacerlos zafar. Y cuando finalmente caen tras las rejas se encuentran con la ‘puerta giratoria' y se los beneficia por ejemplo con las salidas transitorias y reducciones de pena. Entonces, estando presos, siguen delinquiendo”, se quejó Jorge Toffolini, quien hace tres años perdió a su hijo Esteban durante un asalto.

“Además, el sistema carcelario es vetusto, no sirve, porque no ayuda a casi ningún preso a reinsertarse. Todo lo contrario. Estos tipos entran a la prisión y cuando salen vuelven a matar. Vuelven a dejar sangre en las calles”, puntualizó.

Finalmente, Toffolini lamentó que fueron “desatendidos” por todos los integrantes del Poder Legislativo. “Nadie nos recibió. Ni siquiera me permitieron enchufar adentro un equipo de sonido que habíamos llevado para hablar a los presentes. Es triste, porque prácticamente nos ignoraron”, señaló.

“Reconocemos muchas cosas positivas que se lograron con la lucha de estas familias. Por ejemplo, el gobierno avanzó en el otorgamiento de recompensas por datos que ayuden a esclarecer casos y en la protección de testigos, pero todavía falta mucho por hacer”, concluyó Toffolini.

“Desatendidos”

Lo llamativo de la pequeña expresión pública fue que no tuvo eco entre los legisladores provinciales. Fueron “desatendidos”, según la expresión que utilizó Jorge Toffolini, padre de una víctima de inseguridad. “Nadie nos recibió. Ni siquiera me permitieron enchufar adentro un equipo de sonido que habíamos llevado para hablar a los presentes. Es triste, porque prácticamente nos ignoraron”, dijo.