llegan cartas

La delincuencia y el peligro que crecen

GEORGINA MORO

DNI 26.594.124

Señor ministro de Seguridad, Maximiliano Pullaro: me dirijo a usted con el respeto que merece, pero no el mismo que usted brinda. No tengo palabras para describir la situación que viví el 20/6, a las 12 del mediodía, con mi hijo de 2 años y mi madre, cuando dos seres indeseables -que no merecen estar caminando libremente- nos apuntaron para robarnos, propinando golpes al vehículo y toda clase de amenazas. Gracias a Dios no pudieron lograr romper el vidrio porque si no hoy la historia que le detallo estaría teñida con otros comentarios.

Desde que nací, hace 39 años, vivo junto a mi familia en el barrio Guadalupe Oeste y hasta hace 3 meses era un lugar tranquilo. De un tiempo a esta parte, sufrimos dos robos, un intento y amenazas, por parte de dos seres despreciables, que no dudo lograrán su cometido, si no aquí, en alguna otra parte. Sé que no soy la única que los sufre, pero por favor no mienta más diciendo que la delincuencia bajó en porcentajes irrisorios, porque mi vivencia y la de otros demuestra lo contrario.

Ojalá usted nunca tenga que pasar por un momento así, porque le juro que el miedo y la impotencia perduran para siempre.

Saludos y ojalá esté en sus manos cambiar el rumbo de esta ciudad.