Del acto participó el gobernador Lifschitz

Entregaron 200 escrituras de viviendas de distintos barrios de la ciudad

Muchos de los vecinos hacía treinta años o más que habían adquirido el inmueble. Con esta documentación, ahora podrán hacer uso legal del mismo, para sacar un crédito, por ejemplo, o usarlo como garantía.

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Beneficiario. El vecino Jorge Ábalos recibe la escritura de manos del gobernador Miguel Lifschitz. Completan la escena, el senador departamental Emilio Jatón y el ministro Pablo Farías.

Foto: Pablo Aguirre

 

Redacción de El Litoral

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Ayer fueron entregadas 200 escrituras a propietarios de viviendas de distintos barrios de Santa Fe, muchos de ellos dueños del inmueble desde hace por lo menos treinta años. La entrega se realizó en una carpa especialmente montada para la ocasión frente al centro de contención social El Alero, de barrio Coronel Dorrego, ubicado al noreste de la ciudad.

El acto fue encabezado por el gobernador Miguel Lifschitz, en compañía de los funcionarios provinciales Pablo Farías (ministro de Gobierno y Reforma del Estado) y Diego Leone (secretario de Estado del Hábitat), así como del senador departamental Emilio Jatón. Estas escrituras se suman a las 2.300 entregadas previamente por el gobierno provincial en todo el territorio santafesino, entre ellas los 84 títulos de propiedad distribuidos a vecinos del barrio El Pozo el 26 de junio pasado.

Durante el encuentro, Lifschitz firmó un nuevo convenio con el Colegio de Escribanos de la Provincia de Santa Fe, que estuvo representado por Guillermo Cabello y Mónica Barbier. Tal como se manifestó, la rúbrica responde “a la necesidad de seguir trabajando de forma más ágil en la escrituración de viviendas sociales”.

Desde que en julio del año pasado se rubricó el acuerdo inicial entre la Provincia y la mencionada entidad, ya se realizaron más de 500 escrituras y 55 reglamentos de propiedad horizontal, además de estar en trámite más de 700 nuevas carpetas de escrituración. Estas escrituras, que no tienen costo alguno para los beneficiarios, son solventadas por un fondo especial, creado en su momento por la ley Nº 11.102 (luego modificada y confirmada como Nº 13.570), reglamentación que garantiza los recursos necesarios para llevar adelante el programa de titularización.

Recuperar la dignidad

Primero se dirigieron al público Jatón y Leone, que se refirieron a la importancia que este hecho tiene para los propietarios de los inmuebles, al poder documentar su condición de dueños de un bien que ya les pertenece legítimamente (con lo que ello significa para poder realizar distintos trámites y gestiones).

Luego tomó la palabra Lifschitz, quien resaltó el significado de la entrega de estas escrituras y ponderó el número de las realizadas hasta la fecha, 2.500 con las distribuidas en El Alero. “Espero que durante el término de mi gestión de gobierno podamos entregar muchas más, porque necesitamos recuperar la dignidad de esas familias”, agregó el gobernador, que también se esforzó en destacar que detrás de cada vivienda hay toda una historia para recordar y valorar.

“En algún momento de sus vidas, hace muchos años, tuvieron la posibilidad de acceder a una vivienda, porque algún gobierno cumplió con aquel sueño, pero eso que parecía un punto de llegada terminó convirtiéndose en un nuevo problema, entre otras cosas porque las escrituras nunca llegaron”, explicó Lifschitz.

“Por lo general, esos barrios construidos por el Estado tuvieron, desde el arranque, muchos problemas; no se formaron los consorcios y nadie se hizo cargo de los espacios comunes, que se fueron deteriorando”, redondeó el concepto el gobernador, no sin antes señalar que la escrituración, como las mejoras barriales en Acería, El Pozo y Centenario, dan significado a la deuda que empieza a saldar el gobierno con estas familias.

2.500 escrituras

entregó el gobierno provincial para regularizar la situación de santafesinos que accedieron a planes de vivienda, pero que no contaban con el documento que constataba la propiedad del inmueble.

  • En algún momento de sus vidas, hace muchos años, tuvieron la posibilidad de acceder a una vivienda, porque algún gobierno cumplió con aquel sueño, pero eso que parecía un punto de llegada terminó convirtiéndose en un nuevo problema, entre otras cosas porque las escrituras nunca llegaron”.

Miguel Lifschitz

Gobernador de Santa Fe