Lectobus

La aventura de jugar con las palabras

Mili López

Conocer libros, descubrir historias, imaginar postales, soñar despiertos, escribir palabras, percibir texturas, saborear dibujos y oraciones y animarse a pensar en libros, son algunas de las acciones que genera “Lectobus, lectura en movimiento” un proyecto santafesino impulsado por la Fundación Lectobus y coordinado por la escritora y narradora oral Alicia Barberis.

Nació inspirado en la mítica Andariega de Javier Villafañe, y desde el comienzo su anhelo fue conseguir un colectivo para movilizarse por distintas localidades llevando libros y lecturas compartidas. “Mientras resolvemos la movilidad anhelada, podemos decir que el colectivo que pretendíamos se fue transformando en otro: un colectivo humano, construido con manos y voluntades, con esfuerzos y alegrías, que día a día busca propiciar un acercamiento gozoso a la lectura, a la comunicación oral, a la literatura”, destaca Barberis.

El principal objetivo es acercar a los niños a la lectura, a través de distintas estrategias basadas en el juego y el arte, para generar un vínculo afectivo y gozoso en torno al libro. “Consideramos que para que este proyecto trascienda lo efímero y se instale en la sociedad en forma permanente, se deben tejer redes que permitan que familias, escuelas, bibliotecas, instituciones, empresas asuman el compromiso de promocionar la lectura desde la más temprana infancia en forma conjunta”, reflexiona.

El juego que interpela

“Lo maravilloso es ver la sonrisa de los niños al sorprenderse cada vez que abren un libro”, cuenta Alicia y su rostro se ilumina. “Lectobus entiende la literatura como un bien cultural y la mediación de la lectura como un compromiso social. Coincidiendo con Laura Devetach, consideramos que para casi todos los chicos, la vida se va llenando de palabras, de historias o fragmentos de historias, de cosas dichas por los adultos, de cantos, juegos verbales, poesías populares, cuentos, que vienen de la mano de otros, acompañados del gesto, del afecto, de todos los sentidos”.

El acercamiento a la lectura nace desde mucho antes del contacto con la palabra escrita. Por eso, es “tan importante el juego y la oralidad, el rescate de cuentos y poesías populares, la narración de historias enmarcadas en encuentros afectivos y lúdicos con los chicos, como así también el trabajo de concientización con madres, padres y abuelos, para que no descuiden su rol de transmisores”.

El hacer colectivo

Desde 2012, se han puesto en marcha distintos programas y acciones para alcanzar los objetivos planteados. “Palabras bajo el Sol” son talleres estables a lo largo del año en barrios de la ciudad de Santa Fe: Villa del Parque, La Guardia y Las Flores; en tanto que “La ruta de los libros” son jornadas en escuelas, bibliotecas y centros culturales en localidades de toda la provincia.

“Cuentos en ronda” son jornadas intensivas de lecturas en museos de la ciudad de Santa Fe. A lo que se le añade “Sumando voces”, un programa que consiste en la realización de talleres y encuentros con artistas y mediadores, abiertos a la comunidad. En tal sentido, “La calle de los libros” son encuentros de lectura y arte en las calles de los barrios donde se llevan adelante los talleres.

Como extensión, “Mochilas de lectura” funciona a modo de biblioteca ambulante para que niños y adultos de cada barrio puedan seguir leyendo en sus casas, llevando libros en préstamo.

Yendo un poco más allá y pensando en la difusión del proceso de trabajo y de los logros, salieron a la luz “La revista de Lectobus”, en formato papel y digital; los micros radiales “Con aire de cuento”, sobre lectura y literatura infantil, y “Había una vez un libro”, un proyecto que supuso la publicación de un libro realizado por los asistentes a los talleres estables.

La cosecha

En este camino recorrido, además de las satisfacciones del trabajo cotidiano, los frutos también vienen de la mano de los reconocimientos. Este trabajo ha sido finalista entre más de 500 proyectos presentados de todo el país, en el Premio Viva Lectura 2014, organizado por Fundación Santillana y Ministerio de Educación de la Nación. También ha recibido el Premio Ingenia, otorgado por el Ministerio de Innovación y Cultura de Santa Fe los años 2015, 2016 y 2017.

En 2016, obtuvo el Primer Premio Cultura Imaginada por la Provincia de Santa Fe, otorgado por el Consejo Federal de Inversiones, en 2016. Beca de Formación artística otorgada por del Fondo Nacional de las Artes, 2017.

Y las cosechas continúan: en este julio de 2017 ha sido declarado de interés por el Honorable Concejo Municipal de Santa Fe. También fue seleccionado en la Convocatoria de Espacio Santafesino para realizar una formación artística en Bogotá, Colombia y un trabajo de campo en la biblioteca La Alegría, en la localidad de Tolú, Golfo de Morrosquillo.