Como en los viejos tiempos, pero con técnicas modernas

Techo Verde: venadenses impulsan creación de viviendas sustenTables

La asociación civil “Colectivo por la Tierra”, viene trabajando en un proyecto de capacitación social en autoconstrucción natural, basado en la edificación de viviendas ecológicas.

El proyecto busca hacer frente a uno de los mayores problemas que presenta la sociedad: la ausencia de viviendas. Pero que a su vez sean de buena calidad y a un bajo costo.

Foto: Transmedia VT

Pablo Rodríguez

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En la ciudad de Venado Tuerto, desde hace unos años la asociación civil “Colectivo por la Tierra”, viene trabajando en un proyecto de capacitación social en autoconstrucción natural, basado en la edificación de viviendas ecológicas. Esta alternativa saludable, pensada en el medio ambiente, busca hacer frente a uno de los mayores problemas que presenta nuestra sociedad, como es la ausencia de viviendas, que sean de buena calidad y a un bajo costo.

Verónica Brandoni, integrante de la asociación, comentó que una de las principales preocupaciones que los agrupó y motivó fue justamente el tema de la tierra y su protección. “Este es un espacio fiscal que empezamos a trabajar y al que fuimos ganando año a año, en primer lugar como huerta orgánica y luego en la bioconstrucción”, indicó.

Además, explicó que esta alternativa en la construcción de viviendas, surge para atender el problema habitacional, que atraviesa a mucha gente. “Cada vez éramos más familias y decidimos buscar una solución como prueba. Un poco para sentar precedente sobre cómo se podría solucionar el problema de una manera diferente, pensando en un trabajo cooperativo. Todos nos ayudamos y por eso generamos un espacio común, un salón de usos múltiples, con la idea de que sea una escuela libre, que ya tiene nombre y es “Pensamiento de caracol”. Viene a cerrar todo nuestro proyecto”, agregó Brandoni.

Trabajo

En este plan de trabajo que llevan adelante los integrantes de “Colectivo por la Tierra”, se centra en la idea de poder acceder a una vivienda con un costo mucho menor al que implica una vivienda tradicional, el uso de los materiales es otro, y conlleva una relación saludable y en comunión con la naturaleza. Implica también la incorporación de materiales reciclables, con el trabajo con la tierra y conocer el lugar donde se vive.

Por el momento son nueve las familias que forman parte de la asociación, sin embargo vienen cosechando un trabajo en grupo que comenzaron hace ya muchos años en otras agrupaciones y los nuclea en ésta: “Acá estamos hoy poniendo el cuerpo pero con mucho apoyo y actividades. Realizamos el festejo del Día del Niño recientemente y demás proyectos en los que nosotros llamamos a construir en conjunto, a poder aportar el espacio para que se generen algunas estrategias de ventas alternativas que tengan que ver con la autogestión”, agregó.

Por otra parte sostuvo que están “un poco cansados de este sistema, en vez de quedarnos sentados, esperar o criticar, decidimos poner el cuerpo a esta idea”.

En cuanto al trabajo propiamente de la bioconstrucción es pertinente aclarar que cualquiera lo puede realizar, mujeres, varones, inclusive los niños colaboran con la preparación de los materiales para, de poco, ir concretando esta idea.

La ingeniería aporta lo suyo

Pablo Costamagna es Ingeniero Civil, hoy dedicado a la bioconstrucción sustentable. Es otro de los integrantes de este proyecto que apela al uso racional de los materiales naturales: “En este terreno funcionaba un grupo que en su momento hizo huerta orgánica. Luego se decidió incursionar en la construcción natural. Por el 2013 empezamos con un taller, en conjunto con la UTN de Venado Tuerto, donde construimos el salón que tenemos ahora para uso común”, dijo.

Los beneficios de este tipo de construcción, sobre todo, con respecto a la tierra, la capacidad de absorber y liberar la humedad. La construcción con tierra implica esa absorción que actualmente en las construcciones tradicionales no se hace porque se impermeabiliza la pared.

Este uso está de la mano con la salud ya que las personas con problemas respiratorios se ven beneficiadas. Otra ventaja para destacar es la temperatura. Al ingresar a un lugar construido con estas características se puede apreciar que la temperatura, un día de calor, es menor y si es un día de baja temperatura, dentro de la casa el calor se mantiene. “En cuanto al tiempo que lleva la construcción en comparación con la tradicional, no es tanto, son muy parecidos. El oficio del albañil es casi el mismo. El revoque es igual al tradicional. Acá la gran diferencia es el costo que es mucho menor, es más bajo porque a los materiales los tenemos en el lugar, a la tierra la podemos conseguir. Esta construcción es económica y ecológica”, destacó Costamagna.