El mejor plan

El clima frena la incipiente recuperación ganadera y plantea el rediseño de los sistemas productivos, del manejo y de los seguros. Expectativas versus realidad de mercado.

Federico Aguer

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Para la zona norte de Santa Fe, el “boom” ganadero fue más bien una ilusión, que algunos intentaron fogonoear con más ilusiones que certezas. La semana pasada, en la jornada ganadera de San Cristóbal, un nutrido grupo de productores y técnicos se convocaron para escuchar a especialistas del IPCVA y del INTA que brindaron algunas claves para aumentar la eficiencia productiva.

Para algunos, revertir la maraña de regulaciones y el des control de la cadena es un trabajo que recién se inicia y que llevará tiempo. Para otros, reconquistar la meta del mercado externo es un complemento indispensable, aunque cumplimentar los protocolos y lograr la constancia en los envíos plantea desafíos de todo tipo (en la era de la posverdad, Argentina recauda más divisas de la pesca que de la exportación de carne vacuna). El prestigio mundial de nuestras carnes sigue intacto, aunque se sabe que la competencia es cada vez más despiadada y requiere de una estrategia de largo plazo para volver a jugar en primera.

Para todos, volver al novillo pesado implica avanzar varios casilleros en una sinergia público y privada que permita girar la actividad hacia una producción que integre mercado interno y exportación a través del replanteo de un sistema comercializador que privilegie la trazabilidad y la transparencia.

Pero detrás de las buenas intenciones, el mercado termina imponiendo su lógica. “El mejor plan es el precio” dispara Matías Sara (@Contalito) en Twitter. Y si el Estado no genera las condiciones para que esto deje de ser una suma de intenciones, debe acelerar los tiempos y las medidas.

Para San Cristóbal, como para todas las zonas de cría, el impacto del clima fue demoledor, y metió el freno de mano a la consolidación de la actividad, después de años de oscurantismo. Frente a un mercado que paga al ternero menos que el año pasado, y ante la escalada de precios de los insumos, la salida parece ir por el aumento de la eficiencia. Es lo que hay.