Crisis en la UE

Los países balcánicos rechazan centros de refugiados en su territorio

Algunos líderes europeos habían propuesto crear fuera de las fronteras de la bloque centros migratorios donde iba a aplicárseles el derecho de admisión.

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Un buque de la Guardia Costera italiana llega a Sicilia, Italia, con inmigrantes africanos.

Foto: DPA

 

Redacción El Litoral

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Varios países de los Balcanes han rechazado la idea de establecer centros de refugiados y migrantes en su territorio para evitar que lleguen a la Unión Europea (UE), sumida en una nueva disputa por esta cuestión.

“Nunca aceptaremos centros de refugiados de la UE”, advirtió el primer ministro de Albania, Edi Rama, en declaraciones publicadas hoy por el diario alemán “Bild”.

En las últimas semanas, algunos líderes de la UE propusieron crear fuera de las fronteras del bloque centros migratorios en los que se decidiría qué personas tienen derecho al asilo y cuáles son devueltas a sus países. Como posibles lugares para establecer esos centros se sugirieron países del norte de África o de los Balcanes, como Albania.

Rama aseguró hoy que su país no aceptará esos centros ni aunque en contrapartida se le ofrezca entrar en la UE. Precisamente este martes la UE dio luz verde al inicio de las negociaciones de adhesión de Albania y Macedonia. También desde Macedonia y Bosnia-Herzegovina se descartó establecer esos centros en su territorio. Macedonia puede seguir siendo un país de tránsito pero en ningún caso un lugar de estancia permanente para los refugiados, insistió el ministro de Interior, Oliver Spasovski.

Hasta el momento ningún otro país de los Balcanes se mostró dispuesto a albergar esos centros, ni tampoco Libia, desde donde parten la mayoría de los migrantes con destino a Italia.

En Albania, la oposición acusa al primer ministro de querer permitir la estancia permanente de 60.000 sirios, algo que Rama negó. En Bosnia-Herzegpvina, el líder serbio Milorad Dodik cree que la mayoría musulmana del país quiere acoger a 150.000 refugiados musulmanes para así aumentar su presencia y arrinconar a serbios y croatas.

En la gran crisis de refugiados de 2015 un millón de migrantes llegaron a Europa Occidental a través de la denominada “ruta de los Balcanes”, sobre todo a Alemania y Austria. Macedonia, Bulgaria y Hungría pusieron fin a esa ruta levantando vallas. Actualmente en Serbia hay 3.500 migrantes y desde principios de año llegaron a Bosnia unos 7.000 refugiados, la mayoría de los cuales cruzaron ilegalmente la frontera hacia Croacia, que forma parte de la UE.

Menos inmigrantes este año

Desde comienzos de 2018 han llegado a Europa muchos menos migrantes que en los años anteriores: entre principios de enero y mediados de junio unas 54.300 personas, en comparación con las casi 187.000 del pasado año y las 390.500 de 2016, según datos de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM).

Al igual que en años anteriores, la mayoría de las personas llegaron a Europa por el Mediterráneo. En 2018 lo hicieron así el 80 por ciento de los migrantes. Italia es el país europeo al que más personas arribaron -16.400 en total-, seguido de España y Grecia. En 2017 fueron siete veces más en el mismo periodo de tiempo, mientras que en 2016 incluso once veces más.

A España llegaron 13.600 personas por mar y 2.700 por tierra, mientras que en 2017 fueron 28.700 en total. En lo que va de año, el número de migrantes que entró en Grecia asciende a 13.000 por mar y 8.000 por tierra. Hasta mediados de junio de 2017 llegaron al país heleno un total de 35.000 personas, en 2016 habían sido 177.000.

El análisis de la OIM también señala que los barcos rumbo a España zarpan desde Marruecos y que los migrantes llegan a los enclaves africanos de Ceuta y Melilla así como a través de Portugal. Los migrantes que acceden a Italia vienen por vía marítima desde Libia y Túnez. La ruta de los Balcanes es utilizada sobre todo para aquellos que llegan desde Turquía. En esta ruta se contabilizaron hasta finales de mayo unos 9.000 refugiados y migrantes en Bulgaria, Macedonia, Bosnia-Herzegovina, Montenegro, Albania y Hungría.

El informe también recoge que hasta mediados de junio de este año se ha denunciado la desaparición o han sido rescatados los cadáveres de unas 1.000 personas, en comparación con los 3.100 casos registrados en el mismo periodo de 2017. No obstante, esta cifra podría ser mucho mayor según las organizaciones humanitarias, ya que no se conocen todos los naufragios.

En abril llegaron a Italia sobre todo tunecinos, seguidos de personas procedentes de Eritrea y Nigeria. A Grecia arribaron sobre todo sirios, iraquíes y afganos que se dirigen a Europa por la ruta de los Balcanes. Aquí también había paquistaníes, así como algunos argelinos e iraníes. A España llegaron sobre todo subsaharianos, aunque no se deatallaron los países de origen.

Malta recibe al “Lifeline”

El barco de rescate “Lifeline”, operado por una ONG alemana y varado desde el jueves en el Mediterráneo con más de 230 migrantes a bordo, podrá atracar en Malta, dijo hoy en una rueda de prensa el primer ministro del país, Joseph Muscat. El buque recibirá la autorización en las próximas horas y su llegada a Malta está prevista para esta noche, anunció Muscat. Además señaló que un total de ocho países de la Unión Europea (UE) habían aceptado acoger a algunos de los migrantes a bordo. Además de Malta, se trata de Francia, Italia, Irlanda, Luxemburgo, Portugal, Países Bajos y Bélgica, anunció. Muscat no mencionó a Alemania, cuyo ministro de Interior, Horst Seehofer, anunció hoy que su país sólo acogería a algunos refugiados si el “Lifeline” dejaba de operar. “Debemos evitar que siente un precedente”, dijo y añadió que los rescatistas debían ser llevados ante la justicia. El primer ministro maltés también confirmó que la tripulación del “Lifeline” será investigada y el barco incautado.