Ronda de exposiciones en el Senado

Arrancó el debate sobre el aborto

Las primeras presentaciones replicaron los argumentos vertidos en Diputados. Los legisladores que se oponen al proyecto votarían directamente el rechazo, en lugar de propiciar cambios.

 

Redacción de El Litoral

La Nación/Clarín/Parlamentario.com

El plenario de las comisiones de Salud, Justicia y Asuntos Penales, y Asuntos Constitucionales del Senado comenzó este martes con la ronda de exposiciones sobre la ley de interrupción voluntaria del embarazo, que tiene media sanción y se votará en la Cámara Alta el próximo 8 de agosto. En una jornada sin sobresaltos y con poca concurrencia legislativa, se desplegaron las primeras argumentaciones a favor y en contra.

En tanto, la estrategia de los senadores que se oponen al aborto legal mutó en los últimos días. Ante el riesgo casi inevitable de una derrota en la Cámara de Diputados en caso de introducir cambios al proyecto, los legisladores que más se resisten a la ley y que en un principio estudiaron una redacción alternativa ahora trabajan para lograr el rechazo total.

La vicepresidente Gabriela Michetti, el presidente provisional del Senado, Federico Pinedo, el bonaerense Esteban Bullrich y la tucumana Silvia Elías de Pérez -los cuatro líderes del “no”- habían evaluado una redacción que flexibilizara el rechazo y habilitara, al menos, la despenalización. Buscaban además mantener el capítulo dedicado a las políticas de salud sexual y reproductiva y educación sexual integral.

Sin embargo, mientras avanzan las negociaciones, una senadora antiabortista confesó al sitio web parlamentario.com que ahora trabajarán por el rechazo total por temor a que el resultado final sea adverso. “Si le hacemos cambios (al proyecto), eso implicaría su regreso a Diputados, donde ya tienen los votos para ratificar la redacción original”, razonó.

Los senadores de los pañuelos celestes creen además que, para despenalizar a la mujer que aborta, “se puede esperar al nuevo Código Penal, que va a entrar este año” al Congreso.

Haciendo cuentas

Lo cierto es que el rechazo al aborto legal se impone por escasa diferencia. En ese bando se alistan 31 senadores, mientras que hay 27 votos asegurados por el “sí”, y 14 indefinidos en los que recaerá la tarea de inclinar la balanza, según un sondeo de parlamentario.com.

Dentro del bloque justicialista, el tucumano José Alperovich y el santafesino Omar Perotti no se pronunciaron; los catamarqueños Inés Blas y Dalmacio Mera se admiten realmente indecisos; el cordobés Carlos Caserio propone cambios; y el salteño Rodolfo Urtubey se manifestó sólo a favor de la despenalización.

Los otros indefinidos son los radicales Eduardo Costa, María Belén Tapia, Juan Carlos Marino y Ángel Rozas; los macristas Laura Rodríguez Machado y Ernesto Martínez -sugieren modificaciones-; y los peronistas Juan Carlos Romero y Carlos Reutemann.

Si el proyecto se aprueba con cambios, la Cámara Baja podría ratificar la redacción original con mayoría simple, es decir, la mitad más uno de los votos. No sería complicado, pues en la votación el proyecto recibió nada menos que 129 votos afirmativos -mayoría absoluta-, habiendo asistencia perfecta.

Distinta es la situación si el Senado aprueba cambios con una mayoría de dos tercios -48 votos. En ese caso, en Diputados sí se requerirá idéntica mayoría agravada -en ese caso, 172- para insistir, aunque en un escenario parejo como el de hoy, es casi imposible que en la Cámara Alta se alcance ese número.

A favor de Nahir

Con pancartas y máscaras, unas 30 jóvenes protestaron contra el fallo que condenó a cadena perpetua a Nahir Galarza por el crimen de su novio Fernando Pastorizzo. Fue este martes pasada las 19, frente a la Casa de la Provincia de Entre Ríos, en Capital Federal.

La manifestación en favor de la joven de 19 años había sido convocada por una agrupación feminista, mediante un texto que contenía críticas a la “violencia heteropatriarcal” y al “heterocapitalismo”, y que reclamaba su “inmediata absolución y liberación”.

“Creemos que quieren arruinarle la vida a una joven de 19 años para generar un chivo expiatorio que cumpla la función de ocultar el inmenso daño que genera el amor romántico y la pareja heterosexual, sobre todo a las mujeres y corporalidades disidentes”, sostuvieron las agrupaciones convocantes.

No habrá veto

El jefe de Gabinete, Marcos Peña , reiteró que, más allá de los reclamos, el presidente Mauricio Macri “no vetará” la ley si es aprobada por la Cámara Alta en la sesión prevista para el 8 del próximo mes.

“El presidente ha sido claro en su convicción de la importancia de dar el debate. Esto implica respetar el resultado del acuerdo y, por supuesto, no vetar la ley”, dijo el jefe de Gabinete, al término de la reunión de ministros que Macri encabezó este martes en la Casa Rosada.

La respuesta de Peña surgió tras el tedéum del arzobispo de La Plata, Víctor Fernández, quien desafió a Macri a vetar la norma en caso de que se convierta en ley. “Que la vete si tiene una profunda convicción sobre el tema”, dijo Fernández en el oficio religioso del 9 de Julio, al que asistió la gobernadora María Eugenia Vidal.

“Es una muy buena relación institucional, como lo es con los demás cultos. Hemos sido siempre respetuosos de su palabra, de las cuestiones que cada uno aporta”, dijo el jefe de Gabinete.

La decisión presidencial de habilitar el debate es cuestionada por la Iglesia, como lo hicieron saber Fernández en La Plata y el arzobispo de Tucumán, monseñor Carlos Sánchez, en el tedéum celebrado en la capital de su provincia, y a la que no asistió Macri (estuvo la vicepresidente, Gabriela Michetti).

Sin cortar puentes con la Iglesia, el gobierno intenta, a la vez, suturar las heridas que dejó -en Cambiemos y, sobre todo, en el bloque macrista- el debate sobre la despenalización en la Cámara Baja, que incluyó por lo bajo críticas a la propia conducción.