Llevaba 52,6 kilos de cocaína

Condenan a narco que chocó un alambrado intentando escapar

Eludió un control de Gendarmería en la Ruta 34, a la altura de Rafaela, hace casi dos años. Hubo un persecución que terminó dentro de la ciudad, cuando el evadido llegó a un callejón sin salida y se llevó por delante un alambrado. Intentó seguir su huida de a pie, pero lo atraparon.

23-A-WHATSAPP IMAGE 2016-12-12 AT 13.jpg

El Tribunal Oral Federal de Santa Fe impuso 6 años y medio de prisión por “transporte de estupefacientes” a un mecánico salteño de 57 años.

Foto: Archivo El Litoral

 

Redacción de El Litoral

[email protected]

Un mecánico salteño de 57 años que se encontraba radicado en Buenos Aires fue condenado a 6 años y medio de prisión, acusado por el transporte de 52,6 kilos de cocaína en su auto particular, el 12 de diciembre de 2016, cuando fue detenido por Gendarmería Nacional. Desde entonces Julio César Soler permanece alojado en la cárcel de Coronda, a disposición de la Justicia Federal.

Este martes, el Tribunal Oral Federal de Santa Fe, presidido por el Dr. Luciano H. Lauría, junto con los vocales María Ivón Vella y José María Escobar Cello, dio a conocer los fundamentos del fallo, tras un juicio oral y público celebrado el pasado 8 de noviembre en los estrados locales.

Además de la pena privativa de la libertad, Soler deberá cubrir una multa de 70 unidades fijas, por un valor de $ 210.000; y se ordenó el decomiso del automóvil marca Fiat, modelo Grand Siena (OYI-052) propiedad del imputado; así como la destrucción del material estupefaciente que arrojó un peso de 52,634 kilos.

Durante el juicio, en el que declararon media docena de gendarmes, algunos vecinos del barrio Amancay de Rafaela y testigos civiles, el fiscal Martín Suárez Faisal solicitó que se imponga a Soler la pena de 9 años de cárcel y $ 300.000 de multa. En tanto el abogado Alejandro Sánchez Kalbermatten reclamó la absolución de su defendido por aplicación del “principio in dubio pro reo” (beneficio de la duda), y en forma subsidiaria el cambio de calificación legal por la de “tenencia simple de estupefacientes”; además de nulidades que fueron desestimadas por el tribunal.

Encrucijada

Soler fue apresado la noche del 11 de diciembre de 2016 cuando intentó sortear sin éxito un control de tránsito que realizaba el personal del Escuadrón Seguridad Vial Rafaela de Gendarmería Nacional, sobre la RutaNacional Nº 34, altura del km 219 de la zona urbana. Aunque no se pudo precisar el horario, el hecho ocurrió alrededor de las diez, cuando los gendarmes intentaron chequear un Fiat Grand Siena que se dirigía hacia el sur.

Uno de los uniformados solicitó la documentación del vehículo y le pidió al conductor que bajara el vidrio para ver dentro del habitáculo. Desde afuera, se advertía que detrás de los asientos delanteros llevaba grandes bolsas de nylon que llamaron la atención de los efectivos, que por ese motivo le ordenaron estacionarse en la banquina.

Entonces el conductor bajó las luces del coche simulando estacionar. Pero en un descuido de los efectivos apretó a fondo el acelerador y escapó. A gran velocidad pudo sacar ventaja a sus perseguidores, que al parecer nunca lo perdieron de vista. Para despistarlos se metió a la ciudad y tomó la avenida Podio, a la altura del barrio Amancay, donde en medio de la oscuridad fue a dar con una encrucijada, y terminó estampado contra el alambrado, al borde de un descampado. Soler intentó seguir a pie, pero fue rápidamente reducido. En el vehículo se secuestraron 50 “panes” o “ladrillos” de cocaína.

Soler -que es oriundo de Metán, provincia de Salta, pero estaba radicado en Buenos Aires, donde trabajaba en un talle mecánico- fue puesto a disposición del Juzgado Federal de Rafaela, donde resultó procesado como presunto autor de los delitos de “transporte de estupefacientes” y “resistencia a la autoridad”. El 15 de mayo de 2017, la Cámara Federal de Apelaciones de Rosario confirmó parcialmente el procesamiento, sobreseyéndolo en relación a la resistencia a la autoridad. Finalmente el 26 de mayo de 2017 el fiscal federal requirió la elevación a juicio, únicamente por el delito de transporte.