Si hubieran ido juntos ¿pasaban las Paso?

La unidad le llegó tarde a la izquierda santafesina

Por primera vez, los partidos clasistas de más peso coinciden en un frente que les permite sumar. El acuerdo nacional, visto desde la provincia.

Luis Rodrigo

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El debate de los tres candidatos a gobernador del sábado 8 -entre Antonio Bonfatti, Omar Perotti y José Corral- pudo tener un cuarto participante. Por muy poco, apenas unos tres mil votos, Octavio Crivaro del Frente de Izquierda de los Trabajadores (FIT) no logró superar el 1,5% de los votos exigidos por la legislación electoral para las Primarias Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (Paso). Y lo mismo le ocurrió -con menos sufragios en su favor- a Jimena Sosa del MST-Nueva Izquierda, que tampoco alcanzó el mínimo de cruces en la boleta única exigido por las normas electorales.

La ausencia de opiniones de la izquierda clasista fue evidente en el debate televisado de los competidores a gobernador. Y obviamente, tampoco esa forma de ver la realidad aparece en la campaña electoral que termina en la provincia.

Una cuenta contrafáctica

Por estos días, los partidos nacionales a los que pertenecen Crivaro y Jimena Sosa han anunciado -junto a otras expresiones de la izquierda- la formación de un nuevo frente que, en Santa Fe, les hubiera permitido sumar sus votos.

En una lectura contrafáctica -aquella que se permite pensar qué hubiera pasado si antes las cosas hubieran sido distintas- puede suponerse que hoy habría un candidato a gobernador de izquierda.

Crivaro logró 37.165 votos, el 1,39%, frente al 1,5% que exige la ley. Sosa, 25.926, el 0.97%. Son 63.091 marcas que dejaban a la izquierda dentro del juego electoral. En la izquierda importa la discusión política, más allá de sus chances reales para competir. En la próxima elección de diputados nacionales por Santa Fe se verá.

Por otra parte, en la boleta de precandidatos a diputados provinciales, con 0,92% del FIT y 0,53% de Nueva Izquierda hubieran faltado unas poquitas marcas para llegar al 1,5%. En rigor, para esa Cámara hubo otras opciones que si no son consideradas de izquierda, bien pueden ser vistas como de centro-izquierda: Rubén Giustiniani de Unidad y Participación, con 65.593 votos y Carlos del Frade, del Frente Social y Popular, que logró 63.760. Ambos superaron con comodidad lo que exige la ley.

Sin dudas, en una elección reñida como la que se espera para el domingo en la carrera a la Casa Gris, no pocos asesores de los candidatos con más chances miran con interés esas decenas de miles de votos.

Todos de rojo

A nivel nacional, los dirigentes del Partido Obrero (PO) y del Partido de los Trabajadores Socialistas (PTS), que ya formaron años atrás el FIT (Frente de Izquierda y de los Trabajadores), junto a sus pares de Izquierda Socialista (IS) y del Movimiento Socialista de los Trabajadores (MST) han anunciado que unirán fuerzas en el Frente de Izquierda Unidad, con sigla a definir.

Se trata de un intento por darle mayor relevancia electoral a la izquierda clasista, al contener a dirigentes que -hasta aquí- competían entre sí.

Nombres conocidos no faltan: Nicolás Del Caño (PTS) es el candidato a presidente y Romina del Plá (PO) a vice. Myriam Bregman, actual legisladora del PTS/FIT y Gabriel Solano (PO) serán los candidatos a diputada nacional y a legislador, por la Ciudad de Buenos Aires, mientras en esa provincia, Néstor Pitrola (PO) y Christian Castillo (PTS) encabezarán las listas a diputados provinciales y gobernador respectivamente.

En esos distritos y en todo el país, también ocuparan candidaturas el MST(cuyos principales referentes son Vilma Ripoll y Alejandro Bodart).

Zamora, no

Autodeterminación y libertad, el partido del ex diputado nacional Luis Zamora -que sólo tiene presencia en Buenos Aires-, no participa del Frente de Izquierda Unidad. Lo mismo el Nuevo Mas, de Manuela Castañeira, que se escindió de aquella fuerza.