En barrio Don Bosco
Comerciante acribillado a tiros
La víctima es un hombre de 37 años. Recibió al menos 5 impactos de bala. Está fuera de peligro.
El hombre fue sorprendido por un sicario cuando manejaba una utilitaria Peugeot Partner.
Foto: Flavio Raina
Danilo Chiapello
Un comerciante local fue blanco de un feroz ataque a tiros por parte de dos sicarios que se dieron a la fuga, en un grave suceso ocurrido durante la mañana del viernes en barrio Don Bosco.
La secuencia se inició minutos antes de las 8 cuando Jorge Daniel Mazza, de 37 años, (empresario vinculado a una céntrica vinoteca de la ciudad), salía a bordo de una Peugeot Partner, en J. P. López al 3300, entre Saavedra y Pasaje Marsengo.
Fue en dicha circunstancia que aparecieron en escena dos sujetos a bordo de una motocicleta. Quien venía sentado como acompañante descendió raudamente y, sin más, abrió fuego repetidas veces.
Varios de los disparos ingresaron por la ventanilla del lado del conductor y otros por la del lado del acompañante.
Rostros ocultos
Cometida la criminal acción sus autores escaparon a toda velocidad. En cuanto a las características físicas de los agresores es muy poco lo que pudo saberse ya que sus rostros estaban ocultos con cascos motociclistas.
No obstante otros detalles sí pudieron conocerse (el tipo de moto y la vestimenta que llevaban los sicarios) ya que en la zona hay una cámara de seguridad.
Minutos después del atentado, Mazza ingresaba al hospital Cullen en condición delicada.
El comerciante presentaba al menos 5 impactos de bala. “Tres en antebrazo izquierdo; otro en brazo derecho (con bala alojada a la altura del homóplato) y otro impacto en la cabeza (con orificio de entrada y salida), sin que haya perforado el cráneo.
“Si bien por el momento el paciente no presenta riesgo de vida, seguirá internado en Neurocirugía, para valorar el impacto de la herida que sufrió en su cabeza”, explicó el vicedirector del hospital Cullen, doctor Hernán Malatini.
Estaba amenazado
Los pormenores de este preocupante suceso son materia de trabajo para los agentes de la PDI a cargo del caso.
En un primer momento se habló de un intento de robo (versión que supuestamente formuló la propia víctima).
Sin embargo otra versiones dan cuenta que el comerciante atacado ya habría sido objeto de amenazas, motivo por el cual los investigadores apuntarían a un hecho de otras características.
Por su parte El Litoral se comunicó con un vocero de la vinoteca donde trabaja el agredido, aunque éste brindó una confusa declaración.
En principio dijo que Mazza se encuentra fuera de peligro. Y en una segunda comunicación aseguró que “esa persona no tiene ninguna vinculación con nosotros”.
Los investigadores secuestraron varios casquillos de bala que quedaron tirados en la calle.
Foto: Flavio Raina
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