Sínodo religioso

Denuncian la criminalización de los movimientos sociales en la Amazonía

Además criticaron “los modelos extractivos depredadores”. El encuentro fue organizado por el Papa Francisco.

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La defosteración de la Amazonía provocó además la muerte de 1119 líderes indígenas por defender su territorio.

Foto: El Litoral

 

Redacción El Litoral

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Telam

Asistentes al Sínodo de la Amazonia convocado por el papa Francisco denunciaron hoy “los modelos extractivos depredadores” y lamentaron ‘el drama de la criminalización de los movimientos sociales‘ en esa región.

Durante la segunda jornada de intervenciones en el Vaticano, uno de los temas fue “la defensa de los derechos humanos y el drama de la criminalización de líderes, comunidades y movimientos sociales”, según el resumen difundido a la prensa por el presidente de la comisión de Información, Paolo Ruffini.

Los participantes del sínodo, que se desarrolla desde el lunes hasta el 27 de octubre próximo, consideraron que es “aterrador” que en la Amazonia haya habido “1119 indígenas muertos para defender sus territorios” entre 2003 y 2017.

“No solo eso: a menudo, los líderes sociales son víctimas de impunidad y poderes estatales insuficientes que no garantizan su seguridad”, denunciaron ante Francisco en el Aula de sesiones.

En esta perspectiva, reiteraron que la Iglesia “debe defender a quienes luchan para proteger sus tierras creando, donde aún no existen, redes de protección específicas o activando, a nivel diocesano, acciones permanentes de solidaridad y promoción de la justicia social”.

Además, “se habló de la contaminación de los ríos, en los que a menudo se derraman desechos. de las actividades mineras y la deforestación, una amenaza cada vez más concreta en la Amazonia, debido a la venta masiva de madera o cultivo de coca”.

Las intervenciones de este martes apuntaron también a una depredación “favorecida por la legislación ambiental débil que no protege las riquezas y bellezas naturales del territorio”.

Por ello “instaron a la Iglesia a denunciar las distorsiones de los modelos extractivos depredadores, ilegales y violentos, y apoyar las regulaciones internacionales que protegen los derechos humanos, sociales y ambientales, porque el grito de dolor de la tierra saqueada es la misma que la de los pueblos que la habitan”.

Luego de que en la sesión vespertina del lunes resaltaran la figura de la activista adolescente sueca Greta Thunberg, los participantes destacaron hoy “la importancia de promover una política participativa y una economía lejos de la cultura del descarte”.

Así, se expresaron a favor de promover “experiencias de economía alternativa, como la de las pequeñas cooperativas que comercian productos directamente de bosques, sin pasar por una gran producción”.

Identifican restos de desaparecido uruguayo

El cuerpo hallado el pasado 28 de agosto en un batallón del Ejército uruguayo pertenece al militante comunista Eduardo Bleier, un detenido desaparecido durante la dictadura cívico-militar (1973-1985), confirmaron este lunes familiares de desaparecidos.

En el inmenso sitio militar donde se halló a Bleier se trabaja desde 2005 con excavaciones y ya se había encontrado tiempo atrás el cuerpo del también militante comunista Fernando Miranda.

Bleier nació en 1927 y fue detenido por el gobierno dictatorial en 1975, a los 47 años. Además de dirigente comunista e integrante del Comité Central de este partido, se sabe que era odontólogo, estaba casado y tenía cuatro hijos.

Una vez detenido, Bleier -cuyo alias era “Enrique”- fue derivado al centro de detención 300 Carlos R y luego al 300 Carlos, también conocido como “Infierno Grande”.

Según el informe de la Comisión para la Paz de 2003, Bleier murió entre el 1 y el 5 de julio de 1976, a causa de las torturas recibidas en dicho centro de detención.

En otros lugares de las Fuerzas Armadas se encontraron restos del militante de izquierda Ubagesner Chaves Sosa (2006); en octubre de 2011 los del maestro y periodista Julio Castro y en marzo de 2012 el sindicalista Ricardo Blanco.

Según las estimaciones, hoy habría cerca de 200 personas -entre hombres, mujeres y niños- desaparecidas tras la dictadura.