Gustavo Asegurado, presidente del Banco Municipal de Rosario

“Los depósitos judiciales significaron un apuntalamiento muy relevante”

El funcionario, con mandato hasta mayo, ensayó una férrea defensa de la decisión del gobierno provincial de prorrogar nuevamente la gestión de los fondos generados en los Tribunales rosarinos. Para junio representaban unos 2.800 millones de pesos.

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ASEGURADO. Los fondos provenientes de los depósitos judiciales, si bien no significaron la “supervivencia” del banco, fueron importantísimos para la entidad, “que no quepan dudas. Es innegable que significó para el banco un apuntalamiento muy relevante”, reconoció el directivo a este medio.

Foto: Archivo

 

Juan Chiummiento

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El presidente del Banco Municipal de Rosario (BMR), Gustavo Asegurado, defendió enfáticamente la decisión del Ejecutivo provincial de prorrogar el convenio que le permite a la entidad financiera seguir gestionando los depósitos judiciales de los Tribunales ordinarios de la ciudad más poblada de la bota. Se trata de jugosos fondos que al 30 de junio pasado representaban unos 2.800 millones de pesos, un 30% del volumen total que opera el ente propiedad del municipio rosarino.

“La decisión original claramente tuvo su génesis en la ciudad, con algún apoyo del Concejo y del Colegio de Abogados. Sin embargo, ahora hay una opinión favorable del gobierno provincial a través de sus órganos de control y de las cinco entidades que tienen que ver con el foro local, que le dieron un cuerpo diferente”, manifestó Asegurado en diálogo con El Litoral, en el marco de una entrevista realizada en su despacho, en el segundo piso de la sucursal central de la entidad, sobre la peatonal San Martín de Rosario.

Vale recordar que en 2009 el gobierno provincial licitó el servicio de agente financiero con un pliego en donde, por primera vez, se excluyó del régimen de caja obligada a los fondos provenientes de los depósitos judiciales de los Tribunales ordinarios de Rosario, autorizando al Ministerio de Economía a firmar un acuerdo con el BMR, que fue prorrogado en 2014 y nuevamente extendido en octubre último, a través del decreto 3.069.

Una década atrás, los fondos judiciales representaron nada menos que una inyección de capital equivalente al 45% del fondeo total del banco. Ese porcentaje fue descendiendo paulatinamente hasta el actual 30%, robusteciéndose mayormente la parte privada.

—¿Cómo evalúa la decisión de prorrogar el convenio para gestionar los depósitos judiciales? Siempre que se toman este tipo de resoluciones hay voces en contra y a favor...

—En la decisión original, claramente tuvo génesis en la ciudad de Rosario, en lo que fue una resolución política clara de apartarse de lo que venía siendo. En aquel momento se generó alguna polémica. Sin embargo ahora, hay una opinión favorable del gobierno, con sus órganos de control -que siempre dieron un dictamen favorable- y se sumaron notas de las cinco entidades que tienen que ver con el foro local, que le dieron un cuerpo diferente. Aquella decisión que cambió el eje, hoy todo el mundo aprueba que vayamos por acá. Porque la historia es la siguiente: cuando el agente financiero que manejaba los depósitos judiciales dejó de ser público, ¿por qué los fondos públicos los tiene que administrar un señor que está haciendo negocios con la provincia y no en Rosario que tenemos un banco público?

—¿Cuánto representan los depósitos judiciales?

—En promedio, porque va dependiendo de los distintos períodos, es un 30% del total de los depósitos. Cuando empezó a funcionar significaron el 45% y eso fue bajando paulatinamente con el robustecimiento de la parte privada.

—Hay algunos que afirman que la inyección de dinero que significaron los depósitos judiciales permitió la supervivencia del banco. Que de otra manera no hubiera podido continuar...

—Supervivencia no. Fue importantísimo para el banco, que no quepan dudas. Es innegable que significó para el banco un apuntalamiento muy relevante. La intermediación financiera es el corazón de los bancos y los depósitos judiciales, por el carácter estable que poseen, fueron y son muy importantes.

—Una de las críticas pasa por el hecho de que el banco recibe fondos que son provinciales, pero aplica políticas que no son estrictamente provinciales. ¿Qué planes tiene el banco en cuanto a su provincialización?

—Nosotros tenemos sucursales fuera de la ciudad, en San Lorenzo y Santa Fe. Hoy no forma parte de nuestro plan estratégico para el mediano plazo crecer fuera de la ciudad, en ese sentido, con sucursales físicas. Ahora, nosotros prestamos servicios afuera, tenemos muchos clientes fuera de la ciudad. Hemos llevado adelante líneas promocionales con el gobierno de Santa Fe, con alcance en toda la provincia.

—¿A qué tipo de políticas se refiere?

—Atendemos tarjeta de ciudadanía de toda la provincia de Santa Fe. Menos del 40% es de Rosario y el resto en todo el territorio. Estamos hablando en este caso de un flujo de 57 millones de pesos. También tenemos convenios con entidades, mutuales y agencias de cobro de todo el territorio santafesino, para que sean colocadores de créditos personales nuestros. La línea verde por ejemplo, que la colocamos con absoluta igualdad en toda la provincia.

—Respecto de los créditos para empresas, ¿hay alguna preferencia para aquellas que son de Rosario?

—Las que nosotros atendemos, si bien hay componentes de Rosario, las que operan en esta última ciudad son empresas regionales. Las del agro producen y tienen sus plantas fuera de la ciudad. Las empresas, cualquier industria, trabajan regionalmente. Tienen una parte de sus operaciones en Rosario, pero no circunscriben su actividad localmente.

Saldos positivos

El último informe presentado por el Banco Municipal de Rosario (BMR) detalla que hasta agosto, la entidad tuvo una ganancia (después de pagar impuestos) de 400 millones de pesos, un 79% más que el año pasado. Esa fuerte mejora del resultado económico, obtenida en lo que va del año, adquiere aún más relevancia porque se compara con el resultado de 2018, cuando las ganancias del banco habían subido 66% contra 2017.

Según el balance público que consta en su web, al 30 de junio tenía una cartera de préstamos por 4.260 millones de pesos, de los cuales el 95% estaba destinado al sector privado y un 5% al sector público. Un 41,5% de los mismos se enmarca dentro de la cartera comercial (empresas) y el restante en la cartera de consumo (individuos).