Firme postura de “Triunfo Tatengue”

“No vamos a aprobar el Balance que quiere Spahn”

Se trata de la primera minoría que “debutó” electoralmente con 820 votos de socios tatengues. “No queremos ser cómplices ni responsables; somos coherentes”, afirma Leonardo Simonutti.

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Nada de abstenerse. Para Leonardo Simonutti, ex candidato a vicepresidente y hoy vocero del grupo que comanda Rodrigo Villarreal, “abstenerse es avalar y dar como cierto”. Por lo tanto deja en claro que concurrirán a la asamblea del 7 de enero para votar “en contra” de los números que presentará la Comisión Directiva por el apuro de la Superliga.

Foto: Flavio Raina

 

Redacción de El Litoral

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Fue uno de los vicepresidentes de la lista “Triunfo Tatengue” que, con Rodrigo Villarreal a la cabeza, se convirtió en la primera minoría —con 820 votos debutantes— de la actual gestión de Luis Spahn. Sin dudas, se los puede definir como el “núcleo duro” de la oposición al actual gobierno que conduce los destinos del Club Atlético Unión. Se trata de Leonardo Simonutti quien, en diálogo con El Litoral, deja en claro la postura de la agrupación de cara a la Asamblea de Socios del 7 de enero: “No le vamos a aprobar el Balance al presidente Spahn”

Luego, el mismo Simonutti agregó: “Si hay multas, como las que ya recibió el club por 400.000 pesos, que se hagan cargo y sean responsables. Si hay otras sanciones de Superliga, lo mismo: nosotros no estamos gobernando a Unión; nosotros, con el mandato de muchos socios, los estamos controlando. Para eso nos votaron”.

Luego, arrancó con el relato de su visión personal: “Llegamos a una fecha dudosa de asamblea, un 7 de enero, cuando mucha gente no está. Y la que está, tiene la cabeza en otra cosa. Muy raro todo. Lo que el socio debe entender es que si no presentamos la Memoria y el Balance como corresponde es porque esta gestión hizo las cosas de manera desprolija. Son ellos responsables de llevar a enero del año que viene lo que se debió hacer en tiempo y forma. Es válido el argumento que no estaban todos los papeles, lo que se les olvida decir es que a los papeles los tiene un Juzgado, se los llevó la Justicia, no es que se volaron con el viento. ¿De quién es la responsabilidad que pase eso con la documentación de un club?”.

Luego, apuntó directamente al modo de manejarse de Luis Spahn y sus interlocutores: “Fuimos convocados a una primera reunión, de parte del señor presidente, porque quería hacer una amplia apertura política con todos los sectores para buscarle una salida a los problemas de Unión.

Recibimos la invitación de una persona de su confianza y decidimos concurrir para hablar, más allá de las diferencias. Resulta que fuimos a Unión a una reunión donde cita el presidente y, de manera increíble, el presidente Luis Spahn ni apareció. Nos recibió una contadora y el tesorero con un montón de planillas, números e interpretaciones. Así se manejan”.

La historia siguió con una “nueva invitación”, de la misma manera: “Y ahí decidimos no ir, es una falta de respeto al tiempo de cada persona. Es como que te invite a casa a comer y cuando vamos... no hay nadie”.

El voto negativo

De cara a lo que será la asamblea de socios del 7 de enero, donde Unión está con un plazo final para el 26 del mismo mes para presentar el presupuesto cerrado a junio de este año aprobado con su respectiva Memoria, Leonardo Simonutti fue muy claro: “Vamos a ir a la asamblea con el mandato de los 820 socios a votar en contra. No le vamos a aprobar el Balance a Spahn, somos coherentes. No queremos ser cómplices en la historia de este club que es el más importante de la ciudad de Santa Fe”.

En cuanto a la metodología de la votación fue más allá y dobló la apuesta: “No nos vamos a abstener, porque abstenerse es mirar a otro lado. Vamos a votar en contra de este Balance”.

Y luego, explicó los motivos: “El balance del ejercicio pasado, 2017-2018 está informado por la Inspección General de Personas Jurídicas (IGPJ) de la Provincia de Santa Fe. Seamos serios: ¿cómo vamos a aprobar el nuevo 2018-2019 si el anterior no está confeccionado como pide la ley?. A nosotros nos pueden criticar por muchas cosas, menos por una... somos coherentes, algo que cuesta encontrar en estos tiempos”.

Finalmente, además de apuntar al actual gobierno tatengue, habló de una de las listas que integran la llamada “oposición” o en todo caso del “no oficialismo”, que es la recientemente lanzada agrupación “Tate Campeón”, que encabeza el Dr. Marcelo Martín, ex vicepresidente y que adhieren varios ex dirigentes que formaron parte de la gestión de Spahn. “Está claro que ellos, como agrupación, tienen un muy buen diálogo con la gente que gobierna a Unión. Es algo lógico, formaron parte de todo esto. En nuestro caso y en el caso de Glorioso ‘89 pensamos distinto... muy distinto. Acá estamos discutiendo algo así: compramos un kilo de harina hace algunos años y de golpe nos quieren cobrar el kilo de harina al costo de ahora. No hay que ser contador para entender esto: es simple lógica. Es por eso que no vamos a aprobar el Balance del señor Luis Spahn”.

Hoy se reúne “Tate Campeón”

La flamante agrupación que encabeza el Dr. Marcelo Martín tendrá hoy una reunión con todos sus integrantes. Luego de la misma y con el informe preciso de su equipo técnico de contadores —que vienen interactuando con los del club en el manejo de la información específica de los números— fijará públicamente “Tate Campeón” su postura de cara a la asamblea del martes 7 de enero.

Por lo que pudo averiguar El Litoral, las exigencias que este sector opositor le fue pidiendo al Oficialismo encontraron respuestas positivas y sólo queda “un puntito en el aire”.

¿Cuál es la idea de Marcelo Martín y su gente?: aprobar la Memoria y Balance para evitar sanciones en Superliga, pero a su vez marcar “salvedades y objeciones”, que quedarán asentadas en las notas y/o estados contables.

El punto en discordia es que “Tate Campeón” quiere que ese mismo asterisco —que está vinculado obviamente a la deuda que reclama el presidente Spahn— aparezca en el informe del auditor externo que cada club contrata. Desde el oficialismo se dice, directamente, que es “algo imposible”.