Venezuela sufrió este jueves nuevos accidentes eléctricos, a una semana del comienzo del apagón que el gobierno chavista dio por terminado aunque persistía en algunas zonas del país, y que provocó la paralización de las actividades educativas y laborales, cientos de detenidos, denuncias de amenazas de pacientes renales y un repunte de la inflación.
Varias subestaciones transformadoras explotaron y se incendiaron en los municipios caraqueños Baruta y El Hatillo, así como en el municipio Cabimas del estado Zulia, y dejaron sin suministro eléctrico a numerosos barrios, informó el diario El Nacional.
Estos incidentes ocurrieron después de que el ministro de Comunicación e Información del gobierno chavista, Jorge Rodríguez, anunciara anoche que había quedado “completamente restituido el 100% del servicio de energía eléctrica a nivel nacional”.
Pese a ello, Rodríguez admitió que aún quedaban “algunas zonas” con “fallas relacionadas” con “sabotajes locales” y anunció que hoy se reanudarían las actividades laborales pero permanecerían suspendidas las educativas.
De ese modo, Venezuela completó 13 días consecutivos sin tareas laborales y 14 sin clases, pues el presidente Nicolás Maduro había extendido a toda la semana pasada los feriados del lunes y el martes por el Carnaval, y a partir del jueves pasado suspendió todas las actividades por la falta de electricidad.
El apagón, el más grande en la historia de Venezuela, fue atribuido por Maduro y su régimen a un “sabotaje cibernético” del que no dieron detalles, y por el antichavismo y expertos, a falta de mantenimiento y personal técnico especializado en la empresa estatal Corpoelec.
Paralelamente, continuaron emergiendo consecuencias del corte que causó una cantidad no determinada de víctimas fatales -la mayoría de ellas, pacientes hospitalarios- y escasez de agua potable, alimentos y medicamentos, y en cuyo contexto se produjeron saqueos de comercios.
Tenés que leerSe restableció el servicio de luz en VenezuelaSolo en Zulia se registraron saqueos a 300 comercios, según la Federación de Cámaras y Asociaciones de Comercio y Producción de Venezuela (Fedecámaras), y por ese motivo fueron detenidas 570 personas, según fuentes del gobierno estadal citadas por la agencia EFE.
Los saqueos incluyeron robos a panaderías, ferreterías, supermercados, tiendas de ropa y calzado, farmacias, joyerías, mueblerías, ópticas y centros comerciales.
"Son pérdidas que van desde las mercancías, los materiales de oficina, equipos de trabajo y daños a las estructuras del mobiliario de las empresas", dijo el vocero local de Fedecámaras, Ricardo Acosta.
Por otra parte, el director de la Coalición de Organizaciones por el Derecho a la Salud y a la Vida (Codevida), Francisco Valencia, afirmó que fueron amenazados familiares de pacientes renales que fallecieron durante el apagón por no poder realizarse diálisis.
Valencia aseguró que representantes del chavismo ofrecieron indemnizaciones a varios de esos familiares, a cambio de que grabaran un video culpando por la muerte de sus parientes al presidente interino designado por la Asamblea Nacional (AN, parlamento), Juan Guaidó, según El Nacional.
En otro orden, la tasa mensual de inflación descendió de 191,6% en enero a 53,7% en febrero -aunque el país continúa técnicamente en hiperinflación-, pero en la primera semana de marzo se observó un repunte debido a que el apagón provocó que los precios de algunos productos “subieran fuertemente” y “se dolarizara más aun la economía”, según el diputado y economista José Guerra, vocero de la Comisión de Finanzas de la AN.