Entrevista a una de las sorpresas de la elección del 16 de junio
Jerez, la "banca 88" y un partido joven que jugará en el ajedrez político local
Con escaso presupuesto, el concejal electo de Barrio 88 obtuvo 25 mil votos y llegó al Legislativo. Dice que la presentación de Eliana Ramos -candidata a la intendencia- en el debate televisivo fue “decisiva” para que la fuerza se conozca. “No salimos a buscar una ‘cara famosa’ para tener representación institucional”.
Gentileza No vamos al Concejo a calentar una silla: desde la banca de Barrio 88 se canalizará una batería de iniciativas para que la vida de la ciudadanía santafesina sea un poco mejor, más justa e igualitaria , asegura Jerez.
A Guillermo Jerez le habían chocado su “golcito” modelo 2011 y anduvo renegando una tarde de viernes con el papelerío del seguro. “Pasó una semana y no paré; espero tomarme el tiempo para disfrutar un poco de lo que logramos”, dice en primera persona del plural (“nosotros logramos”). Es decir, no él sólo, sino todos los militantes de su partido, Barrio 88. ¿Y qué se logró? Jerez obtuvo 25.079 votos en la elección del 16 de junio y accedió a una banca en el Concejo. Su presencia dará representatividad a un nuevo y joven partido en la arena política local.
Le da igual que algunos califiquen a Barrio 88 como un “partido millennial”, con cierta sorna peyorativa. “Lo tomamos como de quien venga, qué sé yo”. Su tonada delata que es entrerriano: nació hace 35 años en Rosario del Tala, y hace 14 que se vino a estudiar Sociología, para radicarse en la capital. Dice que el partido es un “proyecto colectivo” conformado por un grupo heterogéneo de militantes “con mucha capacidad y vocación de servicio”. Y admite que la presentación de Eliana Ramos durante el debate televisivo de los candidatos a la Intendencia —elogiada por propios y extraños— “fue decisiva” para que la fuerza sea visibilizada.
Con todo, hubo algo de “guapeada” del concejal electo en lograr una banca. Porque Barrio 88 no contó con una estructura partidaria enorme, ni con presupuestos faraónicos para destinar a la campaña. En este punto, Jerez se detiene y asegura: “Los resultados de nuestra elección reflejan que los grandes partidos tradicionales están perdiendo una capacidad de escucha de la sociedad. Somos un partido del siglo XXI, porque aprendimos a atender las demandas que este contexto de época le plantea a la política”, le dice a El Litoral. Se despacha con dos aseveraciones que también marcan ese muro puesto con la política tradicional. La primera: “Desde Barrio 88, no fuimos a buscar a una cara famosa para que nos facilite el camino de tener una representación institucional. Logramos instalar nuestros propios candidatos, y eso para nosotros es muy valorable”. La segunda: “No vamos al Legislativo a calentar una silla: desde la banca de ‘Barrio’ se canalizará una batería de iniciativas para que la vida de la ciudadanía sea un poco mejor, más justa e igualitaria”.
Fuerza heterogénea
Como agrupación, Barrio 88 nace en diciembre de 2015; pero como partido político formalmente se crea en 2018 (en 2017 participó en las elecciones legislativas, pero debieron usar el sello de Frente Grande). “Somos de base centro izquierda. No adscribimos a la socialdemocracia eurocéntrica. No somos un artefacto importado. Sí se sintetizan en nuestro partido muchas tradiciones político-ideológicas y populares del país. Nuestra identidad partidaria se va haciendo camino al andar”.
Jerez explica que algunos militantes se sienten identificados con la tradición peronista de izquierda; otros vienen del vecinalismo; o de la militancia barrial y social; o de la militancia universitaria. “Barrio 88 es una experiencia de centro izquierda del siglo XXI, no dogmática, plural, abierta a pensar los desafíos que se le plantean a la política actual”, insiste.
—¿Qué lectura hace de la performance electoral de Barrio 88? Esos 25 mil votos, ¿fueron puros o bien hubo “fugas”, por ejemplo, del PJ que no comulgaba con la lista del Frente Juntos, lo mismo con la lista del FPCyS, o con los votos que dejaron en las Paso Igualdad y Participación, por ejemplo?
—Creo que en gran medida, la porción más significativa de votos tiene relación con cómo nosotros planteamos la campaña. Sortear las Paso y llegar a las generales significaba “ascender a Primera División” (hace un parangón futbolero). Pasar nos permitiría levantar el conocimiento público, que es la “trampa” que le plantea a los partidos chicos y de escasos recursos el sistema electoral de boleta única, donde las opciones que llevan a candidatos famosos se ven más favorecidas.
En todo este contexto, la participación de Eliana (Ramos) en el debate televisivo fue decisiva, porque elevó el nivel de conocimiento público de Barrio 88. Y luego de eso, fue clave el boca en boca: si sacamos 8.475 votos en las primarias, (tras el debate) estábamos convencidos de que había un porcentaje importante de esos votos que se estaban multiplicando. Después, en menor medida, creo que hubo fugas desde la izquierda que quedó afuera, otros del PJ más de base e incluso del socialismo díscolo.
El desembarco en Salta 2943
Consultado sobre las principales propuestas que impulsará una vez asumida su banca, Jerez puntualiza en tres ejes de campaña. “Primero, la transparencia: tenemos una batería de iniciativas que buscan transparentar las instituciones públicas, Concejo, Municipio y entes descentralizados. Segundo, políticas públicas que mejoren la organización de todos los barrios de la ciudad. Eso dependerá mucho del modelo de ciudad que proponga el intendente electo (Emilio Jatón), de los instrumentos de gestión urbana. Nosotros tenemos nuestras propuestas que pueden contribuir a saldar esa deuda que tiene el Estado Municipal: hay muchos barrios olvidados con problemas estructurales históricos sin resolver, como el acceso a los servicios básicos”.
El tercer punto es “repensar los desafíos que el siglo XXI le presenta a las ciudades modernas. Y en este punto hay tres emergentes: la revolución digital y cómo el Estado se puede apropiar de la tecnología para el bien común, principalmente para generar mayor participación ciudadana en la toma de decisiones. También la agenda que el movimiento de mujeres le plantea al Estado (más garantías en la igualdad de género)”.
Y el tercer emergente es “planificar cómo se garantizan mayores derechos a los trabajadores informales de la economía popular, que es una masa muy amplia y está desprotegida, más aún considerando que la economía popular y social le deja mucho a la vida y a la economía de la ciudad”, concluye Jerez.