¿Es posible resucitar el proyecto de reforma de la Constitución a sólo tres meses de que termine la actual gestión? Su tratamiento fracasó en estos casi cuatro años por falta de acuerdo político, a pesar de que Miguel Lifschitz pusiera prácticamente su gestión a disposición del proyecto. Ahora, el rumor comienza a hacer olas en la Cámara de Diputados, sobre todo, porque el impulso estaría dado por legisladores de la oposición. En diálogo con El Litoral, fue el diputado Carlos Del Frade quien confirmó que es la intención poder avanzar con una “discusión seria y profunda”. Su objetivo es poder obtener un dictamen favorable en la Comisión de Educación, la última que recibió el texto y en la que quedó estancado. El representante del Frente Social y Popular admitió que hay conversaciones, “aunque primarias”, con diputados de otros sectores políticos, por ejemplo, del peronismo.
Desde el Socialismo cerraron filas para frenar cualquier intento reformista, esencialmente ahora, que el futuro gobernador -a diferencia de todo el período en el que desde la Casa Gris se promovía la sanción de la reforma- ya tiene nombre y apellido. El presidente de la Comisión de Educación, Julio Garibaldi, aseguró a este diario que existe “cero chance” de que en ese ámbito pueda haber dictamen antes de fin de año.
En el mismo sentido se manifestó el ministro de Gobierno, Pablo Farías, quien directamente consideró que el tema debe ser materia de análisis del futuro gobierno. “En primer lugar, más allá de alguna versión periodística, no tengo conocimiento ni ningún legislador me ha manifestado en firme una posición de ese tipo”, dijo el funcionario a El Litoral. “De todas formas -acotó-, después de que el gobernador Miguel Lifschitz lo intentara en forma importante y que la Cámara (de Diputados) se expidiera, creo que ahora con una transición en marcha, estos son temas que ya tiene que verlos directamente el gobernador entrante; el gobernador electo con la legislatura entrante. Me parece que ésta es una cuestión con demasiada profundidad e impacto político como para que lo trate una Legislatura que se está yendo y con un gobierno que también está terminando su mandato. Me parece que tiene que tratarlo el próximo gobierno con sus respectivos legisladores”, insistió.
Consultado sobre si eventualmente el Frente Progresista acompañaría el resurgimiento del proyecto, Farías dijo que “no habría” inconvenientes. “Nosotros hemos planteado nuestra posición y en eso vamos a ser claros y consecuentes. Pero insisto, me parece que no es un tema para tratarse en esta coyuntura de transición. De hecho, el gobernador se ha expresado lo suficiente y la legislatura también. Por lo tanto -reiteró-, lo lógico es que le tema sea abordado por la próxima gestión”.
Casualidad o no, las versiones periodísticas sobre el futuro de la reforma se dan casi en paralelo con otras versiones vinculadas a la definición del próximo presidente de la Cámara de Diputados. Por sentido común se presume que de manera indiscutida ese lugar estaría reservado para Miguel Lifschitz. Desde el gobierno se relativizó el tema por “prematuro”. Consultado por El Litoral, Farías dijo que faltan “tres largos meses” de gestión todavía.
“Es absolutamente prematuro empezar a hablar de estas cuestiones. El gobernador está totalmente dedicado a las funciones que hoy por hoy tiene y ése (la presidencia de la Cámara) es un tema para tratar en la próxima Legislatura. Sólo hay versiones periodísticas. No hay ningún legislador, ni actual ni electo, que me haya expresado alguna cuestión en particular. Creo que son sólo versiones periodísticas que pueden estar alentadas por algún actor político. Pero tienen más que ver con la ansiedad que con la realidad”, aseveró.
Pese al carácter “prematuro” de la discusión invocado por el ministro, algunos movimientos políticos derivados de los resultados electorales de junio habrían sembrado dudas en lo que parecía una verdad indiscutida. A tal punto que algunos referentes del PJ fueron convocados por las máximas autoridades de la Casa Gris el pasado viernes. Y esa temática habría sido parte de la agenda.