En la incansable búsqueda por generar conciencia ambiental, la ciudad realizará una marcha contra el cambio climático el viernes a partir de las 18.30 en el Puente Colgante.
La marcha será el viernes a partir de las 18.30. Participarán una decena de organizaciones de la ciudad que luchan por la protección del medio ambiente. La movilización se realizará bajo el lema “otro mundo es necesario y posible”. Habrá concentraciones en 14 provincias del país.
En la incansable búsqueda por generar conciencia ambiental, la ciudad realizará una marcha contra el cambio climático el viernes a partir de las 18.30 en el Puente Colgante.
“Es un momento en el que hay que comprender en que defender la tierra, el agua y las semillas, tiene relación directa con el presente y el futuro”, resaltó Jeremías Chauque, integrante de Desvío a la Raíz - Agricultura Ancestral, e indicó que las entidades organizadoras de esta movida en Santa Fe son “la representación local y regional de lo que significa un movimiento mundial”.
La iniciativa, que se hará en un punto característico de la capital santafesina y se replicará en 14 provincias del país, se enmarca en la movilización mundial bajo la consigna “otro mundo es necesario y posible” y las entidades organizadoras son: el Centro de Protección a la Naturaleza (Cepronat); Unión de Trabajadores de la Tierra (UTT); la ONG Capibara; campaña Paren de Fumigarnos; Desvío a la Raíz Agricultura Ancestral; Central de Trabajadores de la Argentina; la asociación Parque Federal; y la asociación El Arca del Sur.
“Desde la mirada de la agricultura hay una disputa constante con el modelo productivo. Vemos el cambio climático relacionado al tipo de modelo agropecuario, podemos hablar de la minería, del fracking —método de extracción de gas y petróleo—, cada problemática relacionada al suelo impacta en este cambio”, y ejemplificó que en su área, es decir, la agricultura, observa que en el último tiempo “se ha perdido el 50 % del suelo fértil. Cuando nosotros planteamos la relación del clima con la degradación de los suelos directamente nos tenemos que meter con el modelo productivo porque no hay montes y menos absorción”.
Chauque, quien forma parte de un grupo de 30 familias que subsisten gracias a los alimentos orgánicos que producen en la zona de Desvío Arijón, reclamó: “El futuro depende de nosotros como consumidores, de las políticas relacionadas al modelo productivo. Por el lado de los agricultores orgánicos necesitamos políticas concretas relacionadas a la agricultura orgánica. No hay futuro si no comprendemos a la naturaleza como la base fundamental de la soberanía de un pueblo”.
Cambios de conducta
“El cambio climático es un fenómeno vinculado a los patrones de cambios de temperatura de la tierra. Se dice que la temperatura aumenta aceleradamente y eso es lo que técnicamente se conoce como calentamiento global, algo que se produce por acciones humanas. Somos las personas quienes tenemos que pensar cómo consumimos y producimos, cómo pensamos un sistema de transporte, son aspectos que tienen mucha influencia en el cambio climático”, comentó Rafael Colombo, presidente de Capibara; e informó que como ONG presentarán un pedido de informe para que se ponga a disposición de la ciudadanía información pública de cómo está afectando el cambio climático a la provincia de Santa Fe, y así determinar cuál es el rol de la provincia y su incidencia en el cambio climático.
En relación a las principales consecuencias que observa en la provincia, Colombo sostuvo que las inundaciones y las sequías son los resultados del cambio climático que más preocupan a esta región. “Santa Fe tiene todos los años períodos de inundaciones que ponen en jaque no solo al sistema productivo sino que también a la misma población. Se va a empezar a ver en la provincia todo un apartado vinculado a cómo vamos a trabajar con los refugiados climáticos, una nueva categoría referida a la gente que está viviendo hoy en zonas profundas donde va a tener un desplazamiento total”, analizó el referente de Capibara —organización que tiene como objetivo contribuir a la tutela de los derechos de la naturaleza en armonía con el derecho a un ambiente sano—.
A nivel mundial
El pasado viernes, en al menos 150 países de todo el mundo, se realizaron más de 5.000 marchas. Entre ellas, se realizó una multitudinaria manifestación en Nueva York (Estados Unidos), que contó con más de un millón de estudiantes de 1.800 escuelas y que tuvo a la joven activista sueca Greta Thunberg, de 16 años, como propulsora central de la movida ambiental.
Las movilizaciones se dieron en vísperas a la 74° Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas que se realiza esta semana, de la que participó el presidente Mauricio Macri y los referentes políticos de las potencias mundiales.
El calentamiento que preocupa
Según la ONU, “los últimos cuatro años han sido los más calurosos de la historia y las temperaturas invernales del Ártico han aumentado 3 °C desde 1990. Los niveles del mar están subiendo, los arrecifes de coral se mueren y estamos empezando a ver el impacto fatal del cambio climático en la salud a través de la contaminación del aire, las olas de calor y los riesgos en la seguridad alimentaria”, detallan desde el organismo internacional.
“Los impactos del cambio climático se sienten en todas partes y están teniendo consecuencias muy reales en la vida de las personas. Las economías nacionales se están viendo afectadas por el cambio climático, lo cual a día de hoy nos está costando caro y resultará aún más costoso en el futuro. Pero se empieza a reconocer que ahora existen soluciones asequibles y escalables que nos permitirán dar el salto a economías más limpias y resilientes”, agregan.
Además, pormenorizaron que los últimos análisis indican que, “si actuamos ya, podemos reducir las emisiones de carbono de aquí a 12 años y frenar el aumento de la temperatura media anual por debajo de los 2 °C, o incluso a 1,5 °C por encima de los niveles preindustriales, según los datos científicos más recientes”.
Al mismo tiempo valoraron el Acuerdo de París y lo entendieron como “un marco normativo visionario, viable y puntero que detalla exactamente las medidas a tomar para detener la alteración del clima e invertir su impacto. Sin embargo, este acuerdo no tiene sentido en sí mismo si no se acompaña de una acción ambiciosa”.
En Santo Tomé
Este 27 de septiembre invitan a formar parte de la primera Marcha Mundial por la Crisis Climática en la Ciudad de Santo Tome, organizada por el proyecto “Mi ciudad No es un cenicero” (Escuela “IDEI Pilares), No Frias mi ciudad (escuela “La inmaculada”) del nivel secundario y el grupo comunidad.
A las 17 se concentrarán en el club “El Julepe” (Gomez Cello 1751) y realizarán una marcha simbólica hasta la Plazoleta Paso del Salado (Frente al puente carretero. A las 17,30hs comenzaran diferentes expresiones artísticas, como números musicales de artistas locales, muestras de las producciones de los alumnos. También habrá puntos impíos de tapitas, colillas de cigarrillo, aceite vegetal usado, papel, ecobotellas, etc. A las 18,30hs se realizara un acto de cierre.