El gobernador Miguel Lifschitz firmó el decreto, por el cual se adjudica el contrato de agente financiero del Estado provincial al actual prestatario, el Banco de Santa Fe.
Ese rol seguirá en manos del Banco de Santa Fe, único participante de la licitación. Habrá más sucursales y cajeros, y una fuerte política de financiamiento al sector productivo. Además, el gobierno de Perotti podrá designar a un representante en el directorio.
El gobernador Miguel Lifschitz firmó el decreto, por el cual se adjudica el contrato de agente financiero del Estado provincial al actual prestatario, el Banco de Santa Fe.
En conferencia de prensa, el ministro de Gobierno y Reforma del Estado, Pablo Farías, consideró que la disposición “pone fin a un proceso realmente importante, que mejora cualitativamente las condiciones de prestación del servicio de agente financiero y caja de la provincia”.
Farías relató que en la anterior contratación hubo avances al respecto y que, con la nueva, se “da un paso más” en la optimización de la prestación del servicio, con “beneficios muy claros no sólo para los fondos de la provincia, sino también en la posibilidad de que el banco recupere el rol de ser motorizador de la economía provincial”.
El ministro aseguró que el tema fue de consideración permanente en el marco de las discusiones de la mesa de transición, con los representantes del gobernador electo, Omar Perotti. “Cada paso que dimos se lo hemos notificado, y les ofrecimos la posibilidad de que hicieran señalamientos o sugerencias, pero no hubo ninguna objeción”, relató.
Disposiciones
A su turno, el ministro de Economía, Gonzalo Saglione, enmarcó las mejoras en la prestación del agente financiero como parte de un enfoque más abarcativo, y precisó en qué consistirán.
“Encaramos esta licitación con una mirada integral, que incluye dos proyectos de ley que están en la Legislatura de la provincia. La creación de un banco público por un lado, y por el otro dos instrumentos financieros que son fundamentales para el desarrollo de la economía provincial: el fondo de garantía Santa Fe y el fideicomiso productivo. Y cada uno de estos proyectos tiene lazos de vinculación con el pliego del agente financiero y con el contrato que va a resultar de esta adjudicación”, resumió Saglione.
“Concretamente, el pliego permite que las lecciones aprendidas durante todo este año de parte del gobierno de la provincia puedan haberse trasladado a las nuevas condiciones contractuales. El banco va a pagar un canon más alto; se garantiza no sólo la estabilidad laboral de todos los trabajadores, sino también mantener todas las sucursales abiertas, e ir incrementando las localidades atendidas, y la cantidad de cajeros y de localidades con cajeros”, enumeró.
El funcionario puso énfasis sobre todo en el rol trascendente que la entidad está llamada a cumplir en orden al financiamiento de la actividad privada. “Hay un compromiso muy fuerte del banco. Pondrá a disposición de las pymes 10 mil millones de pesos en líneas de crédito”, en tanto que, a la vez, aportará 350 millones de sus propios recursos para contribuir a “fondear” el futuro fideicomiso productivo de la provincia. Por otra parte, el banco propone líneas de crédito por otros 7 mil millones de pesos a pymes que tengan respaldo del fondo de garantía Santa Fe.
Una silla en el directorio
El ministro Gonzalo Saglione confirmó que el Banco propuso que la provincia designe a un representante en su Directorio, con poder de decisión para las medidas que tome la entidad, sobre todo en orden al financiamiento de actividades productivas. Naturalmente, esa designación recaerá sobre el futuro gobierno. En tanto, aclaró que cuando sea aprobado y creado el nuevo banco público, los depósitos judiciales que actualmente obran en el Banco de Santa Fe pasarán a esa entidad.