Sin dudas que fue una tarde para el olvido en Unión, con jugadores —salvo Moyano y alguna que otra intervención de Corvalán— que estuvieron muy lejos del nivel de un partido como el de ayer ante Boca. El equipo de Madelón hizo exactamente todo al revés de lo que en un principio tenía que hacer. El poblado mediocampo rojiblanco no sirvió absolutamente para nada, ya que los volantes locales, literalmente se los “comieron”, manejando el partido a voluntad y llegando, siempre con pelota dominada, a la línea defensiva que mostró grietas, que fueron salvadas en su mayor parte por una muy buena actuación de su arquero Sebastián Moyano.
El de ayer no era un equipo de Madelón, el que presiona alto y busca salir rápido para poder lastimar, ayer Unión mostró una cara que hace mucho tiempo no mostraba y que cuesta encontrar en la dilatada era Madelón.
Como ya sucedió en varios partidos de esta temporada, Unión arrancó perdiendo desde los vestuarios, en la primera llegada de Boca el balón le quedó a Salvio que remató cruzado, para que Moyano logre mandar la pelota al tiro de esquina y desde ese tiro de esquina, donde se perdieron las marcas, en forma increíble Ramón Ábila cabeceó solo pisando el área chica, dejando sin chances al “uno” rojiblanco. Sin dudas una desatención increíble en un equipo de primera división.
Tras la apertura del marcador, se complicó Blasi en la salida regalándole la pelota a Ábila que encaró, pero se terminó enredando por lo que Unión se salvó de milagro del segundo.
Tras esta jugada llegó lo mejorcito de Unión, aunque siempre muy lejos de poder llegar a inquietar el arco xeneize. Algún toque de Carabajal y algunas jugadas (siempre para adelante) de Cavallaro, fueron realmente poco para un Boca, que en una gran tarde de Salvio, sumado a la compañía de “Bebelo” Reynoso y alguna que otra pincelada de Alexis Mac Allister, mostró tener una categoría muy superior a la de este Unión.
El Tate en ningún momento “acusó el golpe” como para ir a buscar el empate, siguió jugando el partido con mucho orden y tratando de no recibir otro gol. Por izquierda Más hizo un “surco” llegando mucho a las espaldas de Damián Martínez, mientras que el gran problema fue el “Toto” Salvio encarando con pelota dominada.
A los 28 llegó la única chance de Unión y fue por una muy buena pelota puesta por Gabriel Carabajal por izquierda para la subida de Federico Milo, el lateral llegó al fondo y con un taco dejó por el piso a Lisandro López, para rematar de derecha, pero el disparo le salió al medio justo donde estaba ubicado Andrada; fue la única situación de Unión en toda la primera etapa.
Boca siguió manejando el balón y tuvo varias situaciones, pero todas terminaron en las manos de Sebastián Moyano; dos remates francos de Salvio, uno de Mac Allister y otro de “Wanchope”, para convertir al arquero tatengue en el mejor jugador santafesino.
No cambió absolutamente nada en la parte complementaria, porque Unión salió nuevamente a ver que pasaba y dejó a Boca que siguiera tocando y jugando, donde el “Toto” Salvio se lucía en cada pelota que llegaba a sus pies.
A los 5 minutos ingresó Franco Troyanski por Gabriel Carabajal y mucho no cambió porque desde el planteo siempre Boca resultaba muy superior, con el agregado que los jugadores locales ganaban siempre las divididas y los tatengues parecían espectadores.
Se durmió Nelson Acevedo (de muy mal partido) para que Salvio saque un fuerte remate que con mucho esfuerzo Sebastián Moyano logró despejar abajo, pero en el rebote llegaron juntos Ábila y Blasi, el delantero (fingió una falta que no existió) pateó afuera ante la exigencia del defensor y Unión se salvó en forma milagrosa.
Dos minutos después llegó el segundo que le ponía un poco más de justicia al marcador, porque Boca era muy superior a Unión. Del medio Capaldo la abrió para la izquierda donde Ábila la metió al medio y ante la asombrosa pasividad de la defensa rojiblanca, el balón le quedó limpio a Alexis Mac Allister quien desde el punto del penal la “picó” ante un Moyano que no alcanzó a cerrar.
Ni el segundo tanto provocó alguna reacción en un Unión que siguió jugando al mismo ritmo y padeciendo el toque de un rival iluminado. Se siguieron sucediendo las situaciones en favor del Xeneize y siguió creciendo la tarea de Sebastián Moyano que fue por lejos la figura del equipo rojiblanco.
Resultó tan pasiva la entrega del equipo de Madelón que con un partido que siempre fue desfavorable y en la propia Bombonera, solamente recibió una amarilla y cuando terminaba el partido, cuando el “Mugre” Corvalán (tal vez el único que se puede rescatar de toda la defensa) metió una pierna y recibió la tarjeta.
Unión con todo en contra tuvo dos situaciones, la primera un pase de Acevedo para Walter Bou que no pudo ganar en velocidad y terminó rematando de lejos, y la otra sobre el cierre, cuando Ezequiel Bonifacio quedó muy libre dentro del área, pero el volante no se animó a pegarle de zurda y terminó siendo encimado por Izquierdoz.
Se terminó yendo el partido con una contundente e inobjetable victoria de Boca sobre un Unión que hizo realmente muy poco, con jugadores que mostraron un muy bajo nivel, donde se salva el arquero Moyano y Claudio Corvalán que fue lo más rescatable de los jugadores de campo.
En el medio es complicado poder rescatar a alguno, siendo muy flojo el partido de Nelson Acevedo, perdido en la cancha a lo largo de los 90 minutos, mientras que si bien a Bou no le llegó casi nunca la pelota, cuando tuvo alguna aproximación se terminó enredando, en tanto que Franco Troyanski tampoco pudo aportar algo para la ofensiva.
Sin dudas un mal momento de este equipo que perdió jugando mal en Santa Fe ante los tucumanos y ayer fue superado desde todos los aspectos por un rival que es el puntero del torneo, pero que de todas formas, al menos ayer mostró una superioridad abrumadora.