En la tercera edición del concurso de cosplay del "Anime Manga Tai Kai", la santafesina Noelia Bustaver (Aome Katze) fue la ganadora de entre más de 30 participantes, con un cosplay de la armadura alfa de Nergigante, un personaje del videojuego japonés Monster Hunter.
Fernando Brischetto, fotógrafo de cosplays y jurado en el evento, felicitó a Aome al anunciarla como ganadora y justificó la elección alegando que realizó “un gran trabajo, de Noelia que vino a participar de una provincia que no es Buenos Aires. Una dedicación increíble, detalles increíbles en el traje, en las props -accesorios del traje, en este caso armas-. La verdad que no se puede creer, ha traído un repertorio de armas con dos espadas más -sumando a la que tenía en el momento de la premiación- para participar del evento.”
El jurado lo completaban Miembros del Consejo de Administración de la Fundación Cultural Argentino Japonesa. En cuanto al criterio para seleccionar al ganador, las bases y condiciones del concurso establecían que “se evaluará la confección del traje, maquillaje, fidelidad e interpretación durante el desfile”. Sin embargo, también le otorgaba a los jueces libre criterio de evaluación, “respondiendo solo a sus conocimientos, gustos y conciencia”.
En cuanto al concurso, es la tercera edición del mismo, aunque hace más años que se vienen realizando eventos similares en el Jardín Japonés. Los concursantes eran en su mayoría de la provincia de Buenos Aires, pero también había participantes de Tucumán, Santiago del Estero y, por supuesto, Santa Fe.
Gentileza del Jardín Japonés.
Foto: Gentileza del Jardín Japonés.
Detalles del concurso
El cosplayer no tenía que ser necesariamente cosmaker, es decir, quien realiza el traje que lleva puesto; pero sí se evaluaba muy positivamente a quienes lo eran frente a los que no. En caso de haber confeccionado su propio disfraz, el concursante tenía que poder probarlo, de ser solicitado. El traje elegido debía ser de origen japonés.
El concurso contaba primero con fases clasificatorias, en las que seleccionaban en cada evento llevado a cabo a cinco ganadores que pasaban a la etapa final, en la que se elegiría al ganador. Así fue como se conformó el grupo de los más de 30 finalistas. Ya en la última fase, se le realizaba a los participantes una entrevista previa, además de solicitarles un “desfile” con el cosplay frente a los jueces. En estas instancias es en las que se corroboraba si habían elaborado su traje, además de los datos que para los jueces fueran relevantes.
Por último, los concursantes realizan un desfile frente al público, en donde comunican luego al ganador.
En diálogo con El Litoral, Aome nos contó cómo vivió la final del concurso: “Yo estoy muy contenta, primero porque fue una apuesta meterme en este concurso, valió la pena todo el tiempo y esfuerzo invertido, aun si no hubiera ganado la experiencia estuvo buenísima. Por otro lado, viajar a japón es mi sueño desde que tengo 10 años. Además, me dio la posibilidad de conocer a mucha gente que me felicitó, que me dieron ánimos para seguir esforzándome en esto, y me dio muchas ganas de seguir trabajando y eso esta buenísimo.”