El Puente Internacional Reynosa-Pharr fue el escenario del suicidio de un hombre indocumentado a quien le negaron el asilo político que había solicitado en los Estados Unidos. Poco después de haber recibido la respuesta de las autoridades de migración, se quitó la vida cortando su garganta en el famoso puente.
Testigos afirman que se cortó la arteria yugular a escasos metros de la línea fronteriza, ante la mirada expectante de automovilistas y elementos de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP). De acuerdo con el periódico El Universal el hombre intentó cruzar por el puente que es exclusivo para automóviles y fue detenido por agentes policiales.
Para evitar que el hombre ingresara a los Estados Unidos, los agentes cerraron el portón de la línea divisoria. Momentos antes, lo habían herido en el brazo con una bala por la necedad que tenía de entrar en el país vecino.
El migrante se cortó el cuello al observar que los agentes se acercaban a él para arrestarlo, fue entonces que retrocedió algunos pasos, sacó el cuchillo y se degolló frente a la mirada espectante de los automovilistas que esperaban entrar a los Estados Unidos y de las autoridades presentes en ese momento. A pesar de que arribaron paramédicos al lugar, no pudieron hacer nada porque el migrante ya se encontraba sin vida.
La Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos, reveló que en el último año se detuvo casi a un millón de inmigrantes sin papeles que tenían como objetivo cruzar al territorio estadounidense. Esto significó también un aumento del 88% en los arrestos realizados.
Las respuestas a las solicitudes de asilo tardan entre cuatro y seis meses, aunque, de acuerdo con El País, ese tiempo suelen prolongarse hasta los ocho meses de espera. El gobierno de Donald Trump estableció en el Protocolo de Protección de Migrantes que los solicitantes tendrán que esperar en México hasta que sepan la respuesta por lo que muchos indocumentados se ven obligados a permanecer durante meses cerca de las líneas fronterizas