En los pasillos de la UNL, previa a la última sesión de la Cámara de Diputados, el presidente del cuerpo, Miguel Lifschitz y el massista Oscar Martínez (Frente Renovador) siguieron hablando del Observatorio de Violencia que propicia este último para que funcione en el ámbito legislativo.
El tema se había hablado minutos antes en Labor Parlamentaria y se acordó diferir el tratamiento en siete días.
Sin embargo, Martínez volvió a insistirle al socialista en la importancia de tener un lugar para acompañar a las víctimas y a los familiares a la hora de brindar opinión ante la justicia sobre posibles flexibilizaciones de sanciones penales.