Estudiar lejos de casa fue otra de las actividades que modificó el aislamiento por la pandemia en 2020: apenas comenzado el ciclo lectivo, cesaron las clases presenciales y se suspendieron los servicios de transporte. Muchos se quedaron en la ciudad pero otros volvieron a su lugar de origen para continuar estudiando online cerca de su familia. Pero ¿qué pasará en 2021?
Según Eduardo Brigada, Gerente General de Guastavino e Imbert "los estudiantes al principio se quedaron pero apenas pudieron salir la mayoría ha regresado a sus casas, la mayoría no están en la ciudad, los departamentos alquilados están en su gran mayoría cerrados y si bien se dijo que hubo gran rescisión de contratos, no fue en su mayoría; porque, obviamente, el costo de desocupar un inmueble, cuando tampoco se sabía que iba a ser tan prolongado el tema de las clases, nadie iba a dejar un departamento porque después para volverlo a tomar había que repetir los gastos, sobre todo el que ya venía con la locación o ya tiene un año de contrato, está con un contrato ventajoso y ya tiene su mudanza".
"No sé qué irá a pasar, tenemos entendidos que el año que viene se reactivan sí o sí las facultades, por lo tanto creo que los estudiantes retornarán, habrá algunos movimientos en el sector, sobre todo para algunos que a lo mejor no vayan a seguir o esperen...bueno, se verá, pero nuestra experiencia nos dice que va a haber una situación muy especial y no va a ser como otros años, cuando el tema de estudiantes arranca en el mes de noviembre para locaciones", manifestó el corredor.
"No obstante -dijo Brigada-, hemos aprendido a la fuerza los corredores a trabajar a distancia, online, entonces están los elementos...pero al departamento hay que verlo, aunque los trámites se puedan hacer a distancia, pero llega el momento de firmar el contrato y el tema es la movilización. Sobre todo, en Santa Fe residen muchos estudiantes de otras provincias entonces ahí está muy complicado el tema porque no puede haber traslados".
Con respecto a las consultas, admitió que "hay muy pocas": "creo que a los estudiantes los vamos a ver cuando ya esté asegurado el tema lectivo, seguramente va a ser muy fuerte enero, ahí va a estar el gran fuerte porque todos los cañones están apuntados a marzo, así que seguramente se va a estirar el tema, salvo que se adelante una confirmación y exista una conectividad de provincias", consideró. "Con los niveles de contagio que hoy tiene la provincia yo lo veo muy difícil en noviembre o diciembre", admitió.
Por las restricciones, el representante de Guastavino e Imbert adelantó que tanto en la web de la inmobiliaria como en sus redes sociales se puede acceder a la información, inclusive se puede consultar "y automáticamente se le contesta", "están las fotografías, hay una interacción de los lugares donde están ubicados los inmuebles para que los padres puedan ver el radio y lo pueden ubicar en el plano, para los que no son de la ciudad o la provincia así pueden ubicar más o menos las distancias que tienen", detalló.
"Antes lo usábamos mucho para los estudiantes pero hoy toda la gente baja la solicitud por internet, incluso nos mandan por WhatsApp, y después cuando vienen a firmar esa semana el contrato firmar el ejemplar directamente adelante nuestro como corresponde y se termina pero ya no es que vienen dos o tres veces, sino que vienen una vez para verlo y nos mandan todo por medios electrónicos", aseguró. "En muchos casos, el contrato sale, tenemos eso muy aceitado, damos el contrato para firmar en origen, la resolución es en 24 horas o sea que el papá que viene con los chicos a la ciudad en un día tiene resuelto su contrato y se puede ir, si es que ya tiene todas firmas; casi todos los corredores tenemos eso ya preparado y acelerado justamente por la experiencia de tratar con este tipo de segmento en el mercado", indicó.
Finalmente, comentó que en la empresa son "muy flexibles en cuanto a los gastos, la forma de financiar los intereses y acomodarnos a la situación". "Hoy es un parámetro pero medianamente damos distintas alternativas y lo importante es que se pueda realizar la operación y fidelizar el cliente, porque tenemos casos donde empieza el hermano mayor y después continúa el menor y hay una relación. Entonces, obviamente, todo eso se flexibiliza, como las renovaciones de contrato son mucho más ágiles, porque al padre hay que solucionarle los problemas: ya es un dolor de cabeza el tener que salir a buscar, recorrer y ver", argumentó. "Pero por suerte hoy hay departamentos para comparar precios, en otros años para esta fecha ya empezaban a escasear", concluyó Brigada.
"Lo virtual reemplazó a lo presencial"
Por su parte, Coqui Riestra De Benuzzi -presidente de Benuzzi Negocios Inmobiliarios-, coincidió en que el mercado de los alquileres "no quedó afuera del contexto" de la pandemia. Pero, aunque admitió que "lo virtual reemplazó a lo presencial", aseguró que "la empresa desde años maneja páginas que se actualizan semanalmente y muchas veces a diario".
En cuanto a las recomendaciones para las familias, Coqui manifestó: "siempre aconsejamos que alquilen cerca a las universidades o sedes de facultades, más que nunca en estos tiempos de pandemia donde hay tantas restricciones con el transporte público".
La corredora inmobiliaria también consideró que "hay menor flujo de consultas, porque las clases virtuales hacen que los estudiantes se queden en sus lugares de origen". "De todos modos -dijo-, se hará una evaluación en el momento que empiece la temporada "alta" para alquileres de estudiantes", opinó.
Por su experiencia, Brigada aseguró que "los estudiantes siempre buscan en un radio relativamente cercano por un tema de traslado a las universidades, por lo general el caballito de batalla es la unidad de un dormitorio con bajas expensas que lo ocupan dos estudiantes, muchas veces son hermanos y otras veces se comparte el alquiler; el estudiante no busca viviendas de dos o tres dormitorios, inclusive los padres prefieren los departamentos por una cuestión de seguridad, sobre todo si son mujeres las que vienen a estudiar, prefieren estar más resguardadas en edificios". "Digamos que los chicos buscan lugares céntricos bien ubicados pero los papás miran los costos, más allá del alquiler, que son las expensas y los impuestos", observó.
"Lo que sí vemos -advirtió- es que va a tener que trabajarse muchísimo para ubicarlos en el sentido de los cotos, porque los valores que se están manejando del año pasado a hora estamos, promedio, en un 30 o 35% más para el mismo tipo de inmueble, porque no han seguido la inflación real que hubo porque no hay monto para pagarlo, se ajustan todos a ese tema; aunque eso le va a dar un alivio a los padres porque técnicamente si se hubieran reajustado por la inflación estaríamos hablando de aumentos del 50% y obviamente no hay plata para pagar eso".