El presidente interino de Venezuela designado por el parlamento, Juan Guaidó, confirmó este jueves que el chavismo y la oposición entablaron conversaciones con el gobierno de Noruega y la primera reunión de su sector con el Grupo Internacional de Contacto (GIC) que lidera la Unión Europea (UE), en busca de una solución a la crisis institucional de su país.
“Sí, hay unos enviados a Noruega; ahora, también lo he dicho hasta el cansancio que no nos vamos a prestar a una negociación falsa”, afirmó el mandatario encargado en declaraciones a la prensa tras asistir al congreso de la coalición antichavista Frente Amplio Venezuela Libre (FAVL).
Guaidó advirtió que “no hay ningún tipo de negociación” sino conversaciones como respuesta a una convocatoria de Noruega, cuyo “esfuerzo” por “una mediación” lleva “meses” y es “una inciativa más de un país que quiere colaborar”.
La existencia de esas conversaciones, confirmada ayer a Télam por fuentes políticas venezolanas, fue ratificada hoy por la televisora estatal noruega NRK.
NRK reportó que los contactos se iniciaron semanas atrás en Cuba y ya se mantuvieron varias reuniones en un lugar secreto de Oslo con la mediación de la cancillería noruega, según recogió la agencia de noticias EFE.
Anoche, en un discurso transmitido por la cadena oficial de radio y televisión, el presidente chavista, Nicolás Maduro, no admitió esas conversaciones pero llamó a un “gran diálogo nacional” y reconoció que su ministro de Comunicación e Información, Jorge Rodríguez, estaba cumpliendo una “misión muy importante” fuera de Venezuela.
Rodríguez y el gobernador del estado Miranda, Héctor Rodríguez, son los delegados del chavismo en Oslo, mientras los de la oposición son el ex diputado Gerardo Blyde y el ex ministro Fernando Martínez Mottola.
Asimismo, Guaidó anunció el primer encuentro de su sector con el GIC, cuya primera misión llegó ayer a Caracas.
“Hoy tendremos reunión con el GIC; reiteramos que cualquier iniciativa de mediación debe pasar por el cese de la usurpación, el gobierno de transición y las elecciones libres”, escribió el presidente interino en su cuenta en Twitter.
“Estamos trabajando en todas las opciones para ponerle fin a la dictadura y estamos avanzando con cada una de ellas: mediación de países que se aproximen a una solución en Venezuela, cooperación internacional y actuación constitucional con nuestras fuerzas armadas”, agregó.
El GIC cobró mayor importancia tras el frustrado alzamiento cívico militar que el 30 de abril intentó desalojar del gobierno a Maduro, cuando coincidió con el Grupo de Lima en trabajar conjuntamente en busca de soluciones a la crisis venezolana.
Al margen, el antichavismo se anotó este jueves dos pequeñas victorias luego de que el chavismo aumentara la represión a la oposición tras el levantamiento fallido, incluso con la detención del primer vicepresidente del parlamento, Édgar Zambrano, y con el retiro de los fueros a una docena de diputados.
Por un lado, el Servicio Secreto de Estados Unidos detuvo a los últimos cuatro del grupo de militantes chavistas que habían tomado la embajada de Venezuela en Washington para impedir el ingreso de los diplomáticos designados por Guaidó.
Los representantes del gobierno interino ante Estados Unidos, Carlos Vecchio, y ante la Organización de Estados Americanos (OEA), Gustavo Tarre, se aprestaban a dar esta tarde una conferencia de prensa en la sede “recuperada”.
Por otra parte, Guaidó anunció que el comisario Iván Simonovis, considerado uno de los primeros presos políticos del chavismo, fue liberado de la prisión -que cumplía en su domicilio, por razones de salud- por un indulto que él decretó.
La situación de Simonovis causó revuelo esta mañana, cuando su esposa dijo que el comisario no estaba en su casa pero no explicó otros detalles y cuatro periodistas fueron detenidos en las inmediaciones por efectivos del Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (Sebin).