Fuente: Prensa Bacarella
Fuente: Prensa Bacarella
Germán Bacarella coincide en que son varios los motivos de la crisis de Sancor, pero remarca que “lo que hay que evitar es que los costos recaigan sobre los trabajadores y los pueblos y ciudades donde hay plantas productivas” de la empresa cooperativa. “Salvar a Sancor es vital para Santa Fe; y para salvarla hace falta más decisión y acción de todos los niveles de gobierno y todos los sectores políticos, sociales y económicos”, afirmó el diputado provincial peronista.
Respecto de la gravedad de la crisis de la tradicional y poderosa firma de productos lácteos, el legislador del bloque del Frente Justicialista para la Victoria pone el ejemplo de Gálvez, ciudad en la que nació y vive. “Nosotros tenemos 300 trabajadores directos que no están cobrando sus salarios como corresponde, que mayoritariamente no están cumpliendo sus funciones habituales, que no saben qué va a ser de ellos. Y tenemos toda una comunidad que teme por una de sus principales fuentes de generación de actividad económica, de sostenimiento del empleo y el consumo”, señaló Bacarella.
En Gálvez, desde el miércoles 26 de abril los operarios se instalaron en carpas frente a la planta y comenzaron a movilizarse, con fuerte respaldo de otros gremios, de entidades comunitarias y autoridades y legisladores locales. “Es imposible acallar el descontento, porque ni los trabajadores ni los vecinos de Gálvez son responsables de lo que está pasando y sin embargo son los principales perjudicados”, resaltó el legislador provincial.
“Esta misma preocupación es la que vemos en cada pueblo y ciudad donde Sancor está presente, porque no hay que olvidar que este conflicto se da en un contexto también muy complicado de recesión, de caída de la enorme mayoría de los rubros productivos, comerciales y de servicios”, subrayó.
Integrante de la Comisión de Asuntos Laborales de la Cámara de Diputados, Bacarella recordó que “hubo múltiples iniciativas y expresiones desde la Legislatura santafesina. Estamos en contacto permanente con los pueblos y ciudades más afectados, con los distintos actores de la cadena productiva de la lechería, con los intendentes y presidentes comunales, con las organizaciones sindicales y empresariales. Pero necesitamos más comprensión y esfuerzo de quienes tienen más herramientas para aportar, sobre todo del gobierno nacional, que tiene que entender el verdadero valor de Sancor”, apuntó.
“Desde que Mauricio Macri asumió la Presidencia nuestras economías regionales caen, las necesidades de la gente se profundizan. La caída de los salarios y el consumo, la apertura de las importaciones, los tarifazos, son fruto del modelo neoliberal de ajuste que ya fracasó y nos hizo mucho daño. Ojalá escuchen el descontento y recapaciten. Nosotros queremos que las cosas mejoren, no que empeoren cada día. Pero tienen que asumir que este no es el mejor camino para mejorar y enderezar el rumbo”, expresó Bacarella.