Redacción El Litoral
El diputado nacional del oficialismo rechazó expresiones de la Casa Gris sobre demoras en el envío de fondos para tamberos y ayudas a productores inundados.
Redacción El Litoral
El diputado nacional por Santa Fe, Luciano Laspina (Cambiemos), negó que haya trabas o demoras injustificadas en la ayuda que el gobierno nacional le envía a Santa Fe para enfrentar las inundaciones y atemperar sus efectos económicos.
También elogió el plan de obras de infraestructura del gobierno de Mauricio Macri en territorio santafesino. Reclamó a la dirigencia política en general, y del oficialismo santafesino en particular, “dejar de echar culpas a los demás y ocuparse de la gestión”.
El economista del PRO subrayó que la Casa Rosada “hace enormes esfuerzos para poner orden y gestión en algo que lleva muchas décadas de desorden”. Y agregó: “Hay políticos que se aprovechan de la desinformación de los vecinos o de su desesperación para salir a buscar culpables y tirarle ‘fardos’ a los demás”.
“Ya han estado al frente del gobierno provincial por casi 9 años y le tiran la pelota al gobierno nacional, es lamentable”, dijo el diputado nacional.
En cuanto a la gestión nacional sobre obras hídricas, expresó: “En ese sector nos encontramos, como en todas las áreas, con un Estado desmantelado, puesto al servicio de intereses particulares no del interés general: hubo un gran descontrol y una enorme desidia ante lo que le pueda pasar al vecino”, sostuvo.
“Un triste récord”
“El apoyo ante la inundación -sobre todo de las lagunas Melincué y La Picasa- es desde todos los ministerios de la Nación: Defensa, Desarrollo Social, Interior, Pami, el Sistema Federal de Emergencia que llevó $ 25 millones para los damnificados por la emergencia. Todos están trabajando en ambos lugares”, dijo Laspina.
Destacó que en Melincué se desarrolla un colector por 180 millones, que va a traer alivio, el 14 de junio se abren los sobres para la licitación del Canal San Antonio y en materia de obras hídricas, la provincia ha estado muchos años sin hacer nada, por eso, sus proyectos presentados ante la Nación son de un nivel muy rudimentario. No están en condiciones de ser licitados aún y hay que seguir trabajándolos, tal vez sea por la falta de diálogo que había antes entre el gobierno nacional (kirchnerista) y las autoridades provinciales”.
Subrayó que “por primera vez en La Picasa se hace un plan director, a cargo del Instituto Nacional del Agua y financiamos desde la Nación el reservorio 3, en Córdoba, que se licitará en junio y va a traer alivio a la zona aguas abajo. También financiamos estudios para recuperar la Ruta Nacional Nº 7”.
En esa laguna, “por la desidia de los gobiernos nacional y provincial, desde 2009 se frenaron todas las obras y tampoco hubo mantenimientos adecuados de la infraestructura existente, ni control de los canales clandestinos, lo que generó las consecuencias que vemos”.
“La provincia de Santa Fe es la última en la tabla de posiciones de la obra pública desde hace varios años. Eso se traduce en los problemas que vemos a diario, con un cuadro que se agravó por las condiciones climáticas”, definió.
“El gobierno nacional se ha puesto a trabajar en esto y hoy hay obras hídricas en marcha por 100 millones de pesos”, dijo.
Fondos a tamberos
Respecto de los $ 250 millones comprometidos por el gobierno nacional para ayudar a productores rurales, en especial tamberos, por las inundaciones, Laspina respondió: “Entiendo que se ha hecho un primer desembolso y que están previstos otros. Más allá del convenio firmado no se puede decir que la crisis de los tamberos responde a que exista un desembolso más o menos de la Nación... No se puede culpar a los demás por lo que ocurre con un sector que ha sido castigado con una política desastrosa de años del kirchnerismo”.
“En cualquier caso -siguió-, los acuerdos y los convenios están para cumplirse. Pero también es cierto que si hay alguna demora. Lo que tiene que hacer el gobierno provincial es comunicarse, hacer los pedidos formales y no salir de manera nerviosa, ansiosa, por los medios a señalar culpables. La gente se da cuenta de que ése es un mecanismo para evadir responsabilidades”.
“Con el gobierno provincial, desde la Nación tenemos una relación oscilante porque muchas veces los funcionarios provinciales nos sorprenden con estas salidas que parecen destinadas a hacer política, a un cálculo de corto plazo, en polémicas en los medios que la gente ya ha advertido”, reiteró.
El debate por la reforma tributaria
Luciano Laspina, además de presidir la Comisión de Presupuesto y Hacienda de la Cámara de Diputados de la Nación, también encabeza la Comisión Bicameral de Reforma tributaria.
“Éste va a ser un año de diagnósticos, porque estamos en un año electoral y avanzar va a ser difícil. Los impuestos son un tema sensible. Pretendemos al menos establecer en qué lugar está parada Argentina respecto de nuestros vecinos, y a nivel internacional en sus tributos”, señaló.
“Es una buena tarea para 2017 identificar los principales problemas de la Región para tener una base de discusión. Nuestra estructura tributaria está basada en impuestos al consumo, hay muchos impuestos al trabajo, muy elevados, y tributos distorsivos como el impuesto al cheque”, lamentó.
Para Laspina, “la excesiva carga tributaria argentina es un incentivo para la informalidad y tenemos una enorme economía en negro: laboral y tributaria”.
Aseguró que “esos ejes de diagnóstico claros van a plantear la reforma que va impulsar el Ejecutivo. Necesitamos un sistema impositivo menos regresivo pero que no pierda recaudación. Deberemos tener una sintonía fina, para la reforma”.
Sobre la discusión por el espacio fiscal entre Nación y Provincias, el economista rechazó que haya tensión: “En la medida en que la reforma sea neutral sobre la división de los recursos no creo que haya una tensión en ese sentido. Creo que la discusión Nación-Provincias se va a dar en el marco de la nueva Ley de Responsabilidad Fiscal: nos debemos un debate sobre Ingresos Brutos, que recarga muchísimo los precios en las góndolas”.