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Filtrado. El intendente de Rosario estuvo muy presente --vía telefónica- durante los debates por la reforma tributaria. Javkin tiene una complicada situación financiera y necesita recursos.
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Jueves y viernes fueron días trajinados en la Legislatura con mucho movimiento, mucha reunión para poder llevar adelante consensos y aprobar algunos de los mensajes remitidos por el Poder Ejecutivo, especialmente el vinculado con la reforma tributaria.
Quien no perdió pisada a los debates fue el intendente rosarino, Pablo Javkin quien se comunicaba permanentemente con el diputado Ariel Bermúdez. En más de una ocasión, fue el propio Bermúdez quien puso al habla al rosarino con los funcionarios del Ejecutivo provincial que informaban sobre la reforma y con líderes parlamentarios. Javkin tiene una complicada situación financiera y necesita recursos y de allí el interés por la ley tributaria.
Y no sólo habló con diputados. Antes se comunicó con el senador Felipe Michlig para que gestione un cambio de fondo en la ley que sube los impuestos. El jefe del bloque radical contó con el acuerdo de los senadores para que baje ingresos brutos para los bancos que en sus balances anuales no superen los 4.500 millones de pesos. Ese rango deja en mejor posición al Banco Municipal de Rosario y a los pequeños bancos cooperativos.